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La cura - Glenn Cooper-holaebook-holaebook

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y necesitaba hablar con él.

Deakins entró resoplando y jadeando.

—¿Qué sucede, cabo? —preguntó Walker.

—Señor, hay un civil presente —respondió Deakins mirando a Jamie.

—Adelante, cabo, no pasa nada.

—Acaba de llegar un mensaje del Pentágono. Los destacamentos del ejército

y el servicio secreto que protegen la Casa Blanca no dan abasto para contener a la

multitud. A primera hora de esta mañana ha habido una incursión. Han abierto

brecha en la valla y los disparos han matado a una docena de civiles. Hemos

recibido órdenes de retirarnos de Bethesda de inmediato y reforzar la Casa

Blanca.

—Me cago en la puta —soltó Walker—. Dígales a los hombres que se

preparen, cabo. Partimos dentro de una hora. Y envíe gente a todos los edificios

para avisar al personal restante de que se quedan solos.

Deakins salió al trote y Walker se levantó del taburete.

—Lo siento, doctor. Ya le ha oído.

—Nos iremos con ustedes —dijo Jamie—. Necesito hablar con el presidente

para que me dé acceso a Fort Detrick.

—No tengo autoridad para transportar civiles —objetó Walker—, y mucho

menos autorización para meter civiles en la burbuja de la Casa Blanca.

—Entonces más le vale conseguir esa autoridad, o jugársela y hacerlo por su

cuenta. Debería preguntarse si de verdad quiere pasar a la historia como el

hombre que impidió que el mundo obtuviese una cura.

Walker parecía a punto de perder los estribos, pero al final bajó un poco los

hombros.

—Vale. Solo usted y sus hijas. Nadie más. Delante de mi despacho. En una

hora.

Jamie se aseguró de que las niñas comieran algo y fue a darle la noticia a

Bigelow. No estaba seguro de lo que haría si le suplicaba marcharse con ellos,

pero supuso que intentaría convencer a Walker.

Llamó con suavidad a la puerta de Bigelow, luego más fuerte.

No estaba cerrada con pestillo, de modo que entró.

La nota que tenía en el pecho resultaba parcialmente ilegible debido a las

salpicaduras de sangre. Había una navaja suiza en el suelo.

La parte visible de la nota decía:

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