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LA ZONA MUERTA - www.moreliain.com

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–¿Qué harás después?<br />

Johnny meneó la cabeza.<br />

–Aún no lo sé. Pero hay algo que sí sé.<br />

–¿De qué se trata?<br />

–Iré a buscar una botella de champán. Vamos a pillarnos una curda.<br />

Esa tarde de setiembre su padre se puso en pie y le palmeó la espalda.<br />

–Que sean dos –exclamó.<br />

Aún recibía cartas esporádicas de Sarah Hazlett. Ella y Walt esperaban su<br />

segundo hijo para abril. Johnny le hizo llegar sus felicitaciones y sus buenos<br />

deseos para la campaña de Walt. Y a veces rememoraba la tarde que había<br />

pasado con ella, la tarde larga y perezosa. No era un recuerdo qué dejara aflorar<br />

demasiado a menudo. Temía que el contacto permanente con la luz de la<br />

evocación lo decolorara y difuminara, <strong>com</strong>o sucedía con esas pruebas de tinte<br />

rojizo que acostumbraban a darte con los retratos de graduación.<br />

Ese otoño había salido un par de veces, una de ellas con la hermana mayor y<br />

recientemente divorciada de la amiguita de Chuck, pero los resultados habían<br />

sido nulos.<br />

La mayor parte del otoño la había pasado en <strong>com</strong>pañía de Gregory Ammas<br />

Stillson.<br />

Se había convertido en un especialista en Stillson. En un cajón de su cómoda<br />

guardaba tres carpetas de hojas intercambiables, bajo los calcetines y los<br />

calzoncillos y las camisetas. Estaban llenas de anotaciones, hipótesis y<br />

fotocopias de noticias.<br />

Esta actividad le inquietaba. Por la noche, mientras escribía con un rotulador<br />

de punta fina alrededor de los recortes periodísticos pegados, a veces se sentía<br />

<strong>com</strong>o si fuera Arthur Bremmer, el joven que había atentado contra George<br />

Wallace, o la señora Moore, que había pretendido disparar contra Jerry Ford.<br />

Sabía que si Edgar Lancte, Intrépido Esbirro del Efe Be I, lo veía haciendo eso,<br />

su teléfono, su sala y su cuarto de baño se poblarían instantáneamente de<br />

dispositivos de escucha electrónica. Una furgoneta de la fábrica de muebles<br />

Acme se estacionaría frente a su casa, pero en lugar de estar llena de muebles

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