John Taylor Gatto Historia secreta del sistema ... - iessecundaria
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de una resuelta lógica de ortodoxia. Pero esa ortodoxia estará siempre comprometida al servicio de la<br />
economía, no de los intereses de su clientela nominal.<br />
El New York Times <strong>del</strong> 18 de enero de 2001 tenía esto que decir en la página A22 sobre la política<br />
económica de la escolarización: «La ayuda de educación se distribuye mediante al menos 55 fórmulas<br />
diferentes tan técnicas que sólo un grupo selecto puede pretender comprenderlas». ¿Qué puede explicar<br />
esto? ¿Accidente? ¿Estupidez? No, nada de eso: «Las fórmulas de la escuela son incomprensibles para<br />
disimular cómo funciona realmente el <strong>sistema</strong>», una explicación atribuida por el Times a un político<br />
«influyente», aparte de eso no identificado.<br />
A medida que la escolarización invade cada vez más la vida familiar y personal, monopolizando el<br />
desarrollo de la mente y <strong>del</strong> carácter, los niños se convierten en recursos humanos a disposición de cualquier<br />
forma de gobierno que sea dominante en el momento. Eso confiere una ventaja enorme a la clase dirigente<br />
<strong>del</strong> momento, permitiéndole reproducirse con éxito, excluyendo la fuerza de sus competidores. La<br />
escolarización se convierte en lo que viene a ser la forma definitiva de subvención para el bienestar<br />
corporativo y de la jerarquía, un destructor <strong>del</strong> libre mercado.<br />
Sin la oposición hecha posible por la educación (más que por la escolarización) de los niños, una<br />
Corporación de Gestión Planetaria es nuestro destino seguro, que de forma igualmente segura será seguida<br />
algún tiempo después de su nacimiento por una disolución en el caos, el destino de todos los imperios.<br />
Nuestras tragedias de la escuela son un aviso anticipado de algo inherente a las leyes de la termodinámica<br />
humana. El caos sube constantemente en los <strong>sistema</strong>s cerrados e incomunicados <strong>del</strong> exterior, la<br />
superorganización se precipita en desorganización. Donde la conciencia en desarrollo de los niños pide jazz<br />
a gritos, lo que consigue en su lugar son ejercicios de escalas.<br />
Capítulo 18 Escapando de la trampa<br />
Tenemos que hacer una elección de una vez por todas: entre el imperio y la salvación espiritual y<br />
física de nuestro pueblo. Ningún camino se abrirá jamás para el pueblo a menos que el gobierno<br />
abandone el control sobre nosotros o cualquier aspecto de nuestras vidas. Ha conducido al país a<br />
un abismo y no sabe el camino para salir.<br />
ALEXANDER SOLZHENITSYN, citado por Pravda (1986)<br />
¡Al diablo con el queso, salgamos de esta trampa!<br />
UN RATÓN<br />
1 Silicon Valley<br />
PARA reformar nuestro tratamiento de la juventud, debemos obligar a cambiar el centro de gravedad de la<br />
escuela. En este capítulo intentaré mostrar qué quiero decir, pero mi método será en gran parte indirecto.<br />
Formar el inicio de una solución a partir de estos materiales requerirá su compromiso activo en una<br />
asociación imaginativa conmigo, una asociación que comenzará en Silicon Valley.<br />
Fui a Silicon Valley a mediados de 1999 para pronunciar un discurso ante unos ejecutivos de Cypress<br />
Semiconductor sobre el tema general de la reforma de la escuela. Los cincuenta o sesenta que aparecieron en<br />
mi charla salidos directamente <strong>del</strong> trabajo estaban vestidos tan informalmente que podían haber sido<br />
confundidos fácilmente con repartidores de pizzas o taxistas. El presidente ejecutivo de la corporación, su<br />
fundador T. J. Rogers, apareció de forma similar. No lo reconocí como el mismo hombre famoso<br />
representado en una gran foto mural puesta en la pared de fuera hasta que me presentó a la audiencia y la<br />
audiencia a mí.