Reloj de Sol.pdf - Banco de Reservas

II Cruzando fronteras: Lo que más admiro
en las Mujeres.
E n días pasados habíamos comentado con convicción algunas
de las razones — entre muchas — que me asisten para
admirar en sus ejecutorias — en sentido general — a los hombres…
Hoy me aplico a exponer las razones que me hacen admirar
al género femenino y no sólo por identifi cación natural con mi
propio género, sino también por convicción.
A lo largo de años he observado con detenimiento en los
distintos ambientes donde me ha tocado vivir, que hay un común
denominador siempre evidente que no es posible ignorar
sea cual sea la generación, la época o el país enfocado…
Ese común denominador no es otro que la identifi cación de
la mujer con lo que la rodea… Ella es capaz de computar, sin
más instrumentos que su propia intuición — su sensibilidad
— una cantidad de conocimientos, un volumen impresionante
de percepciones, para volcarlos en una valoración ajustada y
precisa de las gentes y situaciones que confronta. Todo lo cual
no es privativo de una clase instruida y preparada escolar, académica
o profesionalmente. La mujer en general está dotada
de una capacidad innata para entender la vida. La entiende de
una forma natural y asume con entereza una carga ilimitada
de confl ictos. Ella encuentra por sí misma las fórmulas para
simplifi car lo complicado, para asimilar lo no explicado, para
ir a la raíz de las cosas y hasta para injertar una especie de don
adivinatorio allí donde no llegan sus conocimientos.
Recuerdo, entre otros ejemplos, la palabra con que el doctor
Expósito, eminente pediatra cubano que atendía a mis hijos
664