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LA PRESENTACIÓN.
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LA PRESENTACIÓN.
LA PRESENTACIÓN.
CAPITULO IV. EL ANCIANO Y LA PROFETISA. T luego que fueren cumplidos los dias de su purificación por liijo ó por hija, llevará un cordero de un año para holocausto y un pichón ó una tórtola por el pecado. — (EL LEVÍTICO, cap. xn,vers. 6.) La ley de Moisés prescribía á la mujer hebrea la purificación en el templo, cuarenta dias después del parto. María, para cumplir con la ley, abandonó la ciudad de David y se trasladó á Jerusalen. La Virgen, con el Niño Jesús en brazos, y acompañada de su esposo llegó alas gradas del templo. La nazarena era pobre, y sólo podia ofrecer al sacrificio una humilde tórtola. La santa Familia esperaba bajo los altos pórticos de la Sinagoga la hora del rescate de su primogénito, cuando un anciano venerable, á quien el Evangelio llama Simeón el hombre justo, aijnéndose paso entre la gente, llegó hasta donde estaban los esposos, y después de arrodillarse á sus piés tomó al Niño Jesús en brazos, y elevándole a la altura de su rostro, exclamó con indefinible gozo: — Ahora es cuando Vos, Señor, dejareis morir en paz á vuestro siervo; pues que mis ojos han visto al Salvador que Vos nos habéis dado, y á quien destináis para estar expuesto á la vista de todos los pueblos como la luz de las naciones'y la gloria de Israel. Los santos esposos escucharon absortos las palabras proféticas del anciano Simeón, que con los ojos arrasados en lágrimas permaneció estático contemplando el candoroso semblante del Niño Dios.
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NOS D. JOSÉ DE LORENZO Y ARAGONÉS
INTRODUCCIÓN Doce años de paz ina
IXTRODUCCION X! Del Oriente llegaba
INTRODUCCIÓN Xllt á llamarse el D
INTRODUCCIÓN XV para escribir una
EL MÁRTIR mansión del hombre : la
4 EL MÁRTIR DEL GÓLGOTA Tus conqu
^ EL MÁRTIR La atmósfera se conde
8 EL MÁRTIR El ajuste quedó cerra
CAPITULO III. TRATO ES TRATO. El do
12 EL MÁRTIR Y sin aguardar respue
14 EL MÁRTIR DEL GÓLGOTA á la tr
16 EL MÁRTIR proyectil dentro del
18 EL MÁRTIR DEL GÓLGOTA Dímas,
20 EL MÁRTIR que le perfeccionéis
22 EL MÁRTIR de Heredes llegan alg
CAPITULO YL LOS CADÁVERES. Dímas
26 EL MÁRTIR y cuervos que se mece
28 EL MÁRTIR La luna bañó con su
CAPÍTULO YIL EL BAUTISMO DE SANGRE
32 EL MÁRTIR Dímas se proponía l
34 EL MÁRTIR vega que se extendía
36 EL MÁRTIR lemos rastro de esta
CAPITULO VIII. UN GOLPE EN VAGO.
10 EL MÁRTIR para no hacer nada; e
42 EL MÁRTIR Roma, como una muestr
LIBRO SEGUNDO. ESTRELLA DEL MAR. CA
46 EL MÁRTIR Los conquistadores de
48 EL MÁRTIR Ana crió á sus pech
CAPITULO IL LA VIRGEN DE SION. Algu
EL MÁRTIR DEL GÓLGOTA 51 mantos,
DEL GÓLGOTA 53 » Extendió en seg
DEL GÓLGOTA ?c talle era algo más
DEL GÓLGOTA 57 — No, Virgen, —
EL MÁRTIR DEL GOLGOTA 59 perfumada
DEL GÓLGOTA 61 » voluntad, para f
DEL GÓLGOTA 63 — TÚ serás como
EL MÁRTIR DEL GOLGOTA 65 Sion, mol
DEL GÓLGOTA 67 dará el trono de s
DEL GÓLGOTA 69 Esta desconfianza i
EL MÁRTIR DEL GÓLGOTA 71 Esta era
DEL GÓLGOTA 73 » seré llamada bi
DEL GÓLGOTA 75 Elisabet sus temore
DEL GÓLGOTA 77 con las fiestas que
EL MÁRTIR DEL GÓLGOTA 79 cinta; y
DEL GÓLGOTA 81 quien pondrás el n
DEL GÓLGOTA 83 atravesar; pero era
EL NACIMIENTO.
