06.05.2013 Views

El Judaismo como Cultura - Casa-argentina

El Judaismo como Cultura - Casa-argentina

El Judaismo como Cultura - Casa-argentina

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

Dios brindó la Ley a todos los demás pueblos, antes que a los judíos; pero sólo los<br />

judíos la aceptaron.<br />

No es difícil trazar la conexión entre monoteísmo y ética. <strong>El</strong>la significa el<br />

establecimiento de una norma para todos. En cambio, la pluralidad de dioses implica<br />

multitud de normas. Siempre se encontrará un dios que apruebe lo que otro rechaza.<br />

Este argumento lógico contra el politeísmo aparece repetidamente en Platón; pero se ha<br />

de aclarar que los argumentos lógicos poco influyen en las emociones. "Lo aportado por<br />

los judíos no es una teoría de la moral, sino su práctica; y la práctica depende del<br />

sentimiento." Hay de ello numerosos casos. Roth menciona <strong>como</strong> ejemplo el de las<br />

"prácticas abominables rechazadas por la ley de la santidad". "Tales prácticas se<br />

condenan con tal vigor <strong>como</strong> abominables, que ninguna duda queda sobre ello. Dios<br />

pregunta a Caín sobre su hermano, y Caín responde con una pregunta: ¿Soy yo guarda<br />

de mi hermano? En este diálogo se manifiesta el vigor del genio judío, que proviene<br />

claramente de la confrontación del hombre con su Hacedor'. Esta confrontación sólo es<br />

posible bajo un monoteísmo. En el monoteísmo no es posible la evasión, 'ni se puede<br />

escamotear el problema o apelar de un poder divino a otro'." "Ante un solo Dios, el ser<br />

humano individual ocupa su lugar propio y adquiere sus justas proporciones. Es<br />

responsable y ha de dar cuenta."<br />

En los libros de los Profetas aparece más claramente esta confrontación del hombre<br />

con Dios. Particularmente impresionante es el relato de Ezequiel: "Hijo del hombre,<br />

estáte sobre tus pies, y hablaré contigo... Y díjome: Hijo del hombre, yo te envío a los<br />

hijos de Israel... y les dirás: Así ha dicho el Señor Jahvé". <strong>El</strong> profeta sólo es responsable<br />

ante Dios. Debe hablar y sólo puede decir lo que Dios puso en su boca. "Todo ello<br />

—agrega Roth— es espectacular y ninguna otra explicación es necesaria." Más<br />

sorprendente aún es el llamamiento apacible, no el huracán, o el terremoto o el fuego,<br />

sino la "suave voz tranquila" que aparece especialmente en la ley de santidad del<br />

Levítico. Allí con regularidad impresionante y casi monótona se repite "y tendrás temor<br />

de tu Dios". Roth señala que en un comentario rabínico esa frase se añade en los casos<br />

en que no hay conocimiento público o no hay posibilidad de castigo público: "No<br />

maldigas al sordo y delante del ciego no pongas tropiezo, mas tendrás temor de tu Dios:

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!