11.07.2015 Views

La ciencia, el desarrollo tecnol󧩣o y la innovaci󮠥n Quer굡ro ... - Concyteq

La ciencia, el desarrollo tecnol󧩣o y la innovaci󮠥n Quer굡ro ... - Concyteq

La ciencia, el desarrollo tecnol󧩣o y la innovaci󮠥n Quer굡ro ... - Concyteq

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

Inha<strong>la</strong>ndo y exp<strong>el</strong>iendo humos. Una historia de <strong>la</strong> fábrica de cigarros de QuerétaroAsí pues, luego que se recibían en <strong>la</strong> fábrica de Querétaro los tercios 31 de hojas enviados por <strong>el</strong>Almacén General en <strong>la</strong> Ciudad de México, se procedía a su reconocimiento en presencia d<strong>el</strong>contador, d<strong>el</strong> sujeto que dirigiera <strong>la</strong>s <strong>la</strong>bores, y de un escribano: “Seña<strong>la</strong>ndo los que seancorrespondientes a los partidos principales por su buena calidad, madurez, suavidad y fraganciadistinguiéndolos los <strong>la</strong>rgos, cortos, y puntas, y los segundos, terceros cuartos y quintosobservando si <strong>la</strong> hoja de los manojos está apedreada o injuriada por <strong>el</strong> tiempo y dando <strong>la</strong>saplicaciones oportunas a <strong>la</strong>s c<strong>la</strong>ses de exquisito y fino”. 32Concluida <strong>la</strong> recepción, junto con algunos peones tenían que separar los manojos, según sucalidad. Después de desmanojar los tabacos dando un golpe seco sobre una piedra firme, 33 losoperarios se dirigían al patio central en donde estaba colocada una gran pi<strong>la</strong> de agua en <strong>la</strong> quetenían que mojar <strong>el</strong> tabaco para darle cierta humedad, <strong>la</strong> que fuera necesaria, para permitir untorcido suave y que <strong>la</strong> hoja no se rompiera por estar muy seca.Por reg<strong>la</strong>mento había una secuencia en <strong>el</strong> trabajo en <strong>la</strong> que no se permitía ninguna alteración por<strong>el</strong> perjuicio que pudiera causar a <strong>la</strong> producción. Por ejemplo, para <strong>el</strong> caso de <strong>la</strong> humedad de <strong>la</strong>shojas, estaba prohibido humedecer <strong>la</strong>s hojas de toda <strong>la</strong> semana porque se corría <strong>el</strong> riesgo de quese fermentaran, de modo que había que humedecer sólo <strong>la</strong> cantidad de tabaco que podíatrabajarse de un día para otro. 34Una vez separados los manojos, se tenían que cortar “dos porciones de <strong>la</strong> punta [de <strong>la</strong>s hojas]para que quedaran ais<strong>la</strong>das de <strong>la</strong>s cabezas”. 35 Estas cabezas se mezc<strong>la</strong>ban con otras hojas demenor calidad, en <strong>el</strong> primer cernido, 36 y formaban lo que se conocía como “c<strong>la</strong>se de fino”.Ya que estaban cortados los manojos, <strong>la</strong>s hojas tenían que tenderse en <strong>el</strong> asoleadero para quetodos los peones surcaran <strong>la</strong>s hojas “al modo que <strong>el</strong> trigo con <strong>la</strong>s pa<strong>la</strong>s”. Si era verano, en dosturnos (10 de <strong>la</strong> mañana y 3 de <strong>la</strong> tarde), y a <strong>la</strong>s 4 y 6 de <strong>la</strong> tarde en tiempo de invierno. Una vezque <strong>el</strong> sol bajaba, recogían todo <strong>el</strong> tabaco surcado y lo guardaban en sacos que colocaban en <strong>el</strong>almacén, repitiendo <strong>la</strong> operación al día siguiente. Para que <strong>la</strong>s hojas quedaran suficientementesecas, <strong>la</strong> operación se repetía dos veces. Y si todavía guardaba cierta humedad se volvían a tenderen <strong>el</strong> asoleadero, pero reduciendo <strong>la</strong> cantidad a <strong>la</strong> cuarta parte.Sabemos que <strong>el</strong> almacén en donde guardaban <strong>la</strong>s hojas secas debió tener algunas disposicionesespeciales. Por ejemplo, que fuera un salón alto para que se guardara cierto calor, pero a <strong>la</strong> vezdebería de estar bien venti<strong>la</strong>do, sin paredes, para que con <strong>la</strong> combinación de calor y aire pudieramolerse más fácilmente. Por reg<strong>la</strong>mento, así tenían que ser. Pero por <strong>la</strong> descripción de Alejandro31 Empaque especializado para transportar <strong>la</strong>s hojas de tabaco (Suárez, 1997: 41).32 Archivo General de Madrid (AGM), “Reg<strong>la</strong>mento de <strong>la</strong>s <strong>la</strong>bores d<strong>el</strong> Tabaco polvo de <strong>la</strong>s Reales Fábricas de Sevil<strong>la</strong>, coninclusión de <strong>la</strong>s de cigarros, para <strong>la</strong> más completa y ventajosa perfección de <strong>la</strong>s respectivas <strong>la</strong>bores”, Ministerio de Hacienda,Órdenes Generales de <strong>la</strong> Renta, libro 8.041, legajo 4.333 f. 138-161, capítulo 1, “Sobre <strong>el</strong> reconocimiento y peso de los Tabacosa su entrada en estas Reales fábricas, reg<strong>la</strong>s y formalidades que han de observarse en esta importante diligencia” (sic), núm. 4al margen izq.33 Instrucciones de José de Lozada (López y Hernández, 1990: 69).34 Íbidem, capítulo 9, “Sobre <strong>la</strong> Fábrica de Cigarros”, núm. 105 al margen izq.35 Íbidem, capítulo 2, “Sobre <strong>el</strong> beneficio de Azotea”, núm. 9 al margen izq.36 Co<strong>la</strong>do.81

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!