Sección Tercera: Los Escenarios de La Violencia - DHnet
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3.4.1. Datos generales<br />
LA VIOLENCIA EN LAS REGIONES<br />
Como hemos visto, en el sur andino el mercado <strong>de</strong> lanas <strong>de</strong>finió el escenario puneño <strong>de</strong>s<strong>de</strong> el siglo XIX, especialmente<br />
en las provincias norteñas. <strong>Los</strong> gran<strong>de</strong>s propietarios dominaron la vida pública, y los conflictos en<br />
torno a la tierra se sucedieron uno tras otro. El ejercicio <strong>de</strong>l po<strong>de</strong>r terrateniente fue casi total hasta mediados<br />
<strong>de</strong>l siglo XX, aunque es necesario recordar la diferencia entre la zona norte —las provincias <strong>de</strong> Azángaro y<br />
Melgar, fundamentalmente— y las áreas que estaban bajo control <strong>de</strong> las parcialida<strong>de</strong>s vinculadas con la producción<br />
<strong>de</strong> fibra <strong>de</strong> alpaca.<br />
<strong>La</strong> «gran sequía» <strong>de</strong> 1956-1961 en el altiplano puneño generó una emigración significativa hacia espacios<br />
urbanos como Arequipa, ciudad en la cual, entre mediados <strong>de</strong> la década <strong>de</strong>l cincuenta y mediados <strong>de</strong> los sesenta,<br />
el porcentaje <strong>de</strong> puneños en las barriadas se incrementó <strong>de</strong> 12.9% a 39.08%, hasta llegar a 41.41% en<br />
1971. Por su parte, entre 1940 y 1961 la población <strong>de</strong> la ciudad <strong>de</strong> Puno creció <strong>de</strong> 15,999 a 24,459, mientras que<br />
Juliaca «explotó» <strong>de</strong> 7,002 a 20,351 habitantes en el mismo período.<br />
En la década <strong>de</strong>l sesenta, las tensiones por la propiedad <strong>de</strong> la tierra involucraban a hacendados, colonos y<br />
comuneros, alimentando discursos <strong>de</strong> redistribución <strong>de</strong> la tierra y <strong>de</strong>mocratización inéditos a través <strong>de</strong> lí<strong>de</strong>res<br />
y partidos regionales —caceristas, comunistas, belaundistas— por el control <strong>de</strong> las fe<strong>de</strong>raciones campesinas,<br />
en claro enfrentamiento con los partidos tradicionales. Estos actores se entrecruzan por un lado con las rivalida<strong>de</strong>s<br />
interprovinciales para acce<strong>de</strong>r a los escasos fondos gubernamentales, y por otro lado con los conflictos<br />
entre la élite mestiza y los grupos <strong>de</strong> cholos y forasteros emergentes.<br />
Cuadro 42<br />
PUNO 1981-1993: POBLACIÓN SEGÚN PROVINCIA<br />
PROVINCIA 1981 1993 % CRECIMIENTO<br />
TOTAL 701,026 1,079,849<br />
Puno 177,358 201,205 13%<br />
Azángaro 130,576 138,998 6%<br />
Melgar 61,562 72,005 17%<br />
San Román 102,988 168,534 64%<br />
Carabaya 33,090 46,777 41%<br />
Huancané 109,113 80,317<br />
<strong>La</strong>mpa 38,979 43,461<br />
Sandia 47,360 50,042<br />
El Collao 75,456<br />
Chucuito 93,001<br />
Moho 33,320<br />
San Antonio <strong>de</strong> Putina 28,475<br />
Yunguyo 48,258<br />
Fuente: INEI<br />
<strong>La</strong> creación <strong>de</strong> nuevas provincias distorsionó el balance <strong>de</strong>mográfico <strong>de</strong> las provincias originarias, como<br />
sucedió con Huancané, que cedió parte <strong>de</strong> su territorio a S.A. <strong>de</strong> Putina. Pero no queda ninguna duda <strong>de</strong> que<br />
el mayor crecimiento <strong>de</strong> San Román giraba en torno a la pujante ciudad <strong>de</strong> Juliaca, que en contraste con el<br />
Puno terrateniente se consolidó como espacio mercantil, manteniendo influencia en la región que circunda al<br />
lago Titicaca y la zona fronteriza. <strong>Los</strong> hermanos Cáceres y el llamado «cacerismo» son la expresión política <strong>de</strong><br />
esta transformación <strong>de</strong> Juliaca. Según algunos estudiosos, ello evi<strong>de</strong>ncia un nuevo po<strong>de</strong>r cholo, recambio <strong>de</strong><br />
los agotados po<strong>de</strong>res regionales. <strong>La</strong> persistencia legislativa <strong>de</strong> los representantes «caceristas» rediseñó la distribución<br />
<strong>de</strong>l po<strong>de</strong>r local y atrajo al Estado a la región. Corpuno, el aeropuerto y la universidad fueron los<br />
símbolos <strong>de</strong> aquella época. Entre el activismo sindical y el caciquismo, el «cacerismo» fue la punta <strong>de</strong> lanza <strong>de</strong><br />
un ciclo <strong>de</strong> cambios proseguido bajo el régimen reformista militar instalado en 1968.<br />
Con la reforma agraria, se crearon empresas asociativas cooperativa agraria <strong>de</strong> producción, empresa rural<br />
<strong>de</strong> propiedad social (ERPS) y sociedad agrícola <strong>de</strong> interés social (SAIS), fusionando las tierras más productivas<br />
<strong>de</strong> varias haciendas bajo una administración centralizada, encargada a un gerente contratado fiscalizado<br />
TOMO IV PÁGINA 205