11.05.2013 Views

Reloj de Sol.pdf - Banco de Reservas

Reloj de Sol.pdf - Banco de Reservas

Reloj de Sol.pdf - Banco de Reservas

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

<strong>Reloj</strong> <strong>de</strong> <strong>Sol</strong><br />

nuestros días para revivir la infancia <strong>de</strong>l teatro y nuestra propia<br />

infancia cuajadas ambas <strong>de</strong> la más auténtica credulidad <strong>de</strong> la<br />

más auténtica adicción al milagro.<br />

Ni la negrura <strong>de</strong> la noche — los tópicos — , ni el poco barniz<br />

<strong>de</strong> cultura que nos haya tocado en suerte, ni la madurez<br />

más cumplida; ni los hábitos más convencionales; ni la rutina<br />

<strong>de</strong> todos los días… ha logrado nunca <strong>de</strong>spabilarnos <strong>de</strong> un todo<br />

<strong>de</strong> los remanentes <strong>de</strong>l ensueño, ni robarnos <strong>de</strong>l todo el sedimento<br />

<strong>de</strong> lo infantil y maravilloso que nos queda <strong>de</strong> nuestra<br />

niñez cristiana. Nada ha logrado nunca hacernos perfectamente<br />

lógicos, ni mucho menos escépticos. Ni completamente<br />

adscritos a las leyes estrictas <strong>de</strong> causa y efecto.<br />

En algún lugar <strong>de</strong>l espíritu aparece el resorte <strong>de</strong> la credulidad<br />

más espontánea, el gozo por las pantomimas <strong>de</strong>l Maese<br />

Pedro que carga su carromato con el Retablo <strong>de</strong> las Maravillas:<br />

el estímulo <strong>de</strong> la gracia, llámese ésta azar o milagro.<br />

De alguna manera los intrínsecamente crédulos (adscritos<br />

a alguna forma in<strong>de</strong>leble <strong>de</strong> la infancia) persistimos en hábitos<br />

pueriles y nos alojamos en la esperanza como si ésta fuera<br />

nuestra propia casa, nuestra segunda piel, o como si estuviéramos<br />

viviendo en los primeros siglos <strong>de</strong> la cristiandad: en el<br />

mundo <strong>de</strong> lo maravilloso.<br />

Díganlo, si no, las persona corrientes y molientes, como<br />

ésta su servidora <strong>de</strong> uste<strong>de</strong>s, que hayan experimentado alguna<br />

vez la sorpresa <strong>de</strong> lo absolutamente inesperado y hermoso; la<br />

dulzura <strong>de</strong> lo que aparentemente no tiene más razón <strong>de</strong> ser que<br />

el puro azar o la más pura obra <strong>de</strong> milagrería. Por ejemplo,<br />

cuando llega un mensajero y nos trae la carta más improbable:<br />

<strong>de</strong> una amiga entrañable que se perdió en el horizonte hace<br />

cuchimil años — una Renata auténtica, renacida en la distancia<br />

— y que reaparece ahora con todos sus nombres y apellidos,<br />

con casilla <strong>de</strong> correos en una tierra remota y que nos escribe<br />

confiada y <strong>de</strong>vota a través <strong>de</strong> un Maese Pedro <strong>de</strong> turno por si su<br />

carta logra hacerse camino hasta nosotros… Y lo logra.<br />

175

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!