Tese completa Jaci MenezesFCC

Academia, quedando sus nombre reistrados en libro propio, debiendo someterse a un examen
que lo habilitaba al ejercicio profesional al final del curso.
Finalmente, en el periodo que va entre 1808 y 1820, la enseñanza toma el aspecto escolar,
sólo cuando los patrones corporativos de aprendizaje, ya débiles, se tornan inejecutables. Nace
completamente alejado de la enseñanza académica, y estaba destinado a niños y adolescentes
pobres, abandonados o huérfanos; finalmente, era predominantemente militar, compulsivo.
Incluso en el trato con los huérfanos y desvalidos, era conducida con disciplina militar.
A partir de 1820, el modelo precedente es reforzado, pasando, a partir de determinado
momento a albergar también a los hijos libres de las esclavas. Esto se da, lógicamente, a partir
de la Ley de Vientre Libre. Son creados en el Ejército y en la Marina, escuelas de aprendices:
fuera de las fuerzas militares, Casas de Educandos Artífices (1840) y Asilos para Niños
Desvalidos 8 dedicada a recoger, cuidar, dar enseñanza elemental y profesional a niños de la
calle dirigidos por el Juez de huérfanos. Dentro del modelo, fue creada, en 1882, la Escuela
Mixta de la Quinta Imperial de Buena Vista, destinada a los hijos de los esclavos libertos de la
Nación (recordar que los esclavos de la Nación fueron libertados en 1871).
Además de estas instituciones, otra forma de educación para el trabajo se desarrollará a
través de los Liceos de Artes y Oficios, que se diferencia de las iniciativas anteriores por ser
básicamente una iniciativa de la sociedad civil, mantenidos por asociaciones formadas por
beneméritos y operarios especializados, con el auxilio de dotaciones gubernamentales. Los
liceos estaban orientados a la formación de artistas y artífices, definiendo su objetivo así:
“proporcionar el estudio de las bellas artes y su aplicación necesaria a los oficios e industrias,
explicando los principios científicos en que ella se basa”. Así buscaban combinar formación
general con estudios aplicados a diferentes profesiones, así como también a la difusión de la
enseñanza primaria. Su curriculum estaba generalmente dividido en materias de ciencias
aplicadas y de artes.
Existieron Liceos en Río de Janeiro (1858), Salvador (1872), Recife (1880), San Pablo
(1882), Maceió (1884) y Ouro Preto (1886). En Bahía como en Recife, las asociaciones
sostenedoras contaban con la participación de artistas y operarios especializados, y según Luis
Antonio Cunha, en 1873 ofrecía cursos de primeras letras, dibujo, álgebra, geometría aplicada
al arte, francés, inglés, latín, geografía, historia y gramática filosófica. En 1891, contaba con
1704 socios, manteniendo los siguientes talleres: escultura, encuadernación, carpintería, dorado,
pintura decorativa. Funcionaban las siguientes clases: primeras letras (masculino, femenino y
adultos, nocturna), dibujo de figuras y adornos; aritmética, álgebra, geometría y trigonometría,
8 Entre el 40 y el 65, fueron creadas diez casas de educandos artífices. Pará, 1840; Maranhão, 1842, S. Pablo.,
1844, Piauí, 1849; Alagoas, 1854 y Ceará. Ver Cunha, Luis Antonio Rodrigues - O ensino de oficios
manufactureiros em artesãos, asilos e liceus. Forum, Río de Janeiro, 3(3): 3-47, jul./set. 1979.
8 El Reglamento de Instrución Pública del Município Neutro, de 1854, determinaba que el Gobierno crease
asilos para niños desvalidos, en los siguientes términos: “Si en cualquiera de los distritos vagaran menores de 12
años en tal estado de pobreza que, además de ropa decente para concurrir a las escuelas, vivan de la mendicidad,
el Gobierno los hará recoger en una de las casas de asilos que deban ser creadas para ese fin, con un reglamento
especial”. A su vez, el Reglamento de Instrución Pública del Município Neutro, de 1854, determinaba que el
Gobierno crease asilos para niños desvalidos, en los siguientes términos: “Si en cualquiera de los distritos vagaran
menores de 12 años en tal estado de pobreza que, además de ropa decente para concurrir a las escuelas, vivan de
la mendicidad, el Gobierno los hará recoger en una de las casas de asilos que deban ser creadas para ese fin, con
un reglamento especial”. Cunha, Luis Antonio, obra citada.