Reloj de Sol.pdf - Banco de Reservas

Carmen Quidiello de Bosch
pies y brazos sino también los gestos mínimos de cada uno de
los dedos de las manos y hasta de los pies. Cada gesto — cada
estar — multiplica la danza de la danzarina y de esa danza fluye
una cosmovisión, una filosofía y una dignidad reveladoras
que apabullan nuestros criterios occidentales sin dejar por eso
desfallecer nuestra capacidad de aprehensión del conocimiento
nuevo que surge en algo que desde ese momento sentimos
como nuestro en función de humanidad.
La sabiduría, la opción en la apertura de un nuevo conocimiento
nos ha tocado con su gracia — la de la bailarina — y
ya nunca seremos los mismos de antes ni en nuestro ser ni en
nuestro estar porque se nos ha añadido un concepto cósmico
de ambos términos. Nuestro ser y estar se confabulan de una
nueva opción (la del ser y la del estar) en una nueva apertura
debido a una nueva comprensión de ser y estar infinitos del
hombre.
¡AHORA! *No.895* 19 DE ENERO DE 1981
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