22.07.2013 Views

Vol. 2, Page 99 - Colegio de Capellanes de Venezuela

Vol. 2, Page 99 - Colegio de Capellanes de Venezuela

Vol. 2, Page 99 - Colegio de Capellanes de Venezuela

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

Esto a su vez llevó a gran<strong>de</strong>s <strong>de</strong>bates entre eruditos acerca <strong>de</strong> mil cuestiones<br />

relacionadas con la literatura bíblica; por ejemplo, quién escribió tal o cual libro, y en qué<br />

fecha, o si el libro en sí es obra <strong>de</strong> un solo autor, o <strong>de</strong> varios. En medio <strong>de</strong> tales <strong>de</strong>bates,<br />

muchos vieron amenazada su fe. Otros trataron <strong>de</strong> re<strong>de</strong>finir lo que era la fe cristiana. Y<br />

poco a poco se fueron <strong>de</strong>sarrollando mejores métodos <strong>de</strong> estudio bíblico que a la postre<br />

ayudarían a enten<strong>de</strong>r mejor la Biblia.<br />

Algo semejante sucedió con los estudios <strong>de</strong> historia <strong>de</strong> la iglesia. La i<strong>de</strong>a <strong>de</strong> que las<br />

doctrinas cristianas habían evolucionado se posesionó <strong>de</strong> la mentalidad <strong>de</strong>l siglo XIX.<br />

Para algunos, esa evolución no era sino un <strong>de</strong>sarrollo <strong>de</strong> lo que ya estaba implícito en el<br />

mensaje original. Pero otros, como el famoso historiador Adolph von Harnack (1851–<br />

1930), veían en la historia <strong>de</strong> los dogmas la historia <strong>de</strong>l abandono progresivo <strong>de</strong>l mensaje<br />

original <strong>de</strong> Jesús, que no era acerca <strong>de</strong> Jesús. Según Harnack, lo que Jesús predicó fue la<br />

paternidad <strong>de</strong> Dios, la fraternidad universal, el valor infinito <strong>de</strong>l alma humana, y el<br />

mandamiento <strong>de</strong> amor. Fue <strong>de</strong>spués, por un proceso que tomó años, que Jesús vino a ser<br />

el centro <strong>de</strong>l mensaje. Buena parte <strong>de</strong> estas i<strong>de</strong>as <strong>de</strong> Harnack eran tomadas <strong>de</strong> uno <strong>de</strong> los<br />

más influyentes teólogos <strong>de</strong>l siglo XIX, Albrecht Ritschl (1822–1889), a quien Harnack<br />

llegó a llamar “el último <strong>de</strong> los padres <strong>de</strong> la iglesia”. Al igual que Schleiermacher, Ritschl<br />

respondió al reto <strong>de</strong> Kant colocando la religión en una esfera distinta <strong>de</strong> la “razón pura” o<br />

especulativa. Pero Ritschl no podía concordar con Schleiermacher, cuya insistencia en el<br />

“sentimiento <strong>de</strong> <strong>de</strong>pen<strong>de</strong>ncia absoluta” le parecía <strong>de</strong>masiado subjetivista. Según Ritschl,<br />

la religión, y muy particularmente el cristianismo, no es cuestión <strong>de</strong> especulación<br />

racional, ni tampoco <strong>de</strong> sentimiento subjetivo, sino <strong>de</strong> vida práctica. El racionalismo<br />

especulativo es <strong>de</strong>masiado frío, y no obliga a quien sigue ese camino a un compromiso <strong>de</strong><br />

fe. El misticismo, por otra parte, es subjetivo e individualista, y le presta poca atención a<br />

la necesidad <strong>de</strong> una comunidad <strong>de</strong> creyentes.<br />

Pero el cristianismo ha <strong>de</strong> ser práctico también en el sentido <strong>de</strong> que se ha <strong>de</strong> basar en<br />

el conocimiento factual <strong>de</strong> los acontecimientos, y en particular <strong>de</strong>l acontecimiento <strong>de</strong><br />

Jesús. Lo importante es la revelación <strong>de</strong> Dios dada en la historia, en la persona <strong>de</strong><br />

Jesucristo. Cuando la teología olvida esto, cae en el racionalismo o en el misticismo. Ese<br />

estudio histórico, según Ritschl, nos lleva a la conclusión <strong>de</strong> que el centro <strong>de</strong> las<br />

enseñanzas <strong>de</strong> Jesús fue el Reino <strong>de</strong> Dios, y la ética <strong>de</strong>l Reino, que es la “organización <strong>de</strong><br />

la humanidad mediante la acción inspirada en el amor”. Fue en virtud <strong>de</strong> tales enseñanzas<br />

que Ritschl le dio impulso [<strong>Vol</strong>. 2, <strong>Page</strong> 429] al pensamiento <strong>de</strong> Rauschenbush sobre el<br />

evangelio social, a que nos hemos referido anteriormente (en el capítulo 1).<br />

Todo esto dio en lo que se llamó “la búsqueda <strong>de</strong>l Jesús histórico”. Detrás <strong>de</strong>l Jesús<br />

<strong>de</strong> la fe a quien la iglesia adora, se pensaba, y aun <strong>de</strong>trás <strong>de</strong> los Evangelios, hubo un Jesús<br />

histórico a quien es necesario re<strong>de</strong>scubrir para saber a ciencia cierta qué es el<br />

cristianismo. A esta búsqueda se <strong>de</strong>dicaron muchos eruditos. A la postre, a principios <strong>de</strong>l<br />

siglo XX, Schweitzer, el famoso misionero, médico, músico y teólogo, <strong>de</strong>claraba que en<br />

fin <strong>de</strong> cuentas toda esa búsqueda <strong>de</strong>l Jesús supuestamente histórico había tratado <strong>de</strong><br />

encontrar a un hombre <strong>de</strong>l siglo XIX, y no le había encontrado a él, sino a su propia<br />

imagen. Por tanto, <strong>de</strong>claraba Schweitzer, “es bueno que el Jesús histórico <strong>de</strong> verdad<br />

<strong>de</strong>ponga al Jesús mo<strong>de</strong>rno, se levante contra el espíritu mo<strong>de</strong>rno y traiga sobre el mundo,<br />

368

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!