Tese completa Jaci MenezesFCC

De este modo, el modelo deseado para la integración del negro es su desaparición:
según diferentes autores del período republicano, la raza blanca, como superior, tendería a
imponerse, a la vez que, por micigenación, el negro dejaría de serlo. Como consecuencia, el
mestizo tiene mejores posibilidades de acceso, incluso por medio de la escolarización. Los
datos analizados muestran esto.
La marginalización del Nordeste y de Bahía en términos de las prioridades económicas
nacionales, practicada durante la República Velha y agudizada con la Revolución del 30, sólo
viene a ser disminuida con los gobiernos llamados ‘populistas’. de la década del 50 e inicio de
los años 60 - y esta situación se reflejó en las políticas sociales como un todo, aún más en las de
educación. Como la enseñanza primaria, durante todo el período de la República, fue
solventada por los gobiernos provinciales, Estados y Regiones más pobres tuvieron también
menores recursos para la educación.
Así, la forma de inclusión determinó la exclusión. Ya no más exclusión absoluta,
como en el tiempo de la esclavitud, en la cual el esclavo es excluido hasta de su condición
humana - es cosa, mercadería. Una vez más, un ‘dejar al margen’. Para el establecimiento de
un criterio ‘cultural’ para ingresar a la ciudadanía - el criterio para la incorporación es llegar a la
‘civilización’a través de la lectura - que debía ser obtenido en el mercado, se sumaron las
dificultades de la lucha por la sobrevivencia y a los escalones para reconstruirse como grupo en
la sociedad más amplia (formar familia, criar hijos).
El ex esclavo, por lo tanto, enfrenta en el período posterior a la abolición: la
marginalización económica; el preconcepto, por la manera de su sustitución por el blanco hasta
como trabajador; la persecución como consecuencia del miedo, que genera un doble control de
su integración: el control policial hasta de su derecho de ir y venir y de su derecho al no trabajo,
por la presencia del delito de ocio, hoy contravención penal; y el filtro de la ‘acción civilizadora
de la educación’- sin ella, no se transforma en político completo. El precio del voto y , por lo
tanto, de la ciudadanía completa, era para él muy alto para asumirlo sin apoyo del Estado.
Carlos Hasenbalg, en un artículo sobre la investigación de las desigualdades raciales en
Brasil y hablando de su sentimiento de aislamiento como investigador del tema, destaca que
Brasil tiene problemas para reconocer sus desigualdades porque ‘los brasileños forjaron su
autoimagen de armonía racial mirándose en el espejo de los odiosos regímenes racistas’,
citando la situación sufrida por el Sur de los EEUU y del apartheid de África del Sur. Y se
pregunta: ¿‘Dónde se irán a mirar los brasileños para alimentar su complaciente autoimagen
racial cuando el apartheid sea cosa del pasado? Estando, de nuevo en fines de siglo, con el
liberalismo, queriendo estar de moda, es preciso que el análisis de los datos ayude a encender la
conciencia del tamaño de la deuda social que aún existe en el país, sobretodo en el área de la
educación.
3. Las pedagogías.
Corresponde, en este punto, profundizar la temática de las pedagogías que subyacen a la
esclavitud u a la libertad, muy poco explicitadas aún. ¿Cuáles son las pedagogías en juego en
este proceso dicotómico de inclusión-exclusión que acabamos de analizar?. Entonces, ¿Cómo