Sección Tercera: Los Escenarios de La Violencia - DHnet
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LA VIOLENCIA EN LAS REGIONES<br />
<strong>de</strong>s policiales– con<strong>de</strong>nó fuertemente este hecho y se solidarizó mucho más con las víctimas <strong>de</strong>l PCP-SL –<br />
estudiantes universitarios huamanguinos en el caso <strong>de</strong> Alcántara y Urbay– que con las <strong>de</strong> la policía.<br />
<strong>La</strong> primera semana <strong>de</strong> agosto <strong>de</strong> 1982, un <strong>de</strong>stacamento <strong>de</strong>l PCP-SL atacó el fundo Allpachaca —propiedad<br />
<strong>de</strong> la Universidad <strong>de</strong> Huamanga y centro experimental y <strong>de</strong> prácticas <strong>de</strong> los estudiantes— y lo arrasó, pues consi<strong>de</strong>raba<br />
que <strong>de</strong>s<strong>de</strong> allí «se servía al imperialismo y se traficaba con los bienes producidos». Pero lo más importante<br />
<strong>de</strong> este hecho fue que en la acción participaron campesinos que vivían en las zonas aledañas:<br />
Por lo menos 300 a 400 campesinos [...] que <strong>de</strong>struyen la infraestructura, matan el ganado, <strong>de</strong>struyen los tractores,<br />
porque la tecnología no era una cosa que estaba en sus esquemas y representaba a la burguesía, a<strong>de</strong>más <strong>de</strong><br />
ello se justifican diciendo que el queso y el vino que se maceraba en este fundo beneficiaban a un pequeño grupo<br />
y no al campesinado, entonces reparten los quesos y la carne a los campesinos que habían ido (ponencia <strong>de</strong>l taller<br />
«Universidad y conflicto armado interno»).<br />
En la segunda mitad <strong>de</strong>l año, otro hecho que concitó la atención <strong>de</strong> la opinión pública local y nacional<br />
fue el multitudinario entierro <strong>de</strong> la joven sen<strong>de</strong>rista Edith <strong>La</strong>gos, quien huyó durante el asalto al penal y<br />
murió en un enfrentamiento con la Guardia Republicana en Umaca, provincia <strong>de</strong> Andahuaylas. El 10 <strong>de</strong><br />
septiembre <strong>de</strong> 1982 su entierro marcó el punto más alto <strong>de</strong> simpatía <strong>de</strong> la población huamanguina hacia el<br />
PCP-SL, aunque aún la ciudad no vivía el terror que pa<strong>de</strong>ció años <strong>de</strong>spués. El 14 <strong>de</strong> noviembre <strong>de</strong> 1982, un<br />
comando sen<strong>de</strong>rista atacó nuevamente el fundo Allpachaca, pero esta vez el ataque fue sumamente violento<br />
y murieron dos mujeres no i<strong>de</strong>ntificadas.<br />
<strong>La</strong> Universidad Nacional San Cristóbal <strong>de</strong> Huamanga<br />
El hecho <strong>de</strong> que algunos dirigentes <strong>de</strong>l PCP-SL hubieran ocupado importantes cargos en la Universidad San<br />
Cristóbal puso a la universidad en la mira <strong>de</strong> los informes policíacos y periodísticos, que mencionaban supuestos<br />
nexos entre la UNSCH y el PCP-SL. Ello obligó a que el 18 <strong>de</strong> septiembre <strong>de</strong> 1980 las autorida<strong>de</strong>s <strong>de</strong><br />
la Universidad <strong>de</strong> Huamanga convocaran a una conferencia <strong>de</strong> prensa para negar que la institución se encontrara<br />
comprometida en actos terroristas. En un primer momento, las fuerzas políticas que había al interior <strong>de</strong><br />
la universidad tendieron a subestimar las intenciones <strong>de</strong>l PCP-SL; sin embargo, a medida que fueron aumentando<br />
las acciones subversivas, el sen<strong>de</strong>rismo logró obtener la simpatía <strong>de</strong> un sector <strong>de</strong> la población, que lo<br />
consi<strong>de</strong>raban como una respuesta al abandono en que vivía Ayacucho. Así, se combinó una suerte <strong>de</strong> regionalismo<br />
ayacuchano con la apuesta por la revolución nacional y mundial.<br />
En junio <strong>de</strong> 1981, la Policía anunció la captura <strong>de</strong> dos células sen<strong>de</strong>ristas y afirmó que sus integrantes eran<br />
estudiantes <strong>de</strong> la Universidad San Cristóbal. Este hecho sirvió para fortalecer la hipótesis <strong>de</strong> la existencia <strong>de</strong><br />
nexos entre la universidad y el sen<strong>de</strong>rismo, lo que reforzó el estigma que pesaba sobre los sancristobalinos<br />
como potenciales terroristas.<br />
El 14 <strong>de</strong> octubre <strong>de</strong> 1981, ante el avance <strong>de</strong> las acciones <strong>de</strong>l PCP-SL, se <strong>de</strong>claró el estado <strong>de</strong> emergencia en<br />
cinco provincias <strong>de</strong>l <strong>de</strong>partamento <strong>de</strong> Ayacucho. De inmediato la Policía allanó la resi<strong>de</strong>ncia universitaria y<br />
<strong>de</strong>tuvo a medio centenar <strong>de</strong> estudiantes sin haber encontrado arma alguna ni ningún tipo <strong>de</strong> indicio que relacionara<br />
a la universidad con actos <strong>de</strong> terrorismo.<br />
A fines <strong>de</strong>l 1982 la violencia se tornó más aguda y el gobierno central autorizó el ingreso <strong>de</strong> las Fuerzas<br />
Armadas a Ayacucho. En este nuevo escenario <strong>de</strong> militarización, la Universidad San Cristóbal quedó atrapada<br />
entre dos fuegos: Sen<strong>de</strong>ro y los militares.<br />
En el campo<br />
Por otro lado, en las áreas rurales el PCP-SL sustentó su trabajo inicial –como en todo el país– en el circuito<br />
educativo que generó a través <strong>de</strong> profesores rurales y estudiantes secundarios, y llegó a involucrar importantes<br />
sectores <strong>de</strong> jóvenes <strong>de</strong> las comunida<strong>de</strong>s. En general, durante el período 1980-1982, el PCP-SL amplió su<br />
presencia en el campo mediante diversas estrategias. <strong>La</strong> primera fue la imposición <strong>de</strong> su autoridad armada en<br />
el or<strong>de</strong>n local, con lo que cubrió los flagrantes vacíos <strong>de</strong>l Estado y captó el entusiasmo <strong>de</strong> muchos campesinos<br />
<strong>de</strong> la zona por el «ejercicio <strong>de</strong> justicia» que eliminaba a las personas in<strong>de</strong>seables para las comunida<strong>de</strong>s. Esta<br />
estrategia se complementó con un objetivo militar sostenido: atacar los puestos policiales rurales, obligando a<br />
su cierre y al paulatino retroceso policial. <strong>La</strong> tercera estrategia fue la presión –sugerir, amenazar y asesinar son<br />
TOMO IV PÁGINA 63