Tese completa Jaci MenezesFCC

Fuente: Giogio Mortara. Estudio citado.
Continúa comentando que el indicador construído con las ‘aprobaciones’, cambia la ubicación
de algunos Estados con relación a las matrículas, o sea, para esos Estados, aunque su matrícula
sea pequeña en relación a la población, su sistema de enseñanza es más efectivo en el sentido
de conseguir aprobar mayores contingentes de alumnos. En suma, en aquel momento, y todavía,
de acuerdo con los datos disponibles, el sistema de educación bahiano era menor para su
población y, así mismo, extemadamente ‘selectivo’, en el sentido que reprobaba o expulsaba
aquellos que en él conseguían matricularse.
8. Consideraciones sobre el período estudiado: 1888 - 1940
Finalizando, el análisis de las estadísticas de matrículas, aunque condicionadas por los datos
disponibles - no solo de matrículas como hasta de población 230 muestra claramente que los
dispersos esfuerzos para la ampliación del sistema de educación (en los períodos entre 88 y
1907 y entre 1920 y 28/29), no fueron suficentes para que se pudiese caracterizar un política
masiva de escolarización, así como de contingentes generacionales de niños. No existió, dicho
explícitamente en el discurso de Góes Calmon, una intención de ampliar cuantitativamente la
escuela, de masificarla como en el proyecto paulista de Sampaio Dórea. ¿Qué diferencia las
necesidades paulistas de las bahianas: mayores presiones, provocadas por la industrialización,
en el sentido de ampliar el acceso a la lectura y a la escritura? ¿Mayores presiones de su
población obrera, organizada, protagonista de las grandes ‘huelgas obreras’ en la década del
10? No tenemos repuestas para estas cuestiones. Mientras tanto, queda más que claro la
inexistencia de una política de integración de los negros, ex-esclavos o sus descendientes,
mediante un programa educacional - sea por ex-esclavos, sea por los trabajadores.
Tampoco se encuentran con facilidad entre 1900 y 1940, estudios en que el acceso a la
escolarización de los negros sea trabajado de forma sistemática (es interesante recordar que en
1900 y 1920 el ítem ‘color de piel’ fue retirado del Censo Demográfico Nacional, faltando no
sólo estadísticas precisas con relación a la participación de los negros en la población brasileña
sino, principalmente, sobre su condición de acceso, aunque sea, a la condición de alfabetizado).
Uno de los registros encontrados sobre la presencia de niños negros en escuelas, en Bahía, fue
hecho por Donald Pierson, investigador norteamericano, en la década del 30 (estuvo en Bahía,
realizando observaciones, entre 1935 y 1937) 231 . Buscando justamente superar la inexistencia
de datos que caracterizasen la sociedad bahiana de entonces, él intenta cuantificar la presencia
de las diversas razas/colores en las escuelas, en los sindicatos, en las iglesias, en los juegos y en
la política, bien como en otras actividades colectivas - carnaval inclusive. El prof. Pierson
cuantificó la presencia de los negros bahianos en las escuelas de los distintos niveles, bien
como en desfiles escolares, fiestas estudiantiles y ceremoniales de graduación. La siguiente
sería la situación de la presencia negra en las escuelas:
‘No había, en las escuelas segregación de ninguna especie; mientras tanto, los alumnos
blancos y mulatos predominaban. La participación de los negros era limitada y había una
230 De cierta forma, tendría lugar la observación del autor: que la inexistencia de datos seguros sobre la población
real, entre 1920 y 1940, habría dificultado el análisis y la toma de decisiones sobre el sistema educacional.
Mientras tanto, esto valdría para Brasil como un todo y no solamente para Bahía.
231 Ver Pierson, Donald- Blancos y negros en Bahía, estudio de contacto racial. S.Paulo, Editora Nacional.
Colección Brasiliana, vol.241.