Sección Tercera: Los Escenarios de La Violencia - DHnet
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LA VIOLENCIA EN LAS REGIONES<br />
El mismo año <strong>de</strong> 1988, el PCP-SL incursionó en Palmayoc, anexo <strong>de</strong> Chongos Alto, provocando <strong>de</strong>sconcierto<br />
y miedo entre la población tras el anuncio <strong>de</strong> que «batallones subversivos rondaban el lugar». En 1989 el avance<br />
sen<strong>de</strong>rista llegó hasta Llamapsillón, anexo <strong>de</strong>l distrito <strong>de</strong> Chongos Alto. En un primer momento, la prédica <strong>de</strong>l<br />
PCP-SL fue escuchada con mucha expectativa por los comuneros, quienes consi<strong>de</strong>raban que el PCP-SL tenía<br />
razones suficientes para levantarse en contra <strong>de</strong> un or<strong>de</strong>n injusto. Sin embargo, en años posteriores, el encanto<br />
inicial —que se fue diluyendo a medida que los comuneros eran masacrados, los alcal<strong>de</strong>s asesinados y las comunida<strong>de</strong>s<br />
incendiadas por el PCP-SL— dio lugar a una creciente oposición en las comunida<strong>de</strong>s.<br />
A inicios <strong>de</strong> 1989, el PCP-SL lanzó una ofensiva <strong>de</strong> envergadura contra la unidad <strong>de</strong> producción <strong>La</strong>ive:<br />
<strong>de</strong>struyó la maquinaria para el procesamiento <strong>de</strong> leche y <strong>de</strong>rivados, incendió los pastos, saqueó la casa<br />
hacienda y distribuyó el ganado entre los trabajadores. Durante esta ofensiva sen<strong>de</strong>rista también se <strong>de</strong>struyeron<br />
las unida<strong>de</strong>s <strong>de</strong> producción <strong>de</strong> Tucle-río <strong>La</strong> Virgen y Antapongo. Cerca <strong>de</strong> ochenta trabajadores <strong>de</strong> Antepongo,<br />
y aproximadamente cincuenta <strong>de</strong> la hacienda Tucle, se repartieron muebles y dinero <strong>de</strong> manera equitativa.<br />
Entre tanto, las comunida<strong>de</strong>s <strong>de</strong> Palmayoc, Palaco, Llamapsillón y Chongos Alto, instigadas por los<br />
sen<strong>de</strong>ristas, terminaron <strong>de</strong> saquear y repartirse los bienes y enseres obtenidos. <strong>La</strong> mayor parte <strong>de</strong> los trabajadores<br />
<strong>de</strong> ambas unida<strong>de</strong>s <strong>de</strong> producción pertenecían a estas cuatro comunida<strong>de</strong>s. Todas las acciones mencionadas<br />
quedan resumidas en el lema enarbolado por las columnas sen<strong>de</strong>ristas: «Arrasando con la semifeudalidad<br />
en el campo... Destrucción total <strong>de</strong> la SAIS, obra <strong>de</strong>l pueblo, con dirección <strong>de</strong>l PCP-SL».<br />
El reparto <strong>de</strong> los bienes acrecentó aún más las simpatías <strong>de</strong> la población, en particular <strong>de</strong> los jóvenes. Muchos<br />
<strong>de</strong> ellos se enrolaron en las filas <strong>de</strong>l PCP-SL por propia voluntad, aunque otros fueron incorporados a la<br />
fuerza. El eco y aceptación que tuvo la prédica <strong>de</strong>l PCP-SL entre los campesinos se pue<strong>de</strong> enten<strong>de</strong>r si se tienen<br />
en cuenta dos razones: los beneficios concretos que obtenían —como por ejemplo la repartición <strong>de</strong>l ganado— y<br />
la promesa <strong>de</strong> sacarlos <strong>de</strong> la pobreza, <strong>de</strong>l secular abandono y <strong>de</strong> la marginación.<br />
Meses <strong>de</strong>spués, una pequeña columna sen<strong>de</strong>rista, integrada por doce personas, llegó a la misma zona. <strong>La</strong> fase<br />
