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La ciencia, el desarrollo tecnológico y la innovación en Querétaro. Historia, realidad y proyecciones.poseían el aparato, también se estuvo observando el fenómeno (La Sombra de Arteaga, 10 demayo de 1878). Lo mismo sucedió con un eclipse de Luna, que fue posible observar “con todacomodidad” debido a que el clima “era muy agradable” (La Sombra de Arteaga, 21 de noviembrede 1891), y con la observación de un cometa en la Constelación del Pegaso, con un color“ligeramente verdoso” (La Sombra de Arteaga, 08 de mayo de 1892). La astronomía era “entretodas las ciencias, la que ha hecho mejores progresos” (La Sombra de Arteaga, 30 de mayo de1892).Otra explicación aparecida como nota científica, fue la entregada por un periódico americanoacerca del color rojo que se observaba en el horizonte al ponerse el Sol, y que según expuso,obedecía al paso de la Tierra por una región de polvo meteórico (La Sombra de Arteaga, 19 deenero de 1884).Otra nota consigna la aparición de un cometa que podría observarse a simple vista. Su paso --según difundió el Herald de Nueva York y repitió La Sombra de Arteaga-- permitiría estudiar loscambios termales del Sol, sus efectos sobre los cuerpos que se mueven dentro del sistema solar, yla relación que pueden tener con los diferentes estados de la atmósfera terrestre (La Sombra deArteaga, 2 de febrero de 1884).Acerca del planeta Marte, se comentaban los trabajos de Schiaparelli, 7 con observacionestelescópicas que lo dividían en “continentes surcados de canales, en su mayor parte paralelos, queponen en comunicación las aguas de los océanos” (La Sombra de Arteaga, 26 de julio de 1891).El editor señalaba que a partir de los descubrimientos de Schiaparelli y de los adelantos técnicos,no pasaría mucho tiempo para ver a los habitantes de la Luna y de Marte dedicados a sus labores,pues se había demostrado que en ambos lugares había condiciones para la vida (La Sombra deArteaga, 10 de abril de 1887).Además, se descubrió que las nebulosas estaban compuestas de un estado gaseoso, materia “queha servido para la formación de todos los cuerpos que existen en el mundo (…) Se designa con elnombre de materia cósmica a esta sustancia primordial” (La Sombra de Arteaga, 31 de octubre de1891).M. J. Vinot resolvió el “enigma de la naturaleza” acerca de por qué el cielo es azul, afirmandoque los rayos del Sol que llegaban a la Tierra eran reflejados en todas direcciones, dando suaspecto característico a la atmosfera, catalogando el efecto como “un espejismo seductor” (LaSombra de Arteaga, 13 de diciembre de 1895). También se observaron estrellas fugaces y “unagran lluvia meteórica” (La Sombra de Arteaga, 24 de enero de 1893).7 En algunos casos aparece como Schiaparelli, y en otros como Schiapurelli. Giovanni Virginio Schiaparelli (Savigliano, Milán,1835-1910). Astrónomo italiano, graduado en ingeniería civil en Turín (1854), se dedicó a la astronomía. En 1862 asumió ladirección del Observatorio astronómico milanés de Brera, donde permaneció por espacio de 40 años. Con instrumentos aúnprimitivos, descubrió el asteroide "Herperia". Después, con mejores aparatos, inició en 1877 sus famosas observaciones deMarte, cuyos resultados aparecieron en Atti dell'Accademia dei Lincei, de 1878 a 1910 (Observaciones astronómicas y físicassobre el eje de rotación, la topografía y la constitución del planeta Marte). Disponible enhttp://www.biografiasyvidas.com/biografia/s/schiaparelli.htm120