86 EL MÁRTIR Belén, pueblo inmort
88 EL MÁRTIR afabilidad con un rom
90 EL MÁRTIR DEL GÓLGOTA José im
92 EL MÁRTIR la verde yerba de su
94 EL MAKTIR — ¿Quién eres?—
96 EL MÁRTIR José y María, junto
CAPITULO II. LOS ÁRABES. La luz de
100 EL MÁRTIR — Una caravana ár
102 EL MÁRTIR esparcir por los pue
104 EL MÁRTIR DEL GÓLGOTA Luego p
106 EL MÁRTIR SUS deudos, y lanzan
108 EL MÁRTIR Las preguntas se suc
lio EL MÁRTIR el divino faro, susp
CAPITULO IV. JERUSALEN, Antes de pe
114 EL MÁRTIR Salomón le pidió l
I EL GÓLGOTA 211 cubiertos de polv
DEL GÓLGOTA 215 que Cingo era sord
DEL GÓLGOTA 215 Heródes tenia ade
EL MÁRTIR DEL GÓLGOTA 217 zado qu
DEL GÓLGOTA 219 y aun no ser testi
DEL GÓLGOTA 221 Como todos los gue
DEL GÓLGOTA 223 — Voy á hacer c
DEL GOLGOTA 22& móbil como si estu
DEL GÓLGOTA 227 lete, sobre una me
DEL GÓLGOTA 229 más que las Musas
DEL GÓLGOTA 231 Si tengo el alma h
EL MÁRTIR DEL GÓLGOTA 233 Y Antip
DEL GÓLGOTA 235 — En este juego
DEL GÓLGOTA 237 — Entonces, es p
CLEOPATRA,
240 EL MÁRTIR Pero una noche, en e
242 EL MÁRTIR Marco Antonio, á la
244 EL MÁRTIR Augusto mando enterr
246 EL MÁRTIR DEL GÓLGOTA de camp
248 EL MÁRTIR — Nuestro muy quer
250 EL MÁRTIR Cuando á la mañana
252 EL MÁRTIR pendía á Pisón, e
CAPÍTULO Vllí. FANTASÍA. El sol
EL MÁRTIR DEL GÓLGOTA 255 con una
DEL GÓLGOTA 257 los hombres, los d
DEL GOLGOTA 259 — ¡ Ay de los di
DEL GÓLGOTA 261 llegó á Roma cua
DEL GÓLGOTA 263 de Esculapio, que
EL MÁRTIR DEL GÓLGOTA 265 Los dos
DEL GÓLGOTA 267 cuerpo, y luego, c
DEL GÓLGOTA 269 Augusto, espantado
CAPITULO X. UN CORAZÓN DE HIENA. C
DEL GÓLGOTA 270 parciéndose por e
DEL GÓLGOTA 275 algo apartados de
DEL GÓLGOTA 277 recuérdala histor
EL MÁRTIR DEL GÓLGOTA 279 al sol,
Í)EL GULGUTA 281 Escaloníta, rode
CAPITULO XII LAMENTOS DE DOLOR. «
DEL GÓLGOTA 28& á una mujer que s
DEL GÓLGOTA 287 que doblan su fren
EL MÁRTIR DEL GÓr.GOTA 289 Una so
— Señor, castígame: soy digno d
DEL GÓLGOTA 293 Su familia acudió
EL MÁRTIR DEL GÓLGOTA 295 Ain dis
DEL GÓLGOTA 297 santo Precursor de
DEL GÓLGOTA 299 — No; la prácti
EL MÁRTIR DEL GÓLGOTA 301 — ¡A
DEL GÓLGOTA 303 El anciano sacerdo
EL MÁRTIR DEL GÓLGOTA 305 Inmedia
DEL GÓLGOTA 307 capa Ó alquicel,
DEL GÓLGOTA 3Ü9 tiempos, sobre to
DEL GÓLGOTA 311 — Su felicidad s
EL MÁRTIR DEL GOLGOTA 313 deza de
DEL GÓLGOTA 315 Esta ceremonia dur
DEL GÓLGOTA 317 que ese padrón de
EL MÁRTIR DEL GÓLGOTA 319 que le
DEL GOLGOTA 321 » Pasado el segund
CAPITULO lY. LA FIESTA DE LAS SUERT
DEL GÓLGOTA 325 Terminaba este tra
DEL GOLGOTA 327 bailo, se encaminar
DEL GÓLGOTA 329 iban á Jericó á
— ¿ Cuánr'o ? — Esta noche. E
DEL GÓLGOTA 333 de sangre, tan fre
DEL GÓLGOTA 335 oscuridad, comienz
ANTIPATRO Y ENOE.
