14.05.2013 Views

re - Ateneo de Madrid

re - Ateneo de Madrid

re - Ateneo de Madrid

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

- 231 —<br />

lejos <strong>de</strong> <strong>de</strong>jarse <strong>de</strong>vorar por los avisos, aumentan las páginas <strong>de</strong> lectura á medida<br />

que éstos se multiplican. Pero, ¿á cuánto ven<strong>de</strong>n el número? ¿Olvidáis<br />

que su p<strong>re</strong>cio oscila ent<strong>re</strong> quince y veinticinco céntimos <strong>de</strong> franco? Seamos<br />

equitativos, como no lo podréis ser nunca en Marsella... Es casi seguro qixe<br />

nuestro vecino ocasional no hubiera arrojado el periódico, proclamando su ineficacia,<br />

si admitiera la posibilidad <strong>de</strong> pagarlo mejor. Y sob<strong>re</strong> todo, si en vez<br />

<strong>de</strong> leerlo en el café, don<strong>de</strong> nada le cuesta, se acostumbrase á comprarlo personalmente...<br />

Porque estos ejempla<strong>re</strong>s que nos of<strong>re</strong>ce con generosidad no exenta<br />

<strong>de</strong> interés nuestro limonadier amable, son el grave perjuicio con que tiene<br />

que luchar más <strong>de</strong> una emp<strong>re</strong>sa periodística...<br />

El meridional sonrió, se encogió <strong>de</strong> hombros, sacó su cartera <strong>de</strong> apuntes y<br />

se dio á amontonar líneas, como si, atacado en un cong<strong>re</strong>so, p<strong>re</strong>parase en <strong>re</strong>spuesta<br />

una argumentación ir<strong>re</strong>futable.<br />

La tar<strong>de</strong> se diluía en gris sob<strong>re</strong> las fachadas <strong>de</strong> los edificios; invadía los<br />

negocios, en cuyas vitrinas comenzaban á brotar guirnaldas <strong>de</strong> luz eléctrica,<br />

y vertía sob<strong>re</strong> el bulevar rumo<strong>re</strong>ante "una tenue claridad azul que lo i<strong>de</strong>alizaba<br />

todo. La ola <strong>de</strong> los carruajes, <strong>de</strong>tenida á intervalos por el gesto sobrio <strong>de</strong> un<br />

guardián, volvía á <strong>re</strong>anudar su monotonía multicolor y acariciadora así que<br />

pasaba el tropel <strong>de</strong> transeúntes que aguardaba para atravesar á la otra acera.<br />

Los ven<strong>de</strong>do<strong>re</strong>s <strong>de</strong> baratijas asediaban á los grupos que se rozaban y se escurrían<br />

en el amontonamiento, levantando un rumor <strong>de</strong> mar lejano. Las gran<strong>de</strong>s<br />

letras <strong>de</strong> luz <strong>de</strong> los anuncios teatrales comenzaban á surgir sob<strong>re</strong> la sombra<br />

c<strong>re</strong>ciente. Y en el ent<strong>re</strong>vero fantástico <strong>de</strong>l gran centro, ahito <strong>de</strong> multitud, <strong>de</strong><br />

luz y <strong>de</strong> colo<strong>re</strong>s, pasaban roncos, <strong>de</strong>sbaratando la armonía <strong>de</strong> los grupos,<br />

abriéndose hueco, saltando <strong>de</strong> comprador en comprador, como epilépticos enfu<strong>re</strong>cidos,<br />

los primeros camelots que voceaban las noticias <strong>de</strong> la noche.<br />

—Y para plato <strong>de</strong> <strong>re</strong>sistencia, el canard—murmuró <strong>de</strong>s<strong>de</strong>ñosamente, como<br />

si completase un pensamiento hostil, el marsellés entusiasta, que <strong>de</strong>spués <strong>de</strong><br />

haber escrito muchas líneas se metía el lápiz en el bolsillo—; ¡cuánto más lógica<br />

<strong>re</strong>sulta mi concepción <strong>de</strong> la P<strong>re</strong>nsa!...<br />

Y como su contradictor ensayara un. gesto vago:<br />

—Reíos, gentes incrédulas que c<strong>re</strong>éis saberlo todo porque sabéis ironizar<br />

—-continuó en tono zumbón—; yo también he ap<strong>re</strong>ndido á tener en cuenta<br />

las <strong>re</strong>alida<strong>de</strong>s, pero no ignoro que hay casi siemp<strong>re</strong> en ellas un semillero <strong>de</strong><br />

imp<strong>re</strong>visto. ¿Por qué no había <strong>de</strong> saber p<strong>re</strong>miar el público un gran esfuerzo<br />

leal?... ¿Por qué no ha <strong>de</strong> po<strong>de</strong>r vivir en París un diario digno <strong>de</strong> la intelectualidad<br />

francesa?... ¿Queréis que os pruebe que la aventura es posible?... He<br />

aquí las notas que acabo <strong>de</strong> coordinar, mientras vosotros, homb<strong>re</strong>s prácticos,<br />

os ent<strong>re</strong>teníais en arrojar humo y en comentar un est<strong>re</strong>no <strong>de</strong> que nadie se<br />

acordará mañana...

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!