17.11.2016 Views

en colombia

2cAqXFr

2cAqXFr

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

604 el registro mercantil <strong>en</strong> <strong>colombia</strong><br />

La virtualización de los servicios de registro de las cámaras de comercio 605<br />

Después de muchos años de controversia suscitados por la falta de unificación<br />

de un criterio por parte de la doctrina <strong>en</strong> cuanto a establecer si la<br />

firma digital reconocida por la Ley 527 de 1999 era el único tipo de firma que<br />

podía ser equiparable con la firma manuscrita, o si, por el contrario, cualquier<br />

tipo de firma electrónica cumplía con los criterios equiparables a la firma<br />

manuscrita, dotando, de esta manera, de validez jurídica y probatoria a los<br />

docum<strong>en</strong>tos que fueran firmados por cualquiera de estos mecanismos tecnológicos,<br />

surge y se aprueba el Decreto 2364 de 2012 (confróntese Artículos<br />

2.2.2.47.1. y sigui<strong>en</strong>tes del Decreto 1074 de 2015), por el cual se reglam<strong>en</strong>ta el<br />

artículo 7 de la Ley 527 de 1999 sobre firma electrónica y establece lo sigui<strong>en</strong>te:<br />

«Artículo 5. Efectos jurídicos de la firma electrónica. La firma electrónica<br />

t<strong>en</strong>drá la misma validez y efectos jurídicos que la firma, si<br />

aquella cumple con los requisitos establecidos <strong>en</strong> el artículo 3 de<br />

este decreto». Conforme a lo establecido <strong>en</strong> este artículo, se da por<br />

concluida la controversia anteriorm<strong>en</strong>te señalada y se concluye que<br />

no solo la firma digital, sino cualquier firma electrónica que se utilice<br />

para firmar cualquier docum<strong>en</strong>to electrónico, le proporcionará validez<br />

y efectos jurídicos de la misma manera que una firma manuscrita<br />

lo hace. Lo anterior debe <strong>en</strong>t<strong>en</strong>derse bajo lo señalado <strong>en</strong> el artículo<br />

3 del mismo Decreto, así: «Artículo 3. Cumplimi<strong>en</strong>to del requisito de<br />

firma. Cuando se exija la firma de una persona, ese requisito quedará<br />

cumplido <strong>en</strong> relación con un m<strong>en</strong>saje de datos si se utiliza una firma<br />

electrónica que, a la luz de todas las circunstancias del caso, incluido<br />

cualquier acuerdo aplicable, sea tan confiable como apropiada para<br />

los fines con los cuales se g<strong>en</strong>eró o comunicó ese m<strong>en</strong>saje».<br />

De esta manera, cada vez que se firme un docum<strong>en</strong>to por medio de una<br />

firma electrónica, debe analizarse el contexto y el tipo de transacción que va<br />

a realizarse para que de esta manera se pueda establecer cuál es el mecanismo<br />

tecnológico más apropiado para cada caso <strong>en</strong> concreto. Con esto, el<br />

decreto reglam<strong>en</strong>tario deja <strong>en</strong> manos de las partes la decisión de escoger<br />

o elegir el tipo de firma electrónica que desee utilizar para firmar los docum<strong>en</strong>tos<br />

con forme al nivel de seguridad que pret<strong>en</strong>da garantizar.<br />

De conformidad con lo anterior, puede concluirse que <strong>en</strong> Colombia se<br />

<strong>en</strong>cu<strong>en</strong>tran reconocidas tanto la firma electrónica (género) como la firma<br />

digital (especie), y que si bi<strong>en</strong> las dos pued<strong>en</strong> producir los mismos efectos<br />

jurídicos como mecanismos de aut<strong>en</strong>ticación, también es cierto que exist<strong>en</strong><br />

profundas difer<strong>en</strong>cias <strong>en</strong> la carga probatoria de los atributos de seguridad<br />

jurídica arriba explicados por la interv<strong>en</strong>ción del tercero d<strong>en</strong>ominado <strong>en</strong>tidad<br />

de certificación. La difer<strong>en</strong>cia, <strong>en</strong>tonces, es exclusivam<strong>en</strong>te probatoria,<br />

pues si bi<strong>en</strong> la firma digital de manera automática incorpora la aut<strong>en</strong>ticidad,<br />

integridad y no repudio, <strong>en</strong> la firma electrónica es necesario probarlos,<br />

además de determinar que se trata de un mecanismo confiable y apropiable.<br />

Este tratami<strong>en</strong>to probatorio difer<strong>en</strong>te está justificado por la firma <strong>en</strong><br />

la que se emit<strong>en</strong>, por la tecnología que utilizan y por la interv<strong>en</strong>ción de un<br />

tercero de confianza.<br />

Sin embargo, los dos mecanismos coexist<strong>en</strong> <strong>en</strong> nuestro ord<strong>en</strong>ami<strong>en</strong>to<br />

jurídico, t<strong>en</strong>i<strong>en</strong>do, <strong>en</strong>tonces, una utilidad distinta, pues la firma electrónica<br />

será aplicable cuando estemos <strong>en</strong> pres<strong>en</strong>cia de un acuerdo previo <strong>en</strong>tre las<br />

partes, relaciones de perman<strong>en</strong>cia, de confianza; mi<strong>en</strong>tras que la firma digital<br />

ti<strong>en</strong>e especiales características probatorias, es un mecanismo que elimina<br />

la discusión sobre la pres<strong>en</strong>cia de atributos de seguridad jurídica y no requiere<br />

de acuerdo para su utilización. Su utilización v<strong>en</strong>drá dada por el análisis<br />

de riesgos de la información que haga cada <strong>en</strong>tidad, empresa u organización<br />

(riesgos de suplantación, de alteración o de repudio), y por la naturaleza misma<br />

del docum<strong>en</strong>to o del trámite que se realice por medios electrónicos. Por<br />

ejemplo, <strong>en</strong> el caso de títulos valores electrónicos, que ti<strong>en</strong><strong>en</strong> d<strong>en</strong>tro de sus<br />

características la libre circulación, pret<strong>en</strong>der utilizar un mecanismo distinto<br />

a la firma digital resulta completam<strong>en</strong>te inapropiado, pues este tipo de docum<strong>en</strong>tos<br />

electrónicos, que se pued<strong>en</strong> <strong>en</strong>dosar tantas veces se quiera, deb<strong>en</strong><br />

garantizar el equival<strong>en</strong>te idóneo de la firma y, adicionalm<strong>en</strong>te, deb<strong>en</strong> permitir<br />

que los destinarios del mismo puedan comprobar de manera confiable y<br />

apropiable la aut<strong>en</strong>ticidad e integridad del instrum<strong>en</strong>to.<br />

No cabe duda de que su utilización dep<strong>en</strong>derá del análisis de riesgos de<br />

la información electrónica y de las características del docum<strong>en</strong>to o trámite<br />

por medios electrónicos, pues si se quier<strong>en</strong> garantizar de manera inequívoca<br />

los atributos de seguridad jurídica de las comunicaciones electrónicas,<br />

el uso de la firma digital resulta fundam<strong>en</strong>tal. Incluso, <strong>en</strong> la actualidad es<br />

posible acceder a este tipo de mecanismos a precios competitivos d<strong>en</strong>tro<br />

de los refer<strong>en</strong>tes internacionales y <strong>en</strong> condiciones de servicio óptimas para<br />

la masificación de diversas actuaciones y trámites por medios electrónicos.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!