You also want an ePaper? Increase the reach of your titles
YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.
Clarissa Pinkola Estés <strong>Mujeres</strong> <strong>que</strong> <strong>corren</strong> <strong>con</strong> <strong>los</strong> <strong>lobos</strong><br />
inducen a una persona a robar, engañar, asesinar, actuar <strong>con</strong> exageración y cosas<br />
por el estilo. Los aspectos negativos de la sombra tienden a ser extrañamente<br />
excitantes a pesar de su carácter entrópico, por cuyo motivo arrebatan el equilibrio,<br />
la ecuanimidad y la vida de <strong>los</strong> individuos, las relaciones y <strong>los</strong> grupos.<br />
Pero la sombra también puede <strong>con</strong>tener <strong>los</strong> divinos, deliciosos, bel<strong>los</strong> y poderosos<br />
aspectos de la personalidad. Sobre todo en el caso de las mujeres, la<br />
sombra <strong>con</strong>tiene casi siempre unos aspectos muy hermosos del ser <strong>que</strong> la cultura<br />
ha prohibido o a <strong>los</strong> <strong>que</strong> apenas presta apoyo. En el fondo del pozo de la psi<strong>que</strong><br />
de demasiadas mujeres se encuentra la creadora visionaria, la astuta narradora<br />
de cuentos, la previsora, la <strong>que</strong> sabe hablar bien de sí misma sin menosprecio, la<br />
<strong>que</strong> puede mirarse a la cara sin pestañear, la <strong>que</strong> se esfuerza por mejorar su arte.<br />
Los impulsos positivos de la sombra en las mujeres de nuestra cultura suelen<br />
girar a menudo en torno al permiso para crear una vida hecha a mano.<br />
Estos aspectos descartados, menospreciados e "inaceptables" del alma y el<br />
yo no se limitan a permanecer ocultos en la oscuridad, sino <strong>que</strong> más bien se dedican<br />
a <strong>con</strong>spirar <strong>con</strong> el fin de establecer cómo y cuándo entrarán en acción para<br />
poder alcanzar la libertad. Borbotean en el in<strong>con</strong>ciente, hierven a fuego lento hasta<br />
<strong>que</strong> un día, por muy hermética <strong>que</strong> sea la tapa <strong>que</strong> <strong>los</strong> cubre, estallan hacia<br />
fuera y hacía arriba en un desbordado torrente dotado de voluntad propia.<br />
Entonces es, tal como decimos en nuestras remotas regiones boscosas, como<br />
intentar introducir de nuevo diez libras de barro en un saco de cinco libras.<br />
Cuesta taponar lo <strong>que</strong> ha estallado en la sombra una vez <strong>que</strong> se ha producido la<br />
detonación. Aun<strong>que</strong> hubiera sido mucho mejor haber en<strong>con</strong>trado un medio integral<br />
de vivir <strong>con</strong>cientemente la alegría <strong>que</strong> nace del espíritu creativo en lugar de<br />
enterrarlo, a veces la mujer se ve empujada <strong>con</strong>tra la pared y éste es el resultado.<br />
La vida de la sombra se produce cuando las escritoras, las pintoras, las<br />
bailarinas, las madres, las buscadoras, las místicas, las estudiantes o las viajeras<br />
dejan de escribir, pintar, bailar, hacer de madres, buscar, escudriñar, aprender,<br />
hacer prácticas. Es posible <strong>que</strong> dejen de hacerlo por<strong>que</strong> a<strong>que</strong>llo a lo <strong>que</strong> han dedicado<br />
tanto tiempo no ha dado el resultado <strong>que</strong> ellas esperaban o no ha recibido<br />
la acogida <strong>que</strong> se merecía 0 por otras innumerables razones. Cuando la <strong>que</strong> hace<br />
algo se detiene por el motivo <strong>que</strong> sea, la energía <strong>que</strong> fluye naturalmente de ella le<br />
desvía hacia el mundo subterráneo, en el <strong>que</strong> aflora dónde y cuándo Puede. Sabiendo<br />
<strong>que</strong> en pleno día no puede emprender <strong>con</strong> ímpetu cualquier cosa <strong>que</strong> desee,<br />
la mujer empieza a llevar una extraña doble vida, fingiendo una cosa en las<br />
horas diurnas y actuando de otra Manera cuando tiene ocasión.<br />
Cuando la mujer trata de comprimir su vida en un pulcro y precioso pa<strong>que</strong>tito,<br />
lo único <strong>que</strong> <strong>con</strong>sigue es empujar a presión toda su energía vital hacia la<br />
sombra. "Estoy bien, muy bien", dice la mujer, La miramos desde el otro lado de<br />
la estancia o reflejada en el espejo, Sabemos <strong>que</strong> no está bien. Más adelante, un<br />
día nos enteramos de <strong>que</strong> se ha liado <strong>con</strong> un intérprete de flautín y se ha largado<br />
a Tippicanoe para <strong>con</strong>vertirse en una reina de salón de billar. Y nos preguntarnos<br />
qué ha ocurrido, pues sabemos <strong>que</strong> ella aborrece a <strong>los</strong> intérpretes de flautín y<br />
siempre quiso vivir en la isla de Orcas y no en Tippicanoe y jamás nos había comentado<br />
nada acerca de <strong>los</strong> salones de billar.<br />
Como la Hedda Gabler de la obra de Henrik lbsen, la mujer salvaje puede<br />
simular vivir "una existencia corriente" mientras rechina <strong>los</strong> dientes, pero siempre<br />
hay <strong>que</strong> pagar un precio. Hedda tiene una peligrosa y apasionada vida secreta<br />
y juega <strong>con</strong> un ex amante y <strong>con</strong> la Muerte. Por fuera finge estar encantada de<br />
tocarse <strong>con</strong> sombreritos y de escuchar <strong>los</strong> comentarios de su reseco marido acer-<br />
193