Tese completa Jaci MenezesFCC

de color es establecida por el genotipo y no por el fenotipo. Llegan a hablar en una actitud
indulgente de los blancos para con los negros. 235
Muchos autores, a partir de Bastide y Fernandes, y en Negros y Blancos en São Paulo,1955;
encuentran en Brasil estructuras más rígidas y discriminadoras. Niegan, incluso explícitamente,
las tesis de Pierson al respecto. Pero citamos aquí el estudio de Pierson por haber, de alguna
manera, intentado presentar datos referentes a la participación de los negros en la
escolarización, en sí diminuta como vimos antes, de la población bahiana, antes de la
reintroducción del ítem ‘color de piel’en los Censos Demográficos Brasileños, lo que se dará en
1940.
9. Las iniciativas por educarse.
Cabe incluso resaltar que, a pesar del poco acceso, los miembros de las clases populares en
Bahía no solo creían en el ‘papel redentor’ de la escuela, sino que también lucharon por ella
tomando la iniciativa de crear clases escolares en sus organizaciones, para ellas y sus hijos. A
tal punto era valorizada la instrucción que no se encuentra, en estas luchas, o por lo menos en
los registros que se hacen de ellas, ninguna posición contra la exigencia de la alfabetización
para la ciudadanía activa, de la exclusión del analfabeto del derecho al voto, por lo menos en
ese período Republicano 236 , al punto que nos ocurre pensar que este es punto en que los
excluidos estuvieron bajo hegemonía de quien los excluía o, simplemente, del instrumento de
su exclusión.
En el período inmediatamente seguido a la República, dentro de ese entusiasmo por la
educación, diversas organizaciones que pretendían representar los trabajadores organizaron
escuelas primarias y cursos nocturnos. La primera de ellas, que viene del Imperio, del período
de la extinción de la esclavitud, fue el Liceo de Artes y Oficios, que comenzamos a estudiar
páginas atrás. El Liceo de Bahía, asociación de la sociedad civil de la cual participaban
‘artistas’ y operarios, estaba orientado a la formación de mano de obra libre para tareas
manuales o manufactureras; pretendía aún funcionar como sociedad de ayuda mutua, además de
dar educación a los hijos de aquellos obreros. Su creación estaba también vinculada a la
formación de los hijos libres de los esclavos, y sus estatutos habrían sido organizados por un
abogado relacionado a las causas de los esclavos y creador de sociedades libertadoras en Bahía.
Sus aulas fueron abiertas a partir de mayo de 1873, para 166 alumnos y tenía como objetivo
dar, además de la educación profesional, ‘instrucción literaria’(o sea, formación general) para
sus asociados y los hijos de ellos. Los alumnos que no fuesen hijos de los socios recibían
instrucción gratuita, a cambio del subsidio gubernamental. En 1891, contaba con 1704 socios.
Además de la formación para el trabajo, mantenía dos clases diurnas de iniciación escolar (una
para cada sexo) y otra nocturna, para adultos. Según consta, el Liceo tuvo también gran
importancia en la vida cultural de la ciudad, por la formación de pintores, escultores, etc.
Informe de Actividades del mismo Liceo muestran un crecimiento de la institución a inicios del
siglo: en 1900, la matrícula llegaba a 860 alumnos e introducía la enseñanza de contabilidad y
técnica mercantil.
235 Ver Pierson, obra citada, pág. 274/265.
236 Recordar que, durante la discusión de la Reforma Electoral, parte del Partido Liberal, en especial los
abolicionistas radicales, protestó contra la misma exclusión.