Informe sobre desarrollo humano para Mercosur 2009-2010 - OEI
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<strong>Informe</strong> <strong>sobre</strong> <strong>desarrollo</strong> <strong>humano</strong> <strong>para</strong> <strong>Mercosur</strong> <strong>2009</strong>-<strong>2010</strong>. Innovar <strong>para</strong> incluir: jóvenes y <strong>desarrollo</strong> <strong>humano</strong><br />
restantes ciudades. Este tipo de discriminación<br />
tiene lugar, principalmente, en los establecimientos<br />
educativos. Más aún, en Montevideo<br />
y en Buenos Aires las escuelas y colegios son<br />
los únicos ámbitos donde el color de la piel es<br />
denunciado como causa de discriminación. En<br />
Asunción se agregan los espacios públicos y en<br />
Rio de Janeiro los espacios públicos y los lugares<br />
de trabajo.<br />
La pobreza es señalada por los jóvenes<br />
como el tercer factor de discriminación. Dicha<br />
posición relativa está determinada, en buena<br />
medida, por la experiencia de los jóvenes de<br />
Asunción, 30% de los cuales menciona a la pobreza<br />
como el motivo principal. Excepto en los<br />
establecimientos educativos, en los demás lugares<br />
se advierten porcentajes significativos de<br />
discriminación a la pobreza en los datos de esta<br />
ciudad 25 . Es importante considerar que los jóvenes<br />
que mencionan a la pobreza como causa<br />
de discriminación posiblemente estén considerando<br />
un conjunto de factores determinantes<br />
de su experiencia que no posee límites definidos<br />
y que impide reconocer el atributo dis<strong>para</strong>dor<br />
de la discriminación (que podría ser la<br />
forma de vestir, la manera de hablar o el lugar<br />
de residencia).<br />
La cuarta causa de discriminación es la forma<br />
de hablar. En tres de las cuatro ciudades el<br />
lenguaje tiene una alta significación en las relaciones<br />
que se entablan en los colegios 26 .<br />
Los tres factores restantes –falta de contactos,<br />
lugar de residencia y género– son mencionados<br />
en menor medida que el resto. Se señalan<br />
experiencias de trato discriminatorio por<br />
falta de contactos o conexiones en los lugares<br />
de trabajo y en los organismos públicos. Por su<br />
parte, el lugar de residencia suele ser señalado<br />
por jóvenes que viven en áreas marginales<br />
como un estigma que reduce sus oportunidades<br />
de trabajo y de acceso a servicios públicos.<br />
Sin embargo, el impacto más generalizado del<br />
lugar de residencia como factor de discriminación<br />
se observa en establecimientos educativos<br />
y en los lugares de esparcimiento de los<br />
jóvenes. Por último, el género es mencionado<br />
como factor de discriminación en espacios públicos<br />
y, <strong>sobre</strong> todo, en lugares de trabajo.<br />
25<br />
En Buenos Aires, lugares de trabajo y organismos<br />
públicos; en Rio de Janeiro, organismos y espacios públicos;<br />
en Asunción, espacios públicos, incluidos lugares<br />
de esparcimiento de los jóvenes; y en Montevideo,<br />
espacios públicos y lugares de trabajo.<br />
26<br />
Además, en las cuatro ciudades la forma de hablar<br />
genera conflictos entre los jóvenes y los funcionarios<br />
públicos.<br />
4.6. Involucrarse o no:<br />
oportunidades y límites <strong>para</strong> la<br />
participación de los jóvenes<br />
4.6.1. Confianza interpersonal<br />
Gran parte de los detalles <strong>sobre</strong> los mecanismos<br />
que conectan confianza y calidad en la<br />
convivencia han surgido a partir discusiones<br />
ligadas a la noción de capital social (CEPAL,<br />
2003) 27 . Los vínculos de confianza constituyen<br />
un bien público que se robustece con la interacción<br />
continua, reduce los costos de transacción<br />
en cualquier emprendimiento colectivo y<br />
constituye un factor clave <strong>para</strong> la convivencia<br />
ciudadana. Pero además, en la medida en que<br />
facilita el intercambio de ideas, la identificación<br />
de problemas comunes y la transformación<br />
de esos problemas en demandas colectivas,<br />
amplía las opciones <strong>para</strong> el <strong>desarrollo</strong> de<br />
los actores sociales.<br />
Para investigar los niveles de confianza interpersonal<br />
se pidió a los jóvenes entrevistados<br />
que expresaran su acuerdo o desacuerdo con<br />
dos frases. La primera es si perciben a sus conciudadanos<br />
como personas que podrían aprovecharse<br />
de ellos en caso de que se presentase<br />
la oportunidad. La segunda es la disposición a<br />
tratar a los demás en forma justa.<br />
La proporción de jóvenes que piensan que<br />
la mayoría de las personas trataría de aprovecharse<br />
de ellos posee un alto grado de homogeneidad<br />
entre las ciudades. En efecto, el<br />
indicador de confianza interpersonal utilizado<br />
muestra a los jóvenes divididos aproximadamente<br />
por mitades, en cuanto a sus sospechas<br />
<strong>sobre</strong> las intenciones de los demás. En la desagregación<br />
por estrato socioeconómico, se observa<br />
una ligera tendencia a la mayor desconfianza<br />
interpersonal en los niveles bajos, con la<br />
excepción de Rio de Janeiro 28 .<br />
27<br />
Véase también el <strong>Informe</strong> de Desarrollo Humano de<br />
Chile, PNUD (1998).<br />
28<br />
En la lectura de los datos llama la atención el caso de<br />
Rio de Janeiro, ya que 7 de cada 10 jóvenes no anticipan<br />
disposiciones abusivas de sus conciudadanos, lo que<br />
contrasta fuertemente con los casos de Buenos Aires<br />
o Asunción, donde casi 6 de cada 10 jóvenes perciben<br />
en la gente una voluntad de aprovecharse de otros si se<br />
presenta la ocasión <strong>para</strong> hacerlo. Estos datos contrastan<br />
con las cifras <strong>sobre</strong> confianza interpersonal del <strong>Informe</strong><br />
Latinobarómetro (2004), en el que se mide el grado de<br />
desconfianza a los vecinos. Aunque no se refieren específicamente<br />
a Rio de Janeiro, esas cifras colocan a Brasil<br />
como el país con los mayores porcentajes, tanto entre<br />
los jóvenes como entre los adultos, de personas que desconfían<br />
de sus vecinos.<br />
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