07.12.2012 Views

Eiji Yoshikawa MUSASHI 3. El Camino de la Espada

Eiji Yoshikawa MUSASHI 3. El Camino de la Espada

Eiji Yoshikawa MUSASHI 3. El Camino de la Espada

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

surraron algunas pa<strong>la</strong>bras entre ellos y empezaron a dar pasos<br />

más <strong>la</strong>rgos.<br />

Al llegar a <strong>la</strong> casa <strong>de</strong> Haiya, Kóetsu l<strong>la</strong>mó con <strong>la</strong> aldaba y<br />

acudió a abrirles un criado que llevaba una escoba. Kóetsu había<br />

cruzado <strong>la</strong> puerta y estaba en <strong>la</strong> parte <strong>de</strong><strong>la</strong>ntera <strong>de</strong>l jardín<br />

antes <strong>de</strong> darse cuenta <strong>de</strong> que Musashi se había quedado atrás.<br />

Volviéndose hacia <strong>la</strong> puerta, dijo:<br />

—Entra, Musashi. No tienes por qué titubear.<br />

Los tres samurais se habían acercado a Musashi, con los<br />

codos hacia afuera y <strong>la</strong>s manos en <strong>la</strong>s empuñaduras <strong>de</strong> sus espadas.<br />

Kóetsu no entendió lo que le <strong>de</strong>cían a Musashi ni <strong>la</strