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Mujeres que corren con los lobos

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Clarissa Pinkola Estés <strong>Mujeres</strong> <strong>que</strong> <strong>corren</strong> <strong>con</strong> <strong>los</strong> <strong>lobos</strong><br />

<strong>que</strong> ésta no existe. El hecho de <strong>con</strong>templar la verdad provoca una intensificación<br />

de la hemorragia de energía. Es algo muy doloroso <strong>que</strong> corta las arterias. Tenemos<br />

<strong>que</strong> intentar corregir inmediatamente esta terrible situación.<br />

En este cuento vemos <strong>que</strong> la llave es también un recipiente <strong>que</strong> sirve para<br />

recibir la sangre <strong>que</strong> es el recuerdo de lo <strong>que</strong> la mujer ha visto y ahora ya sabe.<br />

Para las mujeres, la llave simboliza siempre la entrada en un misterio o un <strong>con</strong>ocimiento.<br />

En otros cuentos de hadas la llave simbólica se representa a menudo<br />

<strong>con</strong> expresiones tales como "Ábrete, Sésamo", las palabras <strong>que</strong> Alí Babá le grita a<br />

una escarpada montaña, dando lugar a <strong>que</strong> ésta retumbe como un trueno y se<br />

abra para <strong>que</strong> él pueda entrar. De una manera más picaresca, en <strong>los</strong> estudios<br />

Disney el hada madrina de Cenicienta canturrea alegremente, las calabazas se<br />

<strong>con</strong>vierten en carrozas y <strong>los</strong> ratones en cocheros.<br />

En <strong>los</strong> misterios eleusinos, la llave estaba es<strong>con</strong>dida en la lengua, lo cual<br />

significaba <strong>que</strong> el meollo de una cuestión, la clave o <strong>los</strong> vestigios se en<strong>con</strong>traban<br />

en unas determinadas palabras o unas preguntas clave. Y las palabras <strong>que</strong> más<br />

necesitan las mujeres en situaciones similares a la descrita en Barba Azul son:<br />

¿Qué hay detrás? ¿Qué no es lo <strong>que</strong> parece? ¿Qué sé en lo más hondo de mis<br />

ovarios y no quiero saber? ¿Qué parte de mí ha sido asesinada o yace moribunda?<br />

Todas y cada una de estas palabras son claves. Si una mujer ha llevado<br />

una vida medio muerta, es muy probable <strong>que</strong> las respuestas a estas cuatro preguntas<br />

estén manchadas de sangre. El aspecto asesino de la psi<strong>que</strong>, parte de cuya<br />

tarea <strong>con</strong>siste en cuidar de <strong>que</strong> no se produzca ningún <strong>con</strong>ocimiento <strong>con</strong>ciente,<br />

seguirá dejando sentir sus efectos de vez en cuando y arrancará o envenenará<br />

cualquier brote <strong>que</strong> aparezca. Es su naturaleza. Es su misión.<br />

* En la época romana antigua, la persona, palabra derivada del etrusco, era la máscara <strong>que</strong> se<br />

ponían <strong>los</strong> actores para interpretar las obras. Cubría toda la cabeza y cambiaba según <strong>los</strong> distintos<br />

personajes <strong>que</strong> se tenían <strong>que</strong> representar. (N. de la T.)<br />

Por <strong>con</strong>siguiente, desde un punto de vista positivo, sólo la persistencia de<br />

la sangre en la llave induce a la psi<strong>que</strong> a aferrarse a lo <strong>que</strong> ha visto, pues hay<br />

una censura natural de todos <strong>los</strong> a<strong>con</strong>tecimientos negativos o dolorosos <strong>que</strong> ocurren<br />

en nuestras vidas. El ego censor desea <strong>con</strong> toda seguridad olvidar <strong>que</strong> ha<br />

visto la habitación y <strong>los</strong> cadáveres <strong>que</strong> en ella había. Por eso la esposa de Barba<br />

Azul trata de frotar la llave <strong>con</strong> crin de caballo. Echa mano de todo lo <strong>que</strong> puede,<br />

de todos <strong>los</strong> remedios de la medicina popular femenina para curar las laceraciones<br />

y las heridas profundas: las telarañas, la ceniza y el fuego, todos el<strong>los</strong> asociados<br />

<strong>con</strong> la vida y la muerte <strong>que</strong> tejen las Parcas. Pero no sólo no <strong>con</strong>sigue cauterizar<br />

la llave sino <strong>que</strong> tampoco puede poner término a la situación fingiendo <strong>que</strong><br />

no existe. No puede impedir <strong>que</strong> la llavecita llore sangre. Paradójicamente, mientras<br />

su antigua vida se muere y ni siquiera <strong>los</strong> mejores remedios <strong>con</strong>siguen disimularlo,<br />

la mujer despierta ante su propia hemorragia y, gracias a ello, empieza a<br />

vivir.<br />

La mujer antaño ingenua tiene <strong>que</strong> afrontar lo ocurrido. La muerte a manos<br />

de Barba Azul de todas sus "fisgonas" esposas es la muerte del femenino creador,<br />

del potencial capaz de desarrollar toda suerte de vidas nuevas e interesantes. El<br />

depredador se muestra especialmente agresivo cuando tiende emboscadas a la<br />

naturaleza salvaje de la mujer. En el mejor de <strong>los</strong> casos trata de menospreciar y,<br />

en el peor, de cortar la <strong>con</strong>exión de la mujer <strong>con</strong> sus propias percepciones, inspiraciones,<br />

investigaciones y demás.<br />

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