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La producción de cerámica en Querétaro a principios del siglo XVIII. Un acercamiento arqueológico e histórico.Los colores usados en la decoración son por una parte el verde, amarillo, naranja y azul condelineados en negro. Los diseños representan paisajes, con personajes masculinos y femeninosrecreando la vida del campo, y diseños fitomorfos con representaciones de hojas y flores comomotivo central de la pieza. Un diseño característico es el “águila republicana” como motivocentral de platos. Otro grupo se caracteriza por el uso del color azul en diferentes tonalidades condiseños fitomorfos y zoomorfos, en especial representaciones de aves como motivo central de laspiezas. 27Cerámica alisadaCerámica común, cuyo acabado superficial se realizó con la pieza aún fresca, mediante alisadoresde madera, piedra, olote e inclusive la mano. Puede presentar en ocasiones un delgado engobe deun barro mas fino en su superficie, aunque no es común. La cantidad de materiales y de tiempoen su elaboración, permite afirmar que es una pieza barata en relación con las vitrificadas. Enrelación a su técnica de elaboración, las piezas son más burdas, con menos recursos para sudecoración, y frágiles.Este tipo de cerámica fue abundante en el periodo prehispánico, principalmente en ollas y cajetesde uso doméstico, como recipientes de líquidos y granos, así como en la preparación dealimentos. Considerando que en toda Mesoamérica se elaboraban piezas de este tipo desde haceaproximadamente 3,000 años, la cerámica alisada continuó manufacturándose durante el periodonovohispano, tanto en las grandes ciudades como en los pueblos.Esta cerámica no requirió de innovaciones tecnológicas, con excepción del uso del tornomecánico, que permitió aumentar la producción de piezas. Las piezas se siguieron elaborandomediante la técnica de modelado y moldeado, y se continuaron quemando en hornos simples acielo abierto o tapados con fragmentos de piezas desechadas, a temperaturas que no superaban los300 grados. A la decoración más común en la época prehispánica que fue el pastillaje, laimpresión de dedos, el punzonado y la pintura, se sumó en el periodo novohispano el sellado y laincrustación de pedazos de concha y porcelana. 28Además de las formas señaladas, los comales, lebrillos, macetas, ollas con y sin asa, cántaros,jarras, cazuelas y platos, así como miniaturas y figurillas de personajes cotidianos. Tambiénpueden encontrarse elementos arquitectónicos como tuberías, gárgolas, tejas y losetas.En resumen, esta cerámica es el mejor ejemplo de cómo los alfareros indígenas, aunque hayanadoptado nuevas técnicas de elaboración de cerámica, continuaron produciendo en talleresfamiliares, cerámica pulida, alisada y bruñida. Esta producción fue ampliamente consumida porla población indígena y mestiza a lo largo del periodo novohispano y del México Independiente.Esta tradición expresada en producciones locales continúa usando técnicas y formas de objetosprehispánicos en la actualidad.27 Gorky González, Traditional cerámica of Guanajuato, San Antonio Texas, Mexican Cultural Institute, 1991, pp 9-10.28 Patricia Fournier, Evidencias arqueológicas de la importación de cerámica en México, con base en los materiales delExconvento de San Jerónimo, México, Colección Científica Núm. 213, 1990, pp 241-242; López, op. cit., pp 31-32.61