12.05.2013 Views

vL Mi 1^1

vL Mi 1^1

vL Mi 1^1

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

4 EL MÁRTIR DEL GÓLGOTA<br />

Tus conquistas no se extenderán desde el Mediterráneo al Eufrates,<br />

como en tiempo de David, el ungido de! Señor, ni tus hijos gozarán<br />

en paz á la sombra de sus sauces las inmensas riquezas que<br />

les proporcionaba el floreciente reinado del Rey de los Cantares.<br />

Salomón, el bien amado del Señor, ya no enviará sus naves á Ofir,<br />

tierra del oro, ni paseará las calles de la ciudad santa con su carro<br />

de bronce de Corinto, en cuya frente se leia con letras de diamantes<br />

: « Yo te amo ¡oh, querida Jerusalen! »<br />

La reina del Mediodía, la hermosa Nicaulis, no llegará, atraída<br />

por la fama de tu opulencia, montada en su dromedario de Efa, y<br />

resplandeciente como un mar de oro sembrado de plata y esmeraldas,<br />

para regalarle á tu rey tres elefantes cargados de aromas, perfumes,<br />

polvos de oro y piedras preciosas.<br />

Tus naves no explotarán el comercio del mar Rojo, ni de las costas<br />

orientales de África, como en tiempo de Josafat, ni tus hijos hallarán<br />

en el destierro otro Zorobabel que los guie hasta sus abandonados<br />

lares y reedifique el derruido templo de sus mayores.<br />

¡ Pueblo de Abraham, tu nombre es un oprobio, tu patria el destierro!<br />

Grande es el castigo que Dios manda sobre tu raza; pero tu<br />

delito es grande, pues derramaste su sangre cuando Él te habia elegido<br />

por su patria.<br />

Tú cerraste los oídos á sus palabras, los ojos á sus milagros, y<br />

aquellas palabras y aquellos hechos resuenan y se aparecen en torno<br />

tuyo hasta en tu sueño.<br />

Dios quiso recogerte bajo sus alas, como la amante gallina á sus<br />

polluelos, y tú le sacrificaste en recompensa de su inagotable amor.<br />

« ¡Jerusalen! ¡Jerusalen! En tí no ha de quedar piedra sobre<br />

piedra », te dijo; y su promesa* se ha cumplido.<br />

¡Jerusalen! ¡Jerusalen! Tu .pasada gloria es un montón de escombros,<br />

sobre los cuales se mece todavía la aterradora maldición<br />

de Dios, repitiendo sin cesar: « ¡Llora, llora, llora, ciudad ingrata!»

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!