388 BL MÁRTIR — Es mí hermano,
340 EL MARTIR El príncipe fué á
342 EL MÁRTIR pobre niña: el amor
CAPITULO 11. DONDE SE PRUEBA QUE NO
3it6 EL MÁRTIR » vida de mi alma,
348 EL MÁRTIR hoy la que tú elija
350 EL MÁRTIR SU amante, que parad
CAPITULO III. LAS MANZANAS Y EL NI
354 EL MARTIR El guardasellos obede
356 EL MÁRTIR favorita. ¡ Son muy
358 EL MÁRTIR cerraron, y un fuert
360 EL MÁRTIR DEL GÓLGOTA — Bue
CAPITULO IV. EL LIBRO DE JOB. Antip
DEL GÓLGOTA 363 muerte á la vida;
DEL GÓLGOTA 365 teger á los hijos
DEL GÓLGOTA 367 VOZ, hasta tomar u
CAPÍTULO V. DONDE SE PRUEBA QUE EL
DEL GÓLGOTA 371 hierro esparcía s
DEL GÓLGOTA 373 vez en la vida; no
LIBRO OCTAVO. LAS VÍBORAS. CAPITUL
DEL GÓLGOTA 37 7 La hermosa y afem
DEL GÓLGOTA 379 — I Te amo, te a
DEL GÓLGOTA 381 Aquella noche Cing
EL MÁRTIR DEL GÓLGOTA 383 bastaba
DEL GÓLGOTA 385 Aquella carcajada
DEL GOLGOTA 387 un hombre que cumpl
CAPITULO III. jEL REY HA MUERTO! ¡
DEL GÓLGOTA 391 tas por la memoria
EL MÁRTIR DEL GÓLGOTA 393 La trav
DEL GÓLGOTA 395 desprecio que te i
CAPITULO V. EL CANTO DEL CISNE. Alg
DEL GÓLGOTA 399 Un ejército extra
DEL GÓLGOTA 401 — Entra. La lona
EL MÁRTIR DEL GÓLGOTA 403 — Es
DEL GÓLGOTA 405 una postura más c
DEL GÓLGOTA 407 amo, y no viéndol
LA MUERTE DE CINGO,
410 EL MÁRTIR Que repite : Darío,
CAPITULO VIII. ÜN CABALLERO QUE RO
414 EL MARTIR se alzan pedestales y
416 EL MÁRTIR DEL GÓLGOTA nen un
418 ÍNDICE LIBRO TERCERO. Kros per
420 ÍNDICE — IV. Fuego entre cen
EL MARTIR DEL GÓLGOTA TRADICIONES
6 EL MÁRTIR Muerto Ileródes el Gr
8 EL MÁRTIR garon n la ciudad del
CAPITULO IL LOS SANTOS EMIGRADOS. C
12 EL MÁRTIR tanto afán eran busc
14 EL MÁRTIR DEL GÓLGOTA Sion en
16 EL MÁRTIR Luego envolvióle la
18 EL MÁRTIR — Espera, encender
CAPITULO IV. LA FIESTA DE LOS ÁZIM
22 EL MÁRTIR Para que se cumplan l
24 EL MÁRTIR len, por las doctrina
CAPITULO V. EL NIÑO PERDIDO. El de
28 EL MÁRTIR dido para que me aban
30 EL MÁRTIR DEL GÓLGOTA ¿Era aq
32 EL MÁRTIR siempre en el rincón
34 EL MÁRTIR — Desde este moment
36 EL MÁRTIR ría', y el cadáver
38 EL MÁRTIR compró algunos senad
CAPÍTULO VIL LA HORA ANUNCIADA. Lo
42 EL MÁRTIR de imp (lirme que te
44 EL MÁRTIR mildemente á la últ
LIBRO DÉCIMO. EL ÁNGEL DE LAS TIN
48 EL MÁRTIR Las cortinillas de pi
50 EL MÁRTIR DEL GÓLGOTA Iba desc
52 EL MARTIR Mientras tanto el tetr
54 EL MÁRTIR Así trascurrieron do
56 EL MÁRTIR amor de los recuerdos
58 EL MÁRTIR Al fijar su mirada en
CAPITULO IIL EL BAUTISTA. A orillas
EL MÁRTIR DEL GÓLGOTA 61 Cuenta l
DEL GÓLGOTA 63 en SU mano, y limpi
CAPITULO n. LAS PALABRAS DE ÜN JUS
DEL GÓLGOTA 67 Delante veíase al
CAPITULO V. LA TENTACIÓN. Jesús,
DEL GÓLGOTA 71 — « Échate de a
DEL GÓLGOTA 73 patria del gigante
DEL GÓLGOTA 75 ese fantasma que ca
DEL GÓLGOTA 77 Cesó la santa voz.
