Estrategias didácticas. Textos expositivos - Escuela Normal Superior
Estrategias didácticas. Textos expositivos - Escuela Normal Superior
Estrategias didácticas. Textos expositivos - Escuela Normal Superior
You also want an ePaper? Increase the reach of your titles
YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.
EDUCACION Y COMUNICACIÓN ORAL______________________________________<br />
especiales); por eso, las lenguas<br />
evolucionan sobre todo en el plano oral y la<br />
escritura resulta más conservadora.<br />
Además, como el habla se produce siempre<br />
en una situación dada, para enseñar y<br />
aprender a hablar hay que brindar a los<br />
estudiantes las múltiples situaciones<br />
necesarias, bien reales, bien “simuladas”<br />
en el aula. En la escuela de hace años se<br />
leía en voz alta, se recitaba, se hacían<br />
"exámenes” orales; en casa, se escuchaba<br />
y hablaba más, pues no habia televisión ni<br />
casi radio; a las fiestas del pueblo llegaban<br />
cómicos, titiriteros, se cantaban y bailaban<br />
canciones tradicionales...Ahora nada de<br />
eso sucede y el gusto por la precisión y la<br />
belleza de la comunicación oral<br />
desaparece. Sin embargo, nosotros<br />
queremos desterrar el viejo refrán que<br />
afirma: “Los niños, mejor vistos que oídos.<br />
En este sentido, vale la pena recordar las<br />
palabras de Borges:<br />
Por esto, Cassirer caracteriza al ser humano<br />
como “homo symbolicus” y Bergson como<br />
“homoloquax”. Ferrater Mora comenta sobre<br />
este tema que: “La característica del hombre<br />
parece ser no tanto la posesión (o siquiera la<br />
constitución) del lenguaje como la posibilidad de<br />
plantearse el problema del mismo” (FERRATER<br />
148<br />
Mows, J.: 1991, 23).<br />
“En la antigüedad, el concepto que se<br />
tenía de un libro no es el que existe ahora<br />
entre nosotros. Ahora pensamos qué un<br />
libro es un instrumento para justificar, para<br />
defender, para combatir, para exponer o<br />
para historiar una doctrina o una forma<br />
política; en la antigüedad, en cambio, no se<br />
tenía esa idea. Se pensaba que un libro era<br />
un sucedáneo de la palabra oral. Se le vela<br />
de esa manera. Bástenos recordar aquel<br />
pasaje de Platón en el cuál dice que los<br />
libros son como estatuas, o como efigies:<br />
“Parecen seres vivos, pero cuando se les<br />
pregunta algo no saber contestar.”<br />
(ALIFANO, R.: 1986, 162). Así, a la<br />
expresión “verbal volant, cripta manent”,<br />
puede dársele un valor positivo (es mucho<br />
más rápido y requiere menos esfuerzo<br />
hablar que escribir), pues, verdaderamente,<br />
la voz vuela, canta, encanta.Y más<br />
ahora, con la difusión que le dan los<br />
medios de comunicación de masas, en<br />
cuanto lengua “transmitida», mediatizada y<br />
con características propias, tanto en su uso<br />
formal (noticias, documentales,<br />
conferencias…) como en su uso informal<br />
(comentarios, charlas, entrevistas...),su<br />
posibilidad de recepción a distancia y de<br />
ser repetida cuantas veces se quiera. A la<br />
vez, “hablar como un libro abierto”, revela<br />
el prestigio de lo escrito y la falta de<br />
claridad con respecto a las características<br />
diferenciadoras de ambos códigos:<br />
La bibliografía española existente,<br />
actualizada y rigurosa sobre didáctica de la<br />
comunicación oral es escasima, si se la<br />
compara con la de otros campos. La