08.05.2013 Views

v. La familia con hijos adolescentes - M-cano.com

v. La familia con hijos adolescentes - M-cano.com

v. La familia con hijos adolescentes - M-cano.com

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

250 José Antonio Ríos González<br />

los modelos de relación que tenían establecido <strong>con</strong> el hijo. Ello es lo que hace<br />

que este punto lo tenga muy presente al trabajar <strong>con</strong> las <strong>familia</strong>s porque, aún<br />

en los casos de relación más positiva, siempre se puede avanzar en la intensificación<br />

de este proceso inacabado.<br />

5. <strong>La</strong> oferta de un código de valores<br />

También he tratado este punto en mi obra sobre el padre, partiendo de un<br />

planteamiento en que se revisa, aunque de manera pasajera, cuanto supone la<br />

crítica de lo que en este terreno debe hacer la <strong>familia</strong> y, por ello, el padre.<br />

Me remito allí, aunque creo válidos en el momento actual, y de cara a una tarea<br />

de orientación <strong>familia</strong>r, los criterios que expuse en su momento y que sintetizo:<br />

1. El padre debe fomentar una adecuada adhesión al sistema de valores que<br />

<strong>con</strong>sidere necesario para la estructuración coherente y progresiva del<br />

grupo <strong>familia</strong>r de que es responsable. Esto no impide que el hijo, <strong>com</strong>o<br />

se verá más adelante, haga una crítica de cuanto le transmite el padre,<br />

ya que hay momentos en que tal crítica es imprescindible para la elaboración<br />

de lo que posteriormente <strong>con</strong>stituirá su propia filosofía de vida.<br />

2. <strong>La</strong> transmisión de una jerarquía de valores que regule la maduración<br />

personal del hijo ha de hacerse mediante la aceptación de que es esencial,<br />

distinguiéndolo perfectamente de lo accidental. No todo, ni en todos los<br />

momentos afectados por los cambios culturales, permanece inmutable.<br />

3. El padre, cualquiera que sea el patrimonio cultural que haya recibido en<br />

sus esquemas educativos anteriores, ha de aceptar un pluralismo en el<br />

enfoque de sus cuadros de referencia. <strong>La</strong>s razones de esta actitud<br />

educativa básica obedece a motivos de tipo histórico, cultural y social,<br />

aparte de las derivadas de los mecanismos de evolución personal y<br />

psíquica del hijo. El tema de los valores ocupa un lugar central en la<br />

progresiva independencia que va a reclamar el hijo en crecimiento.<br />

4. Tarea educativa del padre es la de fomentar el intercambio de valores<br />

procedentes de otros <strong>con</strong>textos educativos o culturales, sin que sea válido<br />

el dogmatismo y la cerrazón que se ciegan ante las aportaciones de otros<br />

ambientes. Este modo de abordar la transmisión de valores es un deber<br />

derivado de una crítica selectiva y depuradora de cuanto adviene a la<br />

propia <strong>familia</strong>, al tiempo que facilita una asimilación de valores que<br />

enriquecen y aumentan el esquema básico que se toma <strong>com</strong>o punto de<br />

partida.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!