10.07.2015 Views

La educacion sexual en el sistema educativo publico uruguayo

La educacion sexual en el sistema educativo publico uruguayo

La educacion sexual en el sistema educativo publico uruguayo

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

Entonces le pedí al <strong>en</strong>tonces profesor titularde la Cátedra, Fortunato Ramírez, que mepermitiera hacer la monografía final d<strong>el</strong>posgrado de psiquiatría sobre impot<strong>en</strong>cia<strong>sexual</strong>. Eso me llevó a estudiar todo lo queera <strong>sexual</strong>idad, lo que no me <strong>en</strong>señaron <strong>en</strong>la Facultad de Medicina com<strong>en</strong>cé a estudiarsistemáticam<strong>en</strong>te. Como soy medioobsesivo, redefiní prácticam<strong>en</strong>te todas laspalabras que utilicé. Así surgió mi primerlibro que una editorial de Bu<strong>en</strong>os Aires publicó<strong>en</strong> <strong>el</strong> 1978. Cuando empecé a estudiary ver lo poco que sabía, me interesé cadavez más. Al poco tiempo me casé, <strong>en</strong> únicasnupcias. En aqu<strong>el</strong> <strong>en</strong>tonces recibimos unascharlas prematrimoniales <strong>en</strong> la iglesia dePunta Carretas, ahí a la vu<strong>el</strong>ta de dondevivía <strong>el</strong> Hno. José Luis Urrutia. Entoncesun médico –que sin ninguna duda no estabamuy actualizado– nos hizo muy bi<strong>en</strong> 10 o12 chistes, pero no nos dijo nada. Nos reímosy pasamos bárbaro, pero de <strong>sexual</strong>idadno hablamos. A mí se me ocurrió acercarmeal cura párroco y decirle que estaba escribi<strong>en</strong>douna monografía d<strong>el</strong> posgrado <strong>en</strong>psiquiatría, algo de <strong>sexual</strong>idad y le preguntési me permitirían dar las charlas prematrimoniales.A la primera tuve una d<strong>en</strong>uncia.Había hecho la apología de las r<strong>el</strong>acionesprematrimoniales. Después, gracias a esovino un equipo d<strong>el</strong> Movimi<strong>en</strong>to FamiliarCristiano a escuchar mi charla, me esmeréun poco más. Quedaron conv<strong>en</strong>cidos deque para combatir <strong>el</strong> embarazo indeseado,<strong>el</strong> aborto y miles de problemas, había queutilizar bi<strong>en</strong> los métodos anticonceptivos.Yo lo dije así, <strong>en</strong> g<strong>en</strong>eral, no especifiqué sime refería al método natural o artificial. Enesa época la Iglesia todavía no había sacadouna declaración <strong>en</strong> contra de la píldora,<strong>en</strong>tonces di charlas para todo <strong>el</strong> equipo nacionald<strong>el</strong> Movimi<strong>en</strong>to Familiar Cristiano.Tras esas charlas me invitaron comunidadesjudías, protestantes, laicas, colegios laicos,colegios r<strong>el</strong>igiosos, <strong>en</strong> Montevideo, <strong>en</strong> <strong>el</strong>interior. Me recorrí los 19 departam<strong>en</strong>tosy Marta, mi esposa, me acompañaba. Aúnembarazada <strong>el</strong>la siempre iba con su panza.Hasta que un día le dije, bu<strong>en</strong>o, mirá, esmucho sacrificio para vos, dejame ir solo.Fue cuando me sugirió que <strong>en</strong>señara <strong>en</strong>Montevideo para no t<strong>en</strong>er que viajar tanto.En ese mom<strong>en</strong>to, <strong>en</strong> 1976, con un grupode unas 20 personas habíamos reflotado laSociedad Uruguaya de Sexología (creada<strong>en</strong> 1964, pero que tras un corto períododejó de funcionar). T<strong>en</strong>íamos una reuniónci<strong>en</strong>tífica por semana <strong>en</strong> la Facultad deMedicina y <strong>en</strong> <strong>el</strong> Hospital de Clínicas. Nosabíamos nada, pero íbamos a intercambiarnuestra ignorancia. Recuerdo que una vezcuatro varones hablámos sobre la homo<strong>sexual</strong>idadcuando uno de los profesores deginecología pidió la palabra y nos dijo: siyo no los conociera bi<strong>en</strong> diría que ustedesson homo<strong>sexual</strong>es, porque están hablandomuy bi<strong>en</strong> de los <strong>el</strong>los.En esa época habían muchos prejuicios yerrores. Me acuerdo que una vez invitamosa un profesor que nos dijo: Como ustedesbi<strong>en</strong> sab<strong>en</strong>, la esquizofr<strong>en</strong>ia se origina <strong>en</strong>la masturbación. Y todos saltamos, no. Élera un profesor y después fue director de uninstituto que después fue Universidad. Elhecho es que había muchos errores. T<strong>en</strong>íamosque luchar contra muchas cosas comoesas, y después empezaron a llamarnos d<strong>el</strong>os medios de pr<strong>en</strong>sa.Les voy a contar cómo fue. T<strong>en</strong>ía la radiopr<strong>en</strong>dida cuandó escuché que una mujerhablaba de la t<strong>en</strong>ista R<strong>en</strong>é Richards –qui<strong>en</strong>había v<strong>en</strong>ido a Uruguay de paseo– y decíaque era tran<strong>sexual</strong>, se había operado, queera varón y ahora mujer. En esa personadijo: “pobre mujer, no sabe qué es, pobrehombre, qué será lo que será, la verdad esque a mí me angustia, yo me preocupo”.Dijo un montón de cosas que demostrabanque no <strong>en</strong>t<strong>en</strong>día absolutam<strong>en</strong>te nada de loque estaba hablando. Entonces al terminarde hacer los domicilios d<strong>el</strong> Casmu comomédico psiquiatra, llegué a casa y llaméa Radio Carve, por primera vez llamaba aun medio de pr<strong>en</strong>sa. Me at<strong>en</strong>dió Antonio154

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!