07.05.2013 Views

John Taylor Gatto Historia secreta del sistema ... - iessecundaria

John Taylor Gatto Historia secreta del sistema ... - iessecundaria

John Taylor Gatto Historia secreta del sistema ... - iessecundaria

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

Fue sólo cuando Tenzin Gyatso, decimocuarto Dalai Lama, líder espiritual y temporal <strong>del</strong> pueblo tibetano,<br />

llegó brevemente a la estructura, fin y utilidad <strong>del</strong> budismo --un punto en el que pasó de visita no más de<br />

cinco minutos-- cuando fui capaz de ver con una perspectiva un poco clara dónde el cristianismo había<br />

tomado un camino diferente, y el cristianismo norteamericano uno muy diferente. La meta <strong>del</strong> budismo era<br />

la «felicidad», dijo, la felicidad era la clave. El Dalai Lama dividió las principales religiones <strong>del</strong> mundo en<br />

«religiones con Dios» y «religiones sin Dios», con el budismo en la última categoría.<br />

Su Santidad pareció centrarse maravillosamente cuando en respuesta a una pregunta de la audiencia sobre<br />

cómo las personas y países ricos podían encontrar espiritualidad, respondió (otra vez, creo, con una sonrisa<br />

maliciosa) que en el budismo, con su orientación hacia las situaciones cómodas, ¡era más fácil ser espiritual<br />

para la gente rica que para los pobres! Tenzin Gyatso tenía preparada otra píldora amarga para esas almas<br />

románticas, que esperaban una dulce presencia continua en sus vidas de religiones importadas que<br />

enseñaban lo que ellos sentían que les faltaba en la propia, cuando dijo: «Mejor no tomen la religión de otro,<br />

hay mucha sabiduría en la suya». El Dalai Lama dijo en otro momento, como hablando para sí, que la<br />

religión no era para cada día: la religión era para tiempo de dolor. Tal como recuerdo, sus palabras exactas<br />

fueron: «La religión algo como medicina, cuando no dolor no necesidad de medicina: lo mismo la religión».<br />

A la mañana siguiente, era mi turno de hablar, y con las palabras <strong>del</strong> Dalai Lama frescas en mi mente,<br />

formulé la vía cristiana como una cuya meta no era la felicidad en el sentido usual. Era una vía donde la<br />

riqueza puede ser un obstáculo para los fines de obediencia a Dios, a amar al prójimo como a sí mismo y a la<br />

redención a través de la autotrascendencia. A diferencia <strong>del</strong> budismo tibetano, la religión occidental no tiene<br />

una aplicación extremadamente específica, por tanto no puede ser comparada con una medicina. De acuerdo<br />

con el cristianismo, la religión no es una cosa ocasional para cuando se la necesita, sino un medio en el que<br />

exteriorizamos nuestras vidas. Nada tiene significado sin religión. Recuerde, incluso si usted discrepa<br />

violentamente de lo que acabo de decir aquí, que eso no es relevante para esta discusión. No tengo ningún<br />

impulso para convertirle a nada. Mi propósito es sólo mostrar que la tradición de sabiduría <strong>del</strong> cristianismo<br />

norteamericano tiene algo enorme que decir acerca de en qué hemos fallado en la escolarización obligatoria<br />

masiva.<br />

El espíritu abandonado <strong>del</strong> cristianismo norteamericano ha adquirido urgencia mayor para mí --un católico<br />

romano no practicante-- a medida que entro en la vejez, porque no hace falta mucha sabiduría para ver que<br />

los norteamericanos han sido sustancialmente separados de su propia tradición de sabiduría por fuerzas<br />

hostiles a su permanencia. Ningún mecanismo empleado para hacer esto ha sido más importante que la<br />

actuación de lo que llamamos educación pública. Al desatender este lazo de sabiduría hemos olvidado<br />

gradualmente una poderosa doctrina ensamblada a lo largo de miles de años por incontables millones de<br />

mentes, corazones y espíritus, que trata de los importantes problemas comunes de la vida que la experiencia<br />

ha mostrado ser impermeables a riquezas, intelecto, encanto, ciencia o contactos poderosos.<br />

Allá donde voy estos días por los Estados Unidos oigo hablar de algo llamado la crisis de disciplina, cómo<br />

los niños no están motivados, cómo resisten al aprendizaje. Eso son tonterías, por supuesto. Los niños<br />

resisten a la enseñanza, como deberían, pero nadie resiste al aprendizaje. Sin embargo, no discutiré que las<br />

escuelas están a menudo en el caos. Incluso las que parecen tranquilas y ordenadas están en unas<br />

profundidades de caos moral más allá <strong>del</strong> poder de alcance <strong>del</strong> periodismo de investigación. Los niños<br />

desconectados subrayan el fracaso de la escuela cuando llegan a la atención <strong>del</strong> público, por tanto tienen que<br />

ser explicados de alguna forma por las autoridades.<br />

No creo que esté fuera de lugar decir que todos nosotros, aunque discrepemos en cualquier otra cosa,<br />

queremos que los chicos estén disciplinados en el sentido de ejercer autocontrol. Eso también va por las<br />

madres negras de Harlem, a pesar de la religión científica de la escolarización que cree que esas madres son<br />

genéticamente deficientes. Pero todos nosotros queremos algo más que sólo buen comportamiento. Rogamos<br />

por la disciplina, en el sentido más especializado de intereses intelectuales y habilidades lo suficientemente<br />

bien dominadas como para proporcionar alegría y consuelo a todas nuestras existencias, y quizás también<br />

algún dólar.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!