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Clarissa Pinkola Estés <strong>Mujeres</strong> <strong>que</strong> <strong>corren</strong> <strong>con</strong> <strong>los</strong> <strong>lobos</strong><br />
1. Eso no significa <strong>que</strong> la relación termina sino <strong>que</strong> ciertos aspectos de la relación<br />
se desprenden de la piel, pierden el caparazón, desaparecen sin dejar rastro, no indican<br />
su paradero y, de repente, reaparecen <strong>con</strong> otra forma, otro color y otra textura.<br />
2. Durante una de mis visitas a la lujuriante tierra de México sufrí un dolor de<br />
muelas y un boticario me envió a una mujer famosa por su capacidad de aliviar <strong>los</strong> dolores<br />
de muelas. Mientras me aplicaba las medicinas, la mujer me habló de Txati, el gran<br />
espíritu femenino. Deduje de su relato <strong>que</strong> Txati era una diosa de la Vida/Muerte/Vida,<br />
pero hasta ahora no he en<strong>con</strong>trado ninguna referencia en la literatura académica. Entre<br />
otras cosas, mi abuelita, la curandera me dijo <strong>que</strong> Txati es una gran curandera <strong>que</strong>, al<br />
mismo tiempo, es el pecho y la tumba. Txati lleva <strong>con</strong>sigo un cuenco de cobre; sí se le da<br />
la vuelta en un sentido, <strong>con</strong>tiene y derrama alimento; si se le da la vuelta en el otro, se<br />
<strong>con</strong>vierte en el recipiente del alma de <strong>los</strong> <strong>que</strong> acaban de morir. Txati es la <strong>que</strong> preside <strong>los</strong><br />
alumbramientos, las relaciones amorosas y la muerte.<br />
3. Hay muchas versiones de la historia de Sedna, una poderosa divinidad <strong>que</strong> vive<br />
bajo el agua y es invocada por las curanderas <strong>que</strong> le piden el restablecimiento de la salud<br />
y la vida de <strong>los</strong> enfermos y <strong>los</strong> moribundos.<br />
4. Ciertamente, la "ocupación de espacio" puede ser una válida necesidad de soledad,<br />
pero seguramente es la "mentira piadosa" más habitual en las relaciones de nuestra<br />
época. En lugar de hablar de lo <strong>que</strong> la preocupa, la persona "ocupa un espacio". Es una<br />
versión adulta de "El perro se me ha comido <strong>los</strong> deberes" o "mi abuela murió ... " por<br />
quinta vez.<br />
5. Y también de lo no todavía bello.<br />
6. Del poema de caza "Integrity". Adrienne Rich, The Fact of a Doorframe, Poems<br />
Selected and New, 1950—1984. Nueva York, W. W. Norton, 1984.<br />
7. La inclusión del más joven <strong>que</strong> venda la herida del más viejo pertenece al cuento<br />
de mi familia "La herida <strong>que</strong> apestaba".<br />
8. Es un resumen de un cuento muy largo <strong>que</strong>, para <strong>con</strong>tarse como es debido,<br />
suele exigir "tres noches durante la estación de <strong>los</strong> relámpagos".<br />
CAPITULO 6<br />
El hallazgo de la manada: La dicha de la pertenencia<br />
1. Aun<strong>que</strong> algunos analistas junguianos <strong>con</strong>sideran <strong>que</strong> Andersen era un "neurótico"<br />
cuya obra no merecía estudiarse, yo creo <strong>que</strong> ésta y, sobre todo, <strong>los</strong> temas de <strong>los</strong><br />
cuentos <strong>que</strong> elegía para embellecer<strong>los</strong>, son muy importantes, pues reflejan el sufrimiento<br />
de <strong>los</strong> niños y el sufrimiento del Yo del alma. Esta sección y este desmenuzamiento del<br />
alma juvenil no es sólo un tema habitual en el tiempo y el lugar en <strong>los</strong> <strong>que</strong> Andersen vivió.<br />
Sigue siendo una cuestión esencial del alma en todo el mundo. Aun<strong>que</strong> el tema de<br />
<strong>los</strong> ma<strong>los</strong> tratos al alma y al espíritu de <strong>los</strong> niños, <strong>los</strong> adultos o <strong>los</strong> ancianos puede ser<br />
objeto de menosprecio como <strong>con</strong>secuencia de sus intelectualizaciones románticas, yo<br />
creo <strong>que</strong> Andersen lo afronta <strong>con</strong> honradez. La psicología clásica en general se adelanta a<br />
la comprensión por parte de la sociedad de la extensión y profundidad de <strong>los</strong> ma<strong>los</strong> tratos<br />
infantiles en las distintas clases y culturas. Y <strong>los</strong> cuentos de hadas se adelantan a la<br />
psicología en el descubrimiento del daño deliberado <strong>que</strong> <strong>los</strong> seres humanos se causan<br />
entre sí.<br />
2. El narrador rústico de cuentos es el <strong>que</strong> tiende a no tener demasiadas capas de<br />
cinismo y <strong>con</strong>serva el sentido común y también el sentido del mundo nocturno. Según<br />
esta definición, un individuo instruido <strong>que</strong> se ha criado en una metrópoli de asfalto podría<br />
ser un rústico. La palabra se refiere más al estado mental <strong>que</strong> al hábitat físico del<br />
individuo. En mi infancia, oí <strong>con</strong>tar El patito feo por boca de "las tres Katies", mis ancianas<br />
tías paternas, todas ellas rústicas.<br />
3. Ésta es una de las principales razones por las <strong>que</strong> un adulto se somete a un<br />
análisis o a un auto análisis: para clasificar y ordenar <strong>los</strong> factores y complejos paternos,<br />
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