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La ciencia, el desarrollo tecnológico y la innovación en Querétaro. Historia, realidad y proyecciones.olivera, un tazón de mayólica con decoración en verde sobre blanco y otro más con decoraciónfitomorfa en verde sobre blanco. 30En el año 2008 en una nueva intervención de restauración del edificio fueron registradosmateriales arqueológicos recuperados de las excavaciones realizadas para la reestructuración delPortal de Novicias, así como de las excavaciones sistemáticas bajo la escalera del claustro.Entre los materiales se identificaron fragmentos de platos, tazas y tazones de mayólicasdecoradas en verde sobre blanco, candeleros y macetas en vitrificado verde. También fueronregistrados numerosos fragmentos de ollas con acabado alisado y decoración pintada en rojo.La exploración bajo las escaleras del Claustro principal (Figura 3), en donde existieron dosconfesionarios, dejó evidente, a una profundidad de 42 centímetros la parte superior de un murode adobes. Los adobes miden 62 centímetros de largo por 30 centímetros de ancho y 10centímetros de espesor, formando el muro con aparejo a tiza o tizón. Este muro presenta por sucara sur un enlucido rojo, en tanto que por la cara norte no hay enlucido y muestra una avanzadaerosión, lo que permite identificarla como cara exterior. Por la parte interior fueron encontradaspiezas de cerámica, completas, entre ellas un bacín y un candelero de cerámica vidriada ámbar yun candelero con recubrimiento vidriado en verde.Por la cara exterior del muro se presentó un solo estrato de tierra, arena y pedacería de cerámica,el cual se alcanzó a registrar a una profundidad de 1.45 metros. Se trata de un basurero decerámica que muestra diversos momentos del proceso de elaboración de cerámica, tepalcates malcocidos, rotos, torcidos, sobre cocidos, reventados, chorreados (Figura 4). Junto con estos sedescubrió gran cantidad de tricoles, instrumento del mismo barro que sirvió como separador entrecada plato o tazón al momento de meterse al horno. Tal hallazgo nos permitía plantear lahipótesis de trabajo de que, en ese sector, había existido un taller de cerámica vidriada y demayólica.Figura 4. Tepalcates de cerámica mayólica, desecho del proceso de elaboración. Santa Rosa de Viterbo.Después de lavar más de 2,000 tepalcates, observamos que se trataba de fragmentos de platos,tazones, tazas, macetas, candeleros, ollas y algunas figurillas.30 Daniel Valencia, “Botija de aceite y tazones de mayólica”, en Nuestras Voces, Boletín del Centro INAH Querétaro, Núm. 3,Querétaro, agosto-septiembre de 2002.64