EL MÁRTIR DEL GÓLGOTA 79 La natur
DEL GÓLGOTA 81 » cuando se cerró
DEL GÓLGOTA 83 Estos fueron los el
t^:^Í¿^-í-;S^ií^;^^-^%|^'^i^V-^
86 EL MÁRTIR — « ¿ Eres Tú el
88 EL MÁRTIR todos los días á es
CAPÍTULO IIL LA SAMARITANA* Alguno
92 EL MÁRTIR No tardaron sus encan
94 EL MARTIR phan; y estas cosas me
96 EL MÁRTIR peso. — He perdido
98 EL .MÁRTIR mores y se han aclar
100 EL MÁRTIR dida : « Señor, yo
102 EL MÁRTIR en que vosotros no a
104 EL MÁRTIR al tiempo que huve,
106 EL MARTIR Después de hiber der
108 EL MARTIR reza, y por venir aqu
lio EL MÁRTIR XVII El dia siguient
Ii2 EL MÁRTIR levantará de su aby
114 EL MÁRTIR Y la voz, una voz qu
116 EL MARTIR poco há tan apa, ibl
CAPÍTULO IV, PAX HUIC DOMÜI. Jes
120 EL MÁRTIR Entonces .lesus repr
122 EL MÁRTIR Uno de los fariseos
124 EL MÁRTIR Aquel hombre pertene
LIBRO DUODÉCIMO, EL CASTILLO DE MA
J28 EL MÁRTIR Sus ojos tenían el
CAPITULO IL EL JARDÍN DEL AMOR. L
132 EL MÁRTIR Sus miradas, llenas
134 EL RLVRTIR DEL GÓLGOTA nables
136 EL MARTIR Por fin se oyó ruido
l36 LL xMARTlR Este hombre, á quie
IliO EL MÁRTIR de los cedros del L
CAPITULO lY. MELODÍAS. Terminada l
144 EL MÁRTIR Boanerges se detuvo
146 EL MÁRTIR DEL GÓLGOTA Mientra
148 EL MARTIR — ¡ Cobardes 1 ¡
150 EL MÁRTIR ble bofetada, que en
CAPITULO VI. LOS PRIMEROS CANTOS DE
154 ED MARTIR Una noche Enoe llorab
156 EL MA.RTIR Boanerges se quedó
158 EL MÁRTIR DEL GÓLGOTA — Qui
160 EL MARTIR El amor verdadero es
162 EL MÁRTIR DEL GÓLGOTA por esp
164 EL MÁRTIR Por SUS estrechos hu
166 EL MÁRTIR Antipas, aunque medi
168 EL MARTIR Al verla llegar abrie
170 EL MÁRTIR DEL GÓLGOTA — Esp
CAPITULO IX. EL SUENO DE U\ ASESINO
DEL GÓLGOTA 173 Después los dos e
DEL GÓLGOTA 175 darse á un rey. T
CAPITULO X. LA APARICIÓN. Trascurr
DEL GÓLGOTA 179 Estremecíase su c
DEL GÓLGOTA 1^1 Cuando se descubri
DEL GÓLGOTA 183 — « Si este hom
DEL GÓLGOTA 185 gamos una obra bue
EL MÁRTIR DEL GÓLGOTA 187 JMarta
DEL GÓLGOTA 189 La presencia de su
EL MÁRTIR DEL GÓLGOTA 191 Jesusll
DEL GÓLGOTA 193 — Señor, — le
EL MÁRTIR DEL GÓLGOTA 195 Cuatro
DEL GÓLGOTA 197" Como siempre, cam
DEL GÓLGOTA 199 mientras las mujer
EL MÁRTIR DEL GÓLGOTA 201 — Haz
DEL GÓLGOTA 203 la cama de su hijo
DEL GÓLGOTA 205 Aquel miserable, q
EL MARTIR DEL GÓLGOTA 207 gruta de
DEL GÓLGOTA 209 lié arjuí la con
DEL GÓLGOTA 211 bozos de la torre
EL MARTIR DEL GÓLGO'i.^ 21S habia
DEL GÓLGOTA 215 cuádruple tienda
DEL GÓLGOTA 217 Un pigmeo se habia
EL MÁRTIR DEL GÓLGOTA 219 pusiero
DEL GOLGOTA 221 los perfumes del L
DEL GÓ[.GOTA 223 de perderte, pobr
EL M4RTIR DEL GÓLGOTA 225 delante
DEL GÓLGOTA :-/ posees el hebreo c
EL GÓLGOTA 229 Habían dicho : «
EL MÁRTIR DEL GÓLGOTA 231 sedient
DEL GÓLGOTA 233 caf'istrof», cual
EL MÁRTIR DEL GÓLGOTA 235 El trib
DEL GÓLGOTA 237 Los sacerdotes se
DEL GÓLGOTA 239 Judas continuó su
EL xMARTIR DEL GÓLGOTA 241 Helí h
DEL GÓLGOTA 243 Todas las fisonom
DEL GOLGOTA 245 ,Jesus, con su mans
DEL GÓLGOTA 2^17 — ¡Madre! ¡ M
EL MÁRTIR DEL GÓLGOTA 249 Espesos
DEL GÓLGOTA 251 Dc-j ues tornó á
DEL GÓLGOTA 253 oido en extracto l
CAPITULO II. EL TRÉBOL DE JUDEA. J
DEL GÓLGOTA 257 ¿Quién se atreve
EL BESO DE JUDAS.
