John Taylor Gatto Historia secreta del sistema ... - iessecundaria
John Taylor Gatto Historia secreta del sistema ... - iessecundaria
John Taylor Gatto Historia secreta del sistema ... - iessecundaria
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
escuelas comunes, un ideal <strong>del</strong> que Parker dijo que era «merecedor de todos los sacrificios necesarios para<br />
producir el informe. La conclusión es que no debería haber una cosa como educación de clase». Parker había<br />
notado el inicio de un intento de suministrar a la gente corriente educación sólo parcial. Estaba aliviado de<br />
que hubiera sido rechazada. O eso pensaba.<br />
Los pronunciamientos <strong>del</strong> Comité de los Diez resultaron ser el último momento <strong>del</strong> concepto de escuela<br />
común aparte de la retórica <strong>del</strong> Cuatro de Julio. La escuela común estaba siendo enterrada por la<br />
determinación de una nueva clase feudal de empresarios de ver la desaparición de un viejo orden<br />
democrático-republicano y sus peligrosos ideales libertarios. Por si los «educadores», como estaban<br />
comenzando tímidamente a referirse a sí mismos, tenían alguna confusión sobre lo que se esperaba de ellos<br />
en 1910, las reuniones de la NEA de ese año estaban específicamente diseñadas para aclararles las ideas. A<br />
los asistentes se les dijo que la comunidad empresarial había juzgado su trabajo hasta entonces como<br />
«teórico, visionario y poco práctico»:<br />
Por todo el país nuestros cursos son atacados y la demanda de revisión está en la línea de adecuar la<br />
enseñanza matemática a las necesidades de las masas.<br />
En 1909, Leonard Ayres acusaba en Laggards in Our Schools de que, aunque estas instituciones estaban<br />
llenas de «niños atrasados», los programas escolares estaban, desgraciadamente, «adaptados [...] para los<br />
inusualmente brillantes». Ayres inventó medios para medir la eficiencia de los <strong>sistema</strong>s escolares mediante<br />
el cálculo de la tasa de repetidores y de alumnos que abandonan los estudios, un juego que todavía se hace<br />
notar hoy. Esto era dar por sentado el asunto con ganas, pero jamás se cuestionó este juicio.<br />
El <strong>sistema</strong> de eficiencia de management de <strong>Taylor</strong> era enseñado formalmente en Harvard y Dartmouth en<br />
1910. Al año siguiente aparecieron 219 artículos sobre el tema en revistas, seguirían cientos más: en 1917 un<br />
editor de Boston proporcionó una bibliografía de 550 referencias a la ciencia <strong>del</strong> management escolar. Como<br />
núcleo duro de la reforma escolar, el management científico disfrutaba de reconocimiento nacional. Era la<br />
principal cuestión en la convención de 1913 <strong>del</strong> Departamento de Inspección. Paul Hanus, profesor de<br />
educación en Harvard, lanzó una serie de libros para la World Book Company con el título School Efficiency<br />
Series, y el famoso muckraker J. M. Rice publicó su propio Scientific Management in Education en 1913,<br />
donde mostraba la escolarización de «pupilaje» local como un campo de batalla de gente despreciable y<br />
timadores.<br />
La influencia de Frederick <strong>Taylor</strong> no se limitó a América. Pronto dio la vuelta al mundo. Principles of<br />
Scientific Management esparció la manía de la eficiencia por Europa, Japón y China. Una carta al director de<br />
The Nation en 1911 nos mete en la atmósfera de lo que estaba pasando:<br />
Estoy harto <strong>del</strong> llamado management científico. He oído hablar de ello a managers científicos, presidentes<br />
de universidad, a personas conocidas casualmente en el tren. He leído sobre ello en los diarios, semanarios,<br />
la revista de diez centavos y en el Outlook. Sólo me he perdido su tratamiento por Theodore Roosevelt, pero<br />
eso es probablemente porque no puedo mantenerme al ritmo de sus escritos. Durante 15 años he sido<br />
suscriptor de una revista que trata de asuntos de ingeniería y sentía que era de mi incumbencia mantenerme<br />
en contacto con ello; pero el contacto se ha convertido en presión, y la presión se hizo aplastante, hasta que<br />
la masa de artículos sobre práctica de ventas y management científico amenazaba aplastar todo pensamiento<br />
de mi cerebro y cancelé mi suscripción.<br />
En un artículo de Izvestia fechado en abril de 1918, Lenin instó a aplicar el <strong>sistema</strong> a los rusos.<br />
3 El <strong>sistema</strong> de Ford y la comuna Kronstadt<br />
«Un anti-intelectual, alguien que odia a los individuos», es la manera en que Richard Stites caracteriza a<br />
<strong>Taylor</strong> en Revolutionary Dreams, su libro sobre el inicio utópico de la Era Soviética. Dice Stites: «Su<br />
<strong>sistema</strong> es la base para prácticamente cualquier distopía retorcida de nuestro siglo, desde la muerte en la<br />
campana de gas en Nosotros, de Zamiatin, por el indescriptible crimen de desviación, hasta el