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John Taylor Gatto Historia secreta del sistema ... - iessecundaria

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gente común norteamericana. Pero nuevas élites directivas apuntaban a un futuro basado en una perspectiva<br />

espartana.<br />

Cuando el <strong>sistema</strong> educativo de Atenas pasó a la Roma imperial, comenzaron a aparecer unas pocas escuelas<br />

que podríamos reconocer. Las familiares prácticas de castigo de la América colonial se pueden anticipar en<br />

el famoso fresco de Herculano, que muestra un alumno agarrado por dos de sus compañeros mientras el<br />

maestro avanza llevando un largo látigo. Las escuelas romanas debían de comenzar la disciplina por la<br />

mañana temprano, porque encontramos que el poeta Marcial maldecía una escuela por despertarle al canto<br />

<strong>del</strong> gallo con gritos y palizas: Horacio inmortaliza al pedagogo Orbilius por inculcarle a azotes el amor por<br />

los viejos poetas. Pero no deberíamos dejarnos engañar por estas referencias a la escuela. Las pocas escuelas<br />

que había en Roma eran para chicos de las clases acomodadas, e incluso la mayoría de ellos confiaba en<br />

tutores, tradición y emulación, no en la escuela.<br />

La palabra pedagogo es en latín una clase especializada de esclavo encargada de conducir el alumno hasta el<br />

maestro. Con el tiempo al esclavo se le dieron deberes adicionales, su papel se amplió al de maestro de<br />

ejercicios, un proceder inmortalizado en la frase de Varrón instituit pedagogus, docet magister: en mi<br />

mohoso latín de monaguillo, el maestro crea la instrucción, el esclavo la inculca. Una clave para entender la<br />

escuela moderna es esta: los hombres libres nunca fueron pedagogos. Y sin embargo nos referimos a la<br />

ciencia de la educación como pedagogía. El ignorante padre que inocentemente expone los temas que le<br />

preocupan al pedagogo, ya se llame esa pobre alma profesor, director o inspector, está comenzando<br />

normalmente un juego de frustración que acabará sin ningún cambio fundamental. Es como un perro que<br />

ladra al árbol que no es mientras el zorro está a salvo en lo más profundo <strong>del</strong> bosque.<br />

La pedagogía es una tecnología social para atraer la atención y cooperación (u obediencia) mientras se<br />

ponen cuerdas a la mente y se ponen en las manos de un amo invisible. Esto se puede hacer de forma<br />

integral, con sonrisas, música y simulaciones de intelección de baja exigencia, o se puede hacer ásperamente<br />

con instrucción rigurosa y exámenes competitivos. La calidad de la desconfianza que se pretende crear en<br />

uno mismo es similar en cualquier caso.<br />

La pedagogía es un concepto útil para ayudarnos a desentrañar algunos de los misterios de la educación<br />

moderna. Que es crecientemente vital para el orden social se demuestra por la revolución silenciosa en la<br />

paga de los profesores que ha ocurrido desde los 60. Como con el trabajo de la policía (con el que la<br />

pedagogía tiene importantes similitudes), la paga de la escuela se ha hecho relativamente buena, las horas de<br />

trabajo cortas, su seguridad laboral de primera categoría. Compare esto con los años dorados de la<br />

escolarización en una aula única donde la paga era sólo de subsistencia y los maestros estaban obligados a<br />

vivir internos para mantener cuerpo y alma juntos. Sin embargo no había entonces escasez de solicitantes y<br />

muchos hijos de norteamericanos destacados comenzaron sus vidas adultas como maestros de escuela.<br />

Con la opulencia relativa de hoy, sería fácil ocupar las plazas de profesor con hombres y mujeres expertos si<br />

ese fuera el propósito. Un pequeño ajuste en lo que son requerimientos de licencia racionalmente<br />

indefendibles haría que personas con talento, muchos adultos de rendimiento probado de cincuenta y tantos<br />

o sesenta y tantos años, estuvieran disponibles para enseñar. El hecho de que no exista ese acceso fluido es<br />

un buen signo de que el propósito de la escuela es más de lo que aparenta. La consistencia un año tras otro<br />

de la mediocridad de los candidatos a profesor demuestra claramente que la institución escolar activamente<br />

busca, alimenta, contrata y promueve el calibre de personal que necesita.<br />

8 Las siete artes liberales<br />

Cuando Roma se disolvió en el siglo VI, el espíritu romano surgió como Iglesia Cristiana Universal, una<br />

inspirada secta religiosa desarrollada espontáneamente como un vehículo que confería la última<br />

responsabilidad para la salvación personal en la soberanía individual. La Iglesia romana llegó a la<br />

escolarización como un apéndice útil, y así las pocas escuelas que se podían encontrar tras la caída de Roma<br />

estaban en manos eclesiásticas, quedando ahí durante los siguientes once o doce siglos. La promoción dentro<br />

de la Iglesia comenzó a depender de haber recibido primero una educación de tipo helénico. Así se creó una

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