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Suave Es La Noche

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64<br />

Dick rechazó esa posibilidad. Tenía un recuerdo demasiado vívido de la inocencia y<br />

frescura de sus labios. Pasó a adoptar otro tono.<br />

-<strong>Es</strong> un capricho pasajero.<br />

-Oh, por favor. No me importa ni siquiera tener un hijo. Podría irme a México como una<br />

chica de los estudios. <strong>Es</strong>to es tan diferente de todo lo que había pensado... Antes detestaba<br />

que me besaran en serio.<br />

Dick comprendió que seguía teniendo la impresión de que aquello tenía que ocurrir<br />

forzosamente.<br />

-Algunos tenían unos dientes enormes, pero tú eres completamente diferente. ¡Y tan guapo!<br />

Quiero que lo hagamos.<br />

-Me da la impresión de que crees que la gente se besa de alguna forma especial y quieres<br />

que yo te bese así.<br />

-Por favor, no te burles de mí. No soy una niña. Ya sé que no estás enamorado de mí.<br />

Parecía haberse calmado ya, hablaba en un tono de humildad.<br />

-No esperaba tanto. Supongo que te debo parecer una persona insignificante.<br />

-No digas tonterías. Lo que sí me pareces es demasiado joven.<br />

Y añadió para sus adentros: «¡Y tendría tanto que enseñarte!».<br />

Rosemary estaba esperando y respiraba ansiosamente, hasta que Dick dijo:<br />

-Y por último, las circunstancias no permiten que las cosas puedan salir como tú quieres.<br />

El rostro de Rosemary reflejó el desencanto y la consternación que sentía, y Dick dijo<br />

maquinalmente:<br />

-No vamos a tener más remedio que...<br />

Se interrumpió y la siguió hasta la cama, sentándose a su lado mientras lloraba. De pronto<br />

se sentía confundido, no por una cuestión de ética, puesto que estaba claro que aquello era<br />

imposible desde todos los puntos de vista, sino simplemente confundido, y por un momento<br />

le fallaron sus habituales recursos, la dúctil fuerza de su equilibrio.<br />

-Sabía que no querrías -dijo ella entre sollozos-. Era una esperanza estúpida por mi parte.<br />

Dick se puso en pie.<br />

-Buenas noches, muchachita. <strong>Es</strong> todo una pena. Será mejor que lo olvidemos.

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