14.05.2013 Views

Génesis y estructura de la 'Fenomenología del Espíritu' de Hegel

Génesis y estructura de la 'Fenomenología del Espíritu' de Hegel

Génesis y estructura de la 'Fenomenología del Espíritu' de Hegel

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

moral <strong>de</strong>l mundo, sino que es el espíritu que conoce al espíritu, y este puro<br />

reconocimiento <strong>de</strong> sí mismo en el otro es <strong>la</strong> autoconsciencia <strong>de</strong>l espíritu. El espíritu que<br />

ha progresado <strong>de</strong>s<strong>de</strong> <strong>la</strong> sustancia hasta el sujeto, ha pasado a ser para sí mismo lo que<br />

antes era para nosotros so<strong>la</strong>mente; se ha convertido en el saber <strong>de</strong> sí y, con ello, es el<br />

origen <strong>de</strong> una nueva reflexión sobre sí. Esta reflexión es caracterizada al final <strong>de</strong>l<br />

capítulo sobre el espíritu con el término <strong>de</strong> Dios: «Es Dios manifestándose en medio <strong>de</strong><br />

ellos.» Dicha manifestación <strong>de</strong> lo divino tiene una historia original, es <strong>la</strong> fuente <strong>de</strong> una<br />

fenomenología particu<strong>la</strong>r <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong> <strong>la</strong> fenomenología; fenomenología a <strong>la</strong> que<br />

podríamos aplicar justamente aquel<strong>la</strong>s pa<strong>la</strong>bras <strong>de</strong> san Buenaventura: itinerarium mentis<br />

in Deum.<br />

Así y todo, po<strong>de</strong>mos preguntarnos por qué esta autoconsciencia <strong>de</strong>l espíritu absolu'o<br />

da lugar a una dialéctica fenomenológica, y por qué, a su vez, se presenta como una<br />

serie <strong>de</strong> figuras imperfectas. Si el espíritu se ha convertido en saber <strong>de</strong> sí como espíritu,<br />

¿no hemos alcanzado ya el término <strong>de</strong>l <strong>de</strong>sarrollo fenomenológico? El espíritu ha<br />

conseguido, al fin, encontrarse a sí mismo, es, y es al mismo tiempo para sí mismo; ya<br />

no tiene una verdad que se oponga a su certeza, sino que, en esta dualidad siempre<br />

esencial al concepto <strong>de</strong> espíritu, un término no es ajeno al otro; son, recíprocamente, el<br />

espíritu. Sin embargo, hay que seña<strong>la</strong>r que «<strong>la</strong> diferencia entre el espíritu efectivo y el<br />

espíritu que se sabe como espíritu, o mejor dicho, entre sí mismo como consciencia y<br />

como autoconsciencia», 1121 no ha retornado aún al espíritu. Dicha diferencia queda<br />

suprimida para nosotros que hemos captado el sentido <strong>de</strong> <strong>la</strong> reconciliación dialéctica<br />

entre el espíritu finito y el espíritu infinito, pero no lo es inmediatamente cuando el<br />

concepto <strong>de</strong> religión sólo está puesto.<br />

Diferencia <strong>de</strong> <strong>la</strong> consciencia y dé<strong>la</strong> autoconsciencia <strong>de</strong>l espíritu. El espíritu que sabe<br />

el espíritu es autoconsciencia y consciencia al mismo tiempo; se representa a sí mismo<br />

en sí mismo, y esta representación <strong>de</strong> sí mismo es susceptible <strong>de</strong> transformarse en <strong>la</strong><br />

religión hasta que sea perfectamente a<strong>de</strong>cuada a lo que preten<strong>de</strong> expresar. El objeto<br />

que <strong>la</strong> consciencia contemp<strong>la</strong> sigue siendo el espíritu y no ya un mundo extraño (en este<br />

sentido, justamente, <strong>la</strong> religión es autoconsciencia <strong>de</strong>l espíritu), pero al mismo tiempo es<br />

un objeto <strong>de</strong> <strong>la</strong> consciencia, un objeto cuya forma no es inmediatamente <strong>la</strong> completa<br />

reve<strong>la</strong>ción <strong>de</strong> <strong>la</strong> esencia. Las distintas religiones, que son también como aspectos <strong>de</strong> una<br />

religión única, sólo difieren por <strong>la</strong> forma en que exponen en <strong>la</strong> consciencia esta esencia<br />

que es común a el<strong>la</strong>s, <strong>la</strong> autoconsciencia <strong>de</strong>l espíritu. «La serie <strong>de</strong> <strong>la</strong>s distintas religiones<br />

que se producirían representa, asimismo, so<strong>la</strong>mente los diversos aspectos <strong>de</strong> una<br />

religión única, o mejor dicho, <strong>de</strong> toda religión singu<strong>la</strong>r; y <strong>la</strong>s representaciones que<br />

parecen caracterizar a una religión efectiva con respecto a otra se encuentran en cada<br />

una <strong>de</strong> el<strong>la</strong>s. Pero, al mismo tiempo, <strong>la</strong> diversidad <strong>de</strong>be ser consi<strong>de</strong>rada también como<br />

una diversidad <strong>de</strong> <strong>la</strong> religión. En efecto, como el espíritu se encuentra en <strong>la</strong> diferencia<br />

<strong>de</strong> su consciencia y <strong>de</strong> su autoconsciencia, su movimiento tiene el objetivo <strong>de</strong> suprimir<br />

esta diferencia y dar a <strong>la</strong> figura, que es objeto <strong>de</strong> <strong>la</strong> consciencia <strong>la</strong> forma <strong>de</strong> <strong>la</strong><br />

autoconsciencia. » 1122<br />

Con <strong>la</strong> religión hemos llegado a un campo original <strong>de</strong> <strong>la</strong> experiencia humana. El<br />

propio espíritu se representa a sí mismo, es para sí el saber <strong>de</strong> sí mismo en lugar <strong>de</strong> ser<br />

so<strong>la</strong>mente <strong>la</strong> consciencia <strong>de</strong> su mundo, como ocurría con <strong>la</strong>s experiencias anteriores.<br />

«La unidad inmediata <strong>de</strong>l espíritu consigo mismo es el fundamento o <strong>la</strong> pura<br />

consciencia en cuyo interior <strong>la</strong> consciencia se <strong>de</strong>scompone.» 1123 Ahora su esencia es<br />

1121 Phénoménoiogie, II, p. 210 (Fenomenología, p. 399).<br />

1122 Phénoménologie. II, p. 212 (Fenomenología, p. 401).<br />

1123 Phénoménologie. II, p. 210 (Fenomenología, p. 400). Podría <strong>de</strong>cirse más sencil<strong>la</strong>mente: el nuevo<br />

elemento alcanzado en el saber <strong>de</strong> sí <strong>de</strong>l espíritu. Pero, en este elemento, el espíritu se pone <strong>de</strong> nuevo

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!