10.07.2015 Views

La educacion sexual en el sistema educativo publico uruguayo

La educacion sexual en el sistema educativo publico uruguayo

La educacion sexual en el sistema educativo publico uruguayo

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

sé cómo diablos le llaman ahora porque lehan cambiado los nombres a todo y yo hace14 años que a la ginecología no le doy p<strong>el</strong>ota–pues desde <strong>en</strong>tonces no me interesa laginecología, me interesa la sexología. Habíahecho un estudio durante un año <strong>en</strong> suclínica, y había comprobado que había unmontón de mujeres que v<strong>en</strong>ían a consultaral ginecólogo. Y esas mujeres v<strong>en</strong>ían porquet<strong>en</strong>ían dolores perman<strong>en</strong>tes <strong>en</strong> <strong>el</strong> bajovi<strong>en</strong>tre, dolores m<strong>en</strong>struales, barriga perfectam<strong>en</strong>tehinchada durante todo <strong>el</strong> mesque no se aliviaba, donde predominabandos cosas: la hinchazón y <strong>el</strong> dolor. Despuésse le agregaba todo un cortejo sintomáticosimpático y parasimpático que puede sercon náuseas, con vómitos, malestar, pero<strong>en</strong> un número muy importante. Crottoginilas d<strong>en</strong>ominó “recorredoras” de consultorio,porque esas mujeres –ya existía <strong>el</strong>mutualismo– pasaban de un médico al otro,de un ginecólogo a otro y todos t<strong>en</strong>íamosdistintos remedios con los cuales no curábamosa ninguna de <strong>el</strong>las. Lo más triste eraque terminaban <strong>en</strong> los cirujanos. Entoncesse operaba a loco, <strong>el</strong> útero estaba atrás y ledu<strong>el</strong>e, zás, se llamaba retroversión uterina.El útero está para atrás, <strong>en</strong> <strong>el</strong> medio, paraad<strong>el</strong>ante, son posiciones normales. Pero eranecesario, era necesario operar y <strong>en</strong>derezarla retroversión. Se le <strong>en</strong>derezaba, se le atabaad<strong>el</strong>ante. Le dolía más que antes, perojodete. Después seguíamos con otras operaciones,la poliquitosis ovárica, un triángulod<strong>el</strong> ovario, una tajada como de una naranja,porque de esa manera se sacaban los quistesque t<strong>en</strong>ía la mujer, la poliquitosis y se lemejoraba la congestión pélvica.Después, un emin<strong>en</strong>te cirujano, <strong>el</strong> profesorEstallano, una persona muy mayor <strong>en</strong>aqu<strong>el</strong>la época, inv<strong>en</strong>tó una operación quese llamaba la resección d<strong>el</strong> nervio presacro.Es decir, que le sacan <strong>el</strong> nervio simpático yparasimpático que inervaba todos los órganosg<strong>en</strong>itales de la mujer, donde incluía porsupuesto <strong>el</strong> útero, ovarios, vagina alta, baja,labios mayores, m<strong>en</strong>ores, clítoris también,todo, todo, le limpiaba toda la s<strong>en</strong>sibilidad.Operación de Estallano, resección d<strong>el</strong>nervio presacro. Y la mujer seguía comosi tal cosa, si antes no s<strong>en</strong>tía, ahora s<strong>en</strong>tíam<strong>en</strong>os, o s<strong>en</strong>tía más, no importaba. Pero <strong>el</strong>hecho es que operábamos y le pr<strong>en</strong>díamoscartucho, a todo bicho que caminaba lemandábamos bisturí. Era la época <strong>en</strong> qu<strong>el</strong>os ginecólogos y los cirujanos andabancon un bisturí <strong>en</strong> <strong>el</strong> bolsillo. Era la época<strong>en</strong> que los ginecólogos hacían fácilm<strong>en</strong>teoperaciones, como se la hicieron a Eva Perón,que t<strong>en</strong>ía un cáncer de cu<strong>el</strong>lo de útero,muy ext<strong>en</strong>dido y la operación consistió <strong>en</strong>sacarle <strong>el</strong> útero, los ovarios, la vagina, lavejiga y la terminación d<strong>el</strong> intestino grueso.Le abocaban los uréteres a la pi<strong>el</strong> y le hicieronun ano artificial, por supuesto. Éramostan bestias, pero tan bestias, que no p<strong>en</strong>sábamosnunca <strong>en</strong> ese pedazo de cuerpo quequedaba ahí, porque no sabías qué era loque mandabas a anatomía patológica y quées lo que ponías <strong>en</strong> la cama, porque la mitadse iba para anatomía patológica y la otramitad quedaba <strong>en</strong> la cama. No p<strong>en</strong>samos <strong>en</strong>lo que se llama calidad de vida, <strong>el</strong> respetopor la vida, <strong>el</strong> respeto por <strong>el</strong> sufrimi<strong>en</strong>to.Porque <strong>el</strong> sufrimi<strong>en</strong>to de esas mujeres yo lovi, lo viví y no lo toleré. Jamás pude tolerarese tipo de operaciones.Crottogini estudió durante todo un año portodos los medios diagnósticos que se disponían<strong>en</strong> aqu<strong>el</strong>la época, incluso la inyecciónde sustancias para estudiar la circulaciónv<strong>en</strong>osa de la p<strong>el</strong>vis, junto con <strong>el</strong> doctorRicardo Parada, por ejemplo, que todavíavive y otro de los que hizo ese trabajo esmi amigo <strong>el</strong> doctor Ricardo Topolansky. Y<strong>en</strong>tonces <strong>en</strong>contraron, como conclusión,que lo que t<strong>en</strong>ían esas mujeres era rémora,es decir, la rémora no es <strong>el</strong> pescadito d<strong>el</strong>tiburón, sino una cosa que se queda quieta,que es la circulación completam<strong>en</strong>te alterada.Todas las v<strong>en</strong>as dilatadas, <strong>el</strong> úteroatigrado porque estaba ll<strong>en</strong>o de sangre ytodo eso provocaba una dist<strong>en</strong>sión abdominalcomo la que podía s<strong>en</strong>tir una mujer166

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!