22.07.2013 Views

Vol. 2, Page 99 - Colegio de Capellanes de Venezuela

Vol. 2, Page 99 - Colegio de Capellanes de Venezuela

Vol. 2, Page 99 - Colegio de Capellanes de Venezuela

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

autorida<strong>de</strong>s lograron más o menos contener. Pero el día 4 <strong>de</strong> noviembre <strong>de</strong> ese año <strong>de</strong><br />

1780 Condorcanqui se alzó, tomando el nombre <strong>de</strong> Tupac Amaru II. Su rebelión fue más<br />

difícil <strong>de</strong> apagar, pues supo atraerse a mestizos, negros y blancos pobres, que se sentían<br />

oprimidos por los impuestos onerosos, las mitas, el servicio personal que los gran<strong>de</strong>s<br />

terratenientes esperaban, etc. A<strong>de</strong>más, Tupac Amaru II insistía en que su rebelión no era<br />

contra la religión católica, <strong>de</strong> la que se proclamaba hijo fiel, ni tampoco contra los<br />

españoles por el solo hecho <strong>de</strong> serlo, sino contra las injusticias <strong>de</strong> algunos pocos<br />

españoles po<strong>de</strong>rosos y corruptos. Por ello fue necesario enviar <strong>de</strong>s<strong>de</strong> Buenos Aires un<br />

ejército <strong>de</strong> 17.000 hombres que por fin lo batió e hizo prisionero. Llevado ante el<br />

visitador José Antonio <strong>de</strong> Areche, uno <strong>de</strong> los principales explotadores, se le preguntó<br />

quiénes eran sus cómplices, y se cuenta que respondió:<br />

“Nosotros somos los únicos conspiradores. Vuestra merced. por haber<br />

agobiado al país con exacciones insoportables. Y yo, por haber querido<br />

libertar al pueblo <strong>de</strong> semejante tiranía.<br />

Areche con<strong>de</strong>nó a Tupac Amaru a muerte. A<strong>de</strong>más, antes <strong>de</strong> ajusticiarlo hizo morir<br />

en su presencia a su esposa. Su hermano, Diego Cristóbal Tupac Amaru, continuó la<br />

rebelión hasta que él también fue apresado y ahorcado.<br />

La obra misionera<br />

Como era <strong>de</strong> esperarse dados tales comienzos, la obra misionera en el Perú no fue al<br />

principio muy exitosa. La actuación <strong>de</strong> Valver<strong>de</strong> en Cajamarca indica el tono y carácter<br />

<strong>de</strong> la mayoría <strong>de</strong> los primeros sacerdotes que visitaron el país.<br />

Y hasta la propia corona estaba dispuesta a premiar tal conducta, pues Valver<strong>de</strong> fue<br />

hecho primer obispo <strong>de</strong> Cuzco. La actitud <strong>de</strong> los indios hacia tales obispos se puso <strong>de</strong><br />

manifiesto cuando los <strong>de</strong> la Isla <strong>de</strong> Puná pudieron echarle mano al señor obispo y, en<br />

venganza por viejos crímenes cometidos por los conquistadores con [<strong>Vol</strong>. 2, <strong>Page</strong> 215]<br />

su anuencia, se lo comieron. A<strong>de</strong>más, no faltaron los curas que vinieron a América a<br />

hacerse ricos, como aquel Hernando <strong>de</strong> Luque que costeó la empresa <strong>de</strong> Pizarro.<br />

Al igual que en otras regiones, la labor misionera quedó a cargo <strong>de</strong> las cuatro gran<strong>de</strong>s<br />

ór<strong>de</strong>nes <strong>de</strong> dominicos (los primeros en llegar), franciscanos, mercedarios y jesuitas. Pero<br />

aun esas ór<strong>de</strong>nes <strong>de</strong> estricta pobreza no estaban exentas <strong>de</strong> las tentaciones producto <strong>de</strong> la<br />

corrupción reinante. De los mercedarios se contaba toda suerte <strong>de</strong> historias <strong>de</strong> vicios,<br />

licencia y rapiña. Cuando fue enviado un visitador para investigar la situación, éste murió<br />

misteriosamente en San Salvador, antes <strong>de</strong> llegar al Perú. Por largo tiempo el alto clero se<br />

hizo partícipe y se benefició <strong>de</strong> la explotación <strong>de</strong> que eran objeto los indios. Y tampoco<br />

protestó cuando se <strong>de</strong>cidió tener iglesias separadas, unas para los indios y otras para los<br />

blancos.<br />

En tales circunstancias, no ha <strong>de</strong> extrañarnos que muchos indios se negaran a aceptar<br />

el cristianismo, y que hasta hubiera caciques que mataran a aquellos <strong>de</strong> entre sus súbditos<br />

181

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!