El universo imaginario de Robert Margerit - Biblioteca Virtual Miguel ...

BREVE COMENTARIO DE LAS PRINCIPALES OBRAS DEL AUTOR
Asamblea nos invitan a reflexionar sobre las distintas posturas ideológicas y sobre el
paso de la monarquía constitucional a la república.
La Révolution III: Un vent d’acier
Por lo que respecta a Un vent d’acier, hay que decir que desde las primeras
páginas Margerit nos sumerge en las turbias aguas del Terror. La vida de los ciudadanos
transcurre en una atmósfera cada vez más opresiva. El número de detenciones aumenta
considerablemente y en las cárceles se hacinan numerosas víctimas del fanatismo. La
muerte llama continuamente a la puerta de hombres y mujeres que son sacrificados sin
haber tenido un juicio justo y la Revolución acaba engullendo a sus propios hijos. La
guillotina se convierte en el emblema de un periodo que el autor evoca con bastante
viveza; si bien, la sangre tiñe igualmente de rojo los surcos de los campos, la superficie
del mar y el suelo de algunos domicilios. Este tomo incluye el asesinato de Marat a
manos de Charlotte Corday, el levantamiento de la Vendée, las batallas terrestres y
navales contra los ejércitos aliados europeos y el final de los girondinos, los hebertistas,
los dantonistas y los robespierristas y se cierra con un breve epílogo que recoge las
reacciones y los cambios que se produjeron en las semanas que siguieron a la ejecución
del Incorruptible.
Con Claude nos movemos por los clubes, la Convención y los comités que se
hacen con todos los poderes; escuchamos a los intransigentes que quieren imponer su
criterio a cualquier precio, a quienes, asustados, están dispuestos a llegar a un acuerdo
con sus adversarios y a aquellos que justifican la violencia como medida provisional y
con la esperanza de poder establecer un orden en el que se apliquen las leyes. Con
Bernard participamos en las operaciones bélicas que se llevaron a cabo entre junio de
1793 y finales de julio de 1794 y experimentamos las mismas sensaciones de
desconcierto, frío, hambre o abatimiento que los soldados que lucharon en las filas
republicanas. Pero, además, vivimos episodios, magistralmente contados por el
narrador, en los que no intervienen ninguno de los dos: por ejemplo, las páginas en las
que se relata la odisea de Louvet o el hundimiento del Vengeur. Ambos pasajes
mantienen vivo el interés del lector hasta el final y, aunque conozcamos el desenlace, el
proceso de Danton y sus amigos también nos tiene en vilo y nos conmueve.
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