10.07.2015 Views

La educacion sexual en el sistema educativo publico uruguayo

La educacion sexual en el sistema educativo publico uruguayo

La educacion sexual en el sistema educativo publico uruguayo

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

io de Salud Pública, pero no t<strong>en</strong>emos aniv<strong>el</strong> oficial una cifra acerca de cuántasadolesc<strong>en</strong>tes son madres tempranam<strong>en</strong>te.En un estudio regional de dos o tres añosse afirmaba que Uruguay t<strong>en</strong>ía uno de losporc<strong>en</strong>tajes más alto de embarazo adolesc<strong>en</strong>te,alrededor d<strong>el</strong> 18% <strong>en</strong> toda la región.El artículo que <strong>en</strong> este caso está si<strong>en</strong>dovulnerado d<strong>en</strong>tro de la Conv<strong>en</strong>ción de losDerechos d<strong>el</strong> Niño es <strong>el</strong> artículo 24.Respecto a la explotación <strong>sexual</strong> comercialt<strong>en</strong>emos <strong>el</strong> artículo 34 de la Conv<strong>en</strong>ción. Sibi<strong>en</strong> <strong>en</strong> <strong>el</strong> año 1996 no hubo recom<strong>en</strong>daciónsobre este punto, dada la realidad era urg<strong>en</strong>teponerlo sobre la mesa y <strong>en</strong> <strong>el</strong> informe.En diciembre de 1996, la OrganizaciónInternacional para las Migraciones (OIM),hizo un estudio exploratorio <strong>en</strong> los paísesd<strong>el</strong> Mercosur. Se constató que <strong>en</strong> Uruguayexiste explotación <strong>sexual</strong> comercial d<strong>en</strong>iños, niñas y adolesc<strong>en</strong>tes <strong>en</strong> cinco departam<strong>en</strong>tosy que <strong>en</strong> Nueva Palmira, M<strong>el</strong>o yRío Branco había tolerancia y/o induccióna la “prostitución” de m<strong>en</strong>ores.Una de las cosas más impactantes d<strong>el</strong>estudio y de las constataciones mediant<strong>el</strong>a pr<strong>en</strong>sa también, es que <strong>el</strong> hecho se hanaturalizado, <strong>en</strong>tonces la policía, la Justiciano lo ve como un d<strong>el</strong>ito, porque se hapres<strong>en</strong>tado como una alternativa fr<strong>en</strong>te ala pobreza. Fr<strong>en</strong>te a esto <strong>el</strong> Ministerio deSalud Pública y <strong>el</strong> Ministerio de DesarrolloSocial se comprometieron a organizar unplan específico.<strong>La</strong> última recom<strong>en</strong>dación respecto a latrata de niñas y de niños es que al Comitéle preocupaba, <strong>en</strong> <strong>el</strong> año 1996, que no sehubiera promulgado ninguna nueva medidar<strong>el</strong>ativa a aspectos que se refiere la Conv<strong>en</strong>ción;tales como leyes sobre adopcióninternacional, prohibición de la trata d<strong>en</strong>iños y prohibición de la tortura (artículos35 y 36). Hay una constatación que la trata,<strong>en</strong> Uruguay está invisiblizada, sólo s<strong>el</strong>a reconoce cuando la crónica roja de losdiarios hace alusión a algún caso concreto.Los casos que se conoc<strong>en</strong> son de mujeresadultas que fueron tratadas antes de cumplir18 años, es decir cuando eran aún niñas oadolesc<strong>en</strong>tes. Quiero recordar este caso d<strong>el</strong>a operación Montevideo que salió <strong>en</strong> lapr<strong>en</strong>sa <strong>en</strong> 2006. Los tratantes o traficantes,compraban a las jov<strong>en</strong>citas por 2.000 euros,todas reclutadas <strong>en</strong> zonas pobres de Montevideo.Hubo un gran sil<strong>en</strong>cio de políticos yde actores estatales. <strong>La</strong> OIM hizo un seguimi<strong>en</strong>toy constató que efectivam<strong>en</strong>te estaba<strong>el</strong> tema de la trata no era algo aj<strong>en</strong>o. Existeuna r<strong>el</strong>atora <strong>en</strong> Naciones Unidas que, <strong>en</strong> <strong>el</strong>informe d<strong>el</strong> año 2006, dijo que los estadosno pued<strong>en</strong> estar dándole la espalda al temade la trata, porque ésta se da fundam<strong>en</strong>talm<strong>en</strong>tepor las condiciones de pobreza quesufr<strong>en</strong> las jov<strong>en</strong>citas, para poder salir de supaísbuscando otras realidades.Dr. HÉCTOR MARTÍN: Si bi<strong>en</strong> cuandohablamos de familia a cada uno de nosotrosse nos repres<strong>en</strong>ta una const<strong>el</strong>ación de ideas,viv<strong>en</strong>cias, historias, es muy difícil unificarlas<strong>en</strong> una sola. Hablamos de algo que noses común pero también es difer<strong>en</strong>te paracada uno de nosotros. Creo que los aportesvinieron <strong>en</strong> distintas perspectivas. Se com<strong>en</strong>zóquizá por <strong>el</strong> aspecto de mayor patologíaque es la viol<strong>en</strong>cia. <strong>La</strong> viol<strong>en</strong>cia esla antítesis d<strong>el</strong> vínculo y no hay rol normalque acepte <strong>el</strong> estado de viol<strong>en</strong>cia. Por eso laviol<strong>en</strong>cia no establece r<strong>el</strong>aciones <strong>en</strong>tre laspersonas, las rompe. El primer concepto esnunca legitimarla bajo ninguna circunstancia,ni dar explicaciones o justificacionestriviales de la misma. Ante la pregunta dequé hacemos cuando somos víctimas de laviol<strong>en</strong>cia o la pres<strong>en</strong>ciamos y, sobre todo,cuando se nos es d<strong>el</strong>egada como autoridadinstitucional, lo primero que t<strong>en</strong>emos qu<strong>el</strong>ograr es poder romper con <strong>el</strong> secreto. Enese mismo estado de secreto la viol<strong>en</strong>cianos llama a reaccionar también con nuestraviol<strong>en</strong>cia. Todos somos capaces de reaccionarviol<strong>en</strong>tam<strong>en</strong>te <strong>en</strong> estados límites. Unosolo no puede hacerse cargo de algo tan327

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!