de Investigadores em leitura - Universidade do Minho

Figura 4
Esa anticipación se concreta en las expectativas iniciales y básicas, que casi siempre
son necesarias para iniciar la lectura. Durante el proceso de lectura, se trata ya de
expectativas - surgidas de sus propias previsiones, suscitadas y reguladas por las mismas
características del texto - sobre las cuales se apoya para su avance a través del texto.
Algunos ejemplos
Con los ejemplos que siguen se pretende exponer el hecho que la cuidada y elaborada
presencia de un tipo u otros de paratextos puede resultar o un simple componente para
“transformar el texto en libro, en producto editorial”, o bien trascender esa mera función
formal, para implicar al lector y ampliar el espacio discursivo del texto fuera de los mismos
márgenes de sus “páginas”, o si se prefiere, haciendo que el texto salga de sus páginas
para dar con el lector y atraerlo hacia ellas, como sucede en el álbum de Scieszka y Smith,
obra que considero como paradigma de diversas facetas del libro y del álbum ilustrado.
Para poder valorar el alcance formativo de los paratextos será necesario señalar lo
que representan o aportan los paratextos básicos, frente a otros de recursos y funciones
más complejas y elaboradas. El siguiente ejemplo muestra la sobriedad de elementos
paratextuales, propia de una edición básica. La imagen recoge la tapa y la contratapa.
Intencionadamente he elegido una edición en una lengua que nos resulta poco conocida,
ruso, de modo que las indicaciones del título no nos resulten transparentes… de momento.
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