30.03.2024 Aufrufe

Diseño de libro Madame Bovary, portada, ilustraciones e interiores.

Sie wollen auch ein ePaper? Erhöhen Sie die Reichweite Ihrer Titel.

YUMPU macht aus Druck-PDFs automatisch weboptimierte ePaper, die Google liebt.

Madame Bovary

unas cualidades morales de paciencia y de energía,

y cuando le daban algún trabajo pesado, se apoyaba

preferentemente en ella.

Ahora bien, puesto que era un equino, había

que cortar el tendón de Aquiles, aunque luego hubiera

que meterse con el músculo tibial anterior a

fin de deshacerse del varus, pues el médico no se

atrevía de una sola vez a las dos operaciones, e incluso

ya estaba temblando, con el miedo de atacar

alguna región importante que no conocía.

Ni Ambrosio Paré aplicando por primera vez

desde Celso, con quince siglos de intervalo, la ligadura

inmediata de una arteria; ni Dupuytren cuando

hizo la primera ablación de maxilar superior tenían,

de seguro, el corazón tan palpitante, la mano

tan temblorosa, ni la mente en tanta tensión como

el señor Bovary cuando se acercó a Hipólito, con su

tenótomo entre los dedos, Y, como en los hospitales,

se veían al lado, sobre una mesa, un montón de hilas,

hilos encerados, muchas vendas, una pirámide

de vendas, todas las vendas que había en la botica.

Era el señor Homais quien había organizado desde

la mañana todos estos preparativos, tanto para deslumbrar

a la muchedumbre como para ilusionarse

a sí mismo. Carlos pinchó la piel; se oyó un crujido

seco. El tendón estaba cortado, la operación había

terminado. Hipólito no volvía de su asombro; se inclinaba

sobre las manos de Bovary para cubrirlas

de besos.

—¡Vamos, cálmate —decía el boticario—, ya

demostrarás después tu reconocimiento a tu bienhechor!

Y bajó a contar el resultado a cinco o seis curiosos

que estaban en el patio, y que se imaginaban

que Hipólito iba a reaparecer caminando normal.

304

Hurra! Ihre Datei wurde hochgeladen und ist bereit für die Veröffentlichung.

Erfolgreich gespeichert!

Leider ist etwas schief gelaufen!