genero- asimetria langabeziaren irudikapen sozialean - Euskara

RESUMEN
representación. En palabras de Moliner “Ce n´est pas parce qu´une cognition est
fortement reliée à toutes les autres qu´elle est centrale, c´est parce qu´elle est centrale
qu´elle est reliée aux autres. Et elle est centrale parce qu´elle entretient un lien
privilegié avec l´objet de représentation. Ce lien est symbolique et il résulte des
conditions historiques et sociales qui ont présidé à la naissance de la représentation”
(Moliner, 1994, p. 202). En otras palabras, los elementos centrales estructuran la
representación y por ello son los elementos más conexos de la representación
(Moliner, 1994). El aspecto cuantitativo de la conexión no confirma sin embargo la
hipótesis de centralidad, ya que según Moliner (Moliner, 1994) una alta conexión no
es la causa de la centralidad sino su consecuencia. Así, en la centralidad hay que
diferenciar dos aspectos, el cuantitativo y el cualitativo. Los elementos centrales
tienen cuatro características: 1) valor simbólico, 2) fuerza asociativa, 3) saliencia y 4)
alta conexión. Las dos primeras características son cualitativas y las dos últimas
cuantitativas. Para confirmar la hipótesis de la centralidad se deben identificar las
características cualitativas.
Si se rompe la relación simbólica entre un elemento central de la
representación y el objeto de la representación, éste último cambia de significado
(Moliner, 1988). Para poner en marcha esta técnica en primer lugar se necesita crear
un escenario ambiguo (Moliner, 1994), que suscite en los sujetos la representación
que estamos estudiando (hay posibilidad también de utilizar esta técnica con un
formato más simple, ver Moliner, 1995; Tafani, 1997; Flament, 1999; Abric, 2003). A
esta parte se la denomina fase de inducción. En nuestra investigación, en el caso de
un hombre desempleado, el escenario presentado para inducir la representación de
desempleado es el siguiente: “el señor XXX no tiene una actividad remunerada, no tiene
que cumplir un horario…”. Posteriormente, una vez inducido el escenario, se añade la
información contraria al elemento que deseamos testar (fase de puesta en cuestión).
En nuestro caso se añadía, por ejemplo en relación a la dimensión económica lo
siguiente: “…y no tiene problemas económicos.” Con el escenario ambiguo, se provee la
oportunidad al sujeto de negar en la fase posterior de refutación la representación
inducida anteriormente (en este caso de un hombre en paro). Por ello es
especialmente importante que en el escenario no se haga referencia directa al objeto
de representación (Moliner, 1994). Después de inducir la representación y de poner
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