22.04.2013 Views

Las estaciones de la imaginación - rodriguezalvarez.com

Las estaciones de la imaginación - rodriguezalvarez.com

Las estaciones de la imaginación - rodriguezalvarez.com

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

6. EL LADO OSCURO DE LO IDEAL: LOS DEMONIOS O LAS MÁQUINAS EN EL JARDÍN<br />

94<br />

45<br />

50<br />

55<br />

60<br />

65<br />

70<br />

75<br />

80<br />

85<br />

—Tar<strong>de</strong> vienes, Goodman Brown —dijo—. El reloj <strong>de</strong> <strong>la</strong> iglesia <strong>de</strong> Old<br />

South* tocaba cuando atravesé Boston, ya hace más <strong>de</strong> quince minutos.<br />

—Fe me entretuvo un rato —replicó el joven, con temblor en <strong>la</strong> voz, causado<br />

por <strong>la</strong> súbita aparición <strong>de</strong> su <strong>com</strong>pañero, que sin embargo no era <strong>de</strong>l todo<br />

inesperada.<br />

Reinaba ahora una gran oscuridad en el bosque, aún más profunda en <strong>la</strong><br />

parte por <strong>la</strong> que ambos caminaban. Por lo poco que podía advertirse, el segundo<br />

viajero tenía unos cincuenta años; pertenecía, en apariencia, a <strong>la</strong> misma c<strong>la</strong>se<br />

social que Goodman Brown y guardaba con él un consi<strong>de</strong>rable parecido, aunque<br />

acaso más en <strong>la</strong> expresión que en los rasgos. Podía habérseles tomado por<br />

padre e hijo; pero, aunque el más viejo iba vestido con <strong>la</strong> misma sencillez que<br />

el joven, y pese a que también sus maneras eran sencil<strong>la</strong>s, había en él un<br />

in<strong>de</strong>scriptible aire <strong>de</strong> hombre <strong>de</strong> mundo, que no se hubiera sentido acobardado<br />

en <strong>la</strong> mesa <strong>de</strong>l gobernador o en <strong>la</strong> corte <strong>de</strong>l rey Guillermo*, si fuera posible que<br />

sus asuntos le llevasen a el<strong>la</strong>s. La única cosa que en él podía l<strong>la</strong>mar <strong>la</strong> atención<br />

era su bastón*, semejante a una gran serpiente negra, tan curiosamente <strong>la</strong>brada,<br />

que podía casi vérse<strong>la</strong> retorcerse y ondu<strong>la</strong>r <strong>com</strong>o un reptil vivo. C<strong>la</strong>ro que esto<br />

<strong>de</strong>bía ser un efecto óptico, ayudado por <strong>la</strong> escasa luz.<br />

—Vamos, Goodman Brown —exc<strong>la</strong>mó su <strong>com</strong>pañero <strong>de</strong> camino—; ése no<br />

es paso para un <strong>com</strong>ienzo <strong>de</strong> jornada. Cógete a mi bastón, si tan pronto te<br />

sientes cansado.<br />

—Amigo —dijo el otro, transformando su lenta marcha en parada <strong>de</strong>finitiva—,<br />

cumplido ya mi <strong>com</strong>promiso <strong>de</strong> encontrarme contigo aquí, he pensado<br />

darme <strong>la</strong> vuelta. Siento escrúpulos <strong>de</strong> lo que me propusiste.<br />

—¿Qué estás diciendo? —replicó el <strong>de</strong> <strong>la</strong> serpiente, sonriendo para sí—.<br />

Caminemos, mientras discutimos el asunto; y si te llego a convencer, no tendrás<br />

que volver atrás. Aún es poco lo que hemos andado.<br />

—¡Demasiado! —exc<strong>la</strong>mó Goodman, reanudando inconscientemente <strong>la</strong> marcha—.<br />

Mi padre nunca se a<strong>de</strong>ntró en los bosques con tal propósito, ni el suyo<br />

antes que él. La nuestra ha sido una estirpe* <strong>de</strong> hombres honrados y buenos<br />

cristianos <strong>de</strong>s<strong>de</strong> los días <strong>de</strong> los mártires; y ser el primero l<strong>la</strong>mado Brown que<br />

tome esta senda con...<br />

— . . . semejante <strong>com</strong>pañía, pue<strong>de</strong>s <strong>de</strong>cirlo, —observó el más viejo, interpretando<br />

su silencio—. ¡Bien dicho, Goodman Brown! He conocido a tu<br />

familia tan íntimamente <strong>com</strong>o al que más entre los puritanos*; y esto no es<br />

ninguna fruslería. Ayudé a tu abuelo el alguacil, cuando azotó a <strong>la</strong> mujer cuáquera*<br />

por <strong>la</strong>s calles <strong>de</strong> Salem; y yo fui quien trajo a tu padre <strong>la</strong> tea, prendida en mi<br />

propio hogar, con <strong>la</strong> que puso fuego a un pob<strong>la</strong>do indio, en <strong>la</strong> guerra <strong>de</strong>l rey<br />

Felipe*. Los dos eran gran<strong>de</strong>s amigos míos; y buenos paseos hemos dado por<br />

esta senda, para volver alegremente <strong>de</strong>spués <strong>de</strong> medianoche. Por ellos quiero<br />

ser tu amigo.<br />

—Si fuera <strong>com</strong>o dices —replicó Goodman Brown—, me extraña que nunca<br />

me hab<strong>la</strong>sen <strong>de</strong> estas cosas; aunque, a <strong>de</strong>cir verdad, no me asombra, pues <strong>la</strong><br />

menor sospecha los hubiera hecho huir <strong>de</strong> Nueva Ing<strong>la</strong>terra. Somos un pueblo<br />

piadoso y dado a <strong>la</strong>s buenas obras, y no toleramos tal impiedad.<br />

—Impiedad o no —dijo el viajero <strong>de</strong>l bastón trenzado—, conozco a todo el<br />

Iglesia <strong>de</strong> <strong>la</strong> ciudad<br />

<strong>de</strong> Boston, construida<br />

en 1669.<br />

Guillermo III (1650-<br />

1702), rey <strong>de</strong> Ing<strong>la</strong>terra<br />

cayado, báculo<br />

<strong>de</strong>scen<strong>de</strong>ncia<br />

Miembros <strong>de</strong> <strong>la</strong> Iglesia<br />

Protestante <strong>de</strong><br />

moral rigurosa.<br />

Miembro <strong>de</strong> <strong>la</strong> confesión<br />

religiosa que se<br />

opone a todo tipo <strong>de</strong><br />

violencia. En 1661 una<br />

ley permitía que fuesen<br />

azotados en público.<br />

Guerra (1675-1676)<br />

llevada a cabo contra<br />

Meta<strong>com</strong>oet, apodado<br />

“Felipe” <strong>de</strong> <strong>la</strong> tribu india<br />

<strong>de</strong> los Wampanoag.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!