260 EL MÁRTIR y recado de escribir
2G2 EL MARTIR — - Los soldados no
26
266 EL MÁRTIR Judas avanzó alguno
268 EL MÁRTIR DEL GÓLGOTA La comi
270 EL MÁRTIR El pobre Esaú fué
272 EL MÁRTIR de SU sitial y olvid
274 EL MARTIR Después, to^as las m
276 EL MARTIR — Ni acuso, ni defi
278 EL MÁRTIR Sin saber cómo, ocu
280 ^ EL MÁRTIR DEL GÓLGOTA Enton
282 EL MÁRTIR — ¡La paz sea con
284 EL MARTIR La Virgen cayó de ro
286 ÍÍL MÁRTIR DEL GÓLGOTA Juda
288 EL MÁRTIR Belí-Beth era judí
290 EL MÁRTIR DEL GÓLGOTA muerte
292 EL MARTIR palabras de su marido
294 EL MARTIR Cayo corrió á ejecu
CAPÍTULO VIH. DE PILATO Á HERÓDE
298 EL MÁRTIR mis manos. ¿Qaé ha
300 EL MARTIR había levantado sus
CAPÍTULO IX. DE HERÓDES A PILATO.
LIBRO DECIMOQUINTO. EL GOLGOTA. —
EL MÁRTIR DEL GÓLGOTA 305 El sent
CAPITULO II. ECCE HOMO. Jesús yac
DEL GÓLGOTA 309 — ¡Hazmorirá J
DEL GÓLGOTA 311 — Amen, — repl
CAPITULO lll. LA CALLE DE LA AMARGU
DEL GÓLGOTA 315 Era la guardia de
DEL GÓLGOTA 3K aullando como lobos
DEL GÓLGOTA 319 — I Jerusalen I
DEL GÓLGOTA 321 — Señor mío Je
EL MÁRTIR DEL GÓLGOTA 323 la pedr
DEL GÓLGOTA 325 de los feroces ver
DEL GÓLGOTA 327 Entonces resonó u
DEL GÓLGOTA 329 Aquellos miserable
— Mujer, ahí tienes a tu hijo. E
DEL GÓLGOTA 333 fermos que se hall
DEL GÓLGOTA 335 Longinos había ad
EL MÁRTIR DEL GÓLGOTA 337 por las
DEL GÓLGOTA 339 Pilato dirigió un
CAPITULO VII. LOS MUERTOS HABLAN. S
DEL GÓLGOTA 343 lado cayó rota en
— Samuel, la hora ha llegado. / A
CAPÍTULO VIIL TRES DIAS DESPUÉS.
DEL GOLGOTA 349 levantaron, retroce
DEL GÓLGOTA 351 Se había aparecid
CAPITULO IX. LA ASCENSIÓN. Cristo,
DEL GÓLGOTA 355 Los discípulos re
DEL GÓLGOTA 357 Por espacio de muc
CAPITULO X. EL SEPULCRO DE ROSAS. A
DEL GÓLGOTA 361 Los remeros levant
DEL GÓLGOTA 363 Aquella voz hizo l
EPILOGO. NI PIEDRA SOBRE PIEDRA. 20
DEL GÓLGOTA 369 hros y espaldas, y
DEL GÓLGOTA 371 — Yo estaba ento
DEL GÓLGOTA 373 enormes piedras so
ÍNDICE. LIBRO NOVENO lios desterra
ÍNDICE 3 / / Pág III. Yo soy 259
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