IDL-47210

Módulo 11
La principal desventaja de este tipo de muestreo es que:
En comparación con el muestreo aleatorio simple, hay una mayor probabilidad de que
la muestra final no sea representativa del total de la población de estudio, ya que depende
sobre todo del número de conglomerados que se seleccione en el primer estadio.
Cuanto mayor sea el número de conglomerados, mayor es la probabilidad de que la
muestra sea representativa. Adicionalmente, las unidades de muestreo a nivel de la
comunidad deben seleccionarse aleatoriamente (¡evite el muestreo por conveniencia!).
Sesgo en el muestreo
El sesgo es un error sistemático en los procedimientos de muestreo que conlleva
una distorsión de los resultados del estudio.
En el módulo 10 se comenta cómo el uso de herramientas de recolección de
datos defectuosas puede derivar en la obtención de datos sesgados. Puede haber
un sesgo introducido como consecuencia de procedimientos de muestreo
inadecuados, que tienen como resultado una muestra poco representativa de la
población de estudio.
Por ejemplo, se llevó a cabo un estudio para determinar las necesidades en el
ámbito de la salud en una población rural, para planear las actividades básicas de
atención. Sin embargo, se dejó fuera del estudio una tribu nómada que representaba
una tercera parte de la población total. Como resultado, el estudio no dio un
cuadro preciso de las necesidades de la población total.
Hay varias fuentes de sesgos que pueden aflorar durante el muestreo. La más
conocida es la de la falta de respuesta.
La falta de respuesta puede ocurrir en cualquier situación en que se haga una entrevista,
pero se da sobre todo en las encuestas a gran escala con cuestionarios
auto-administrados. Los encuestados pueden negarse a llenar el cuestionario u
olvidar hacerlo. El problema está en que en una muestra dada, los encuestados
que no responden pueden tener características que difieran sistemáticamente
de las de los que sí responden.
Hay diversas maneras de tratar este problema y reducir la posibilidad de sesgos:
• Las herramientas de recolección de datos (incluyendo las indicaciones por
escrito para que los entrevistadores las utilicen con los posibles encuestados)
deben pretestearse y, de ser necesario, deben ajustarse para asegurar
una mejor cooperación.
• Si la falta de respuesta se debe a la ausencia de algunos de los individuos
con quienes se contaba, puede considerarse darles seguimiento.
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