inicial <strong>de</strong> acercamiento y convencimiento <strong>de</strong> la población se cortó abruptamente, al verse reemplazado el trato<br />
amical <strong>de</strong> los primeros militantes por las ór<strong>de</strong>nes y el maltrato verbal <strong>de</strong> los recién llegados. Pocas semanas <strong>de</strong>spués,<br />
la renuncia <strong>de</strong> las autorida<strong>de</strong>s <strong>de</strong> la zona fue casi total <strong>de</strong>bido a las amenazas <strong>de</strong> muerte que sufrieron.<br />
De este modo, se creó un vacío <strong>de</strong> po<strong>de</strong>r y autoridad que no pudo ser reconstituido inmediatamente por<br />
el PCP-SL, incapaz <strong>de</strong> nombrar y mantener en el cargo a sus propias autorida<strong>de</strong>s, pues en muchos casos las<br />
personas <strong>de</strong>signadas como representantes <strong>de</strong>l «nuevo po<strong>de</strong>r» o bien no aceptaban el cargo o bien huían <strong>de</strong>l<br />
lugar. En otros casos, los pobladores <strong>de</strong>sobe<strong>de</strong>cían los mandatos e imposiciones <strong>de</strong> las autorida<strong>de</strong>s sen<strong>de</strong>ristas.<br />
Asimismo, el PCP-SL no tuvo en cuenta que, en algunas localida<strong>de</strong>s, muchas <strong>de</strong> las autorida<strong>de</strong>s –sobre<br />
todo comunales– actuaban en la clan<strong>de</strong>stinidad.<br />
Una vez que el ganado repartido por el PCP-SL durante su incursión a la SAIS Cahui<strong>de</strong> se fue muriendo<br />
por falta <strong>de</strong> una atención a<strong>de</strong>cuada y los ingresos <strong>de</strong> los pobladores se redujeron al mínimo, muchos comuneros<br />
optaron por migrar a las ciuda<strong>de</strong>s más cercanas.<br />
El 12 <strong>de</strong> enero <strong>de</strong> 1989, Manuel Soto —director <strong>de</strong>l Centro <strong>de</strong> Investigación Campesina y Educación Popular<br />
(CICEP), sociólogo y catedrático <strong>de</strong> la UNCP— y Víctor Lozano —dirigente campesino— fueron asesinados<br />
por el PCP-SL.<br />
<strong>La</strong> matanza <strong>de</strong>l 12 <strong>de</strong> abril <strong>de</strong> 1989: fin <strong>de</strong>l buen entendimiento<br />
<strong>Los</strong> maltratos verbales y físicos, la exigencia cada vez mayor <strong>de</strong> alimentos para sus militantes, la incorporación<br />
forzada <strong>de</strong> muchos jóvenes a sus fuerzas militares, la <strong>de</strong>strucción <strong>de</strong> la poca infraestructura local y la<br />
prohibición <strong>de</strong> comerciar con otras regiones fueron creando las condiciones para la oposición <strong>de</strong> los pobladores.<br />
Sin embargo, el miedo a la muerte contuvo la resistencia.<br />
En esas circunstancias, algunas autorida<strong>de</strong>s que actuaban en la clan<strong>de</strong>stinidad se reunieron para evaluar<br />
la situación y proponer una respuesta colectiva contra los sen<strong>de</strong>ristas. Estos acuerdos llegaron a oídos <strong>de</strong>l<br />
PCP-SL, que organizó una acción punitiva para «ajusticiar» a varias <strong>de</strong> las personas que participaron en aquella<br />
reunión, junto a otros pobladores. Esta acción se <strong>de</strong>sarrolló el 12 <strong>de</strong> abril <strong>de</strong> 1989, cuando entre las 4:30 y<br />
las 5:00 a.m. una columna <strong>de</strong> aproximadamente cincuenta sen<strong>de</strong>ristas tomó la plaza <strong>de</strong> armas <strong>de</strong> Chongos<br />
Alto. Cinco <strong>de</strong> ellos portaban armas <strong>de</strong> largo alcance y el resto estaba armado con palos, fierros y cuchillos. De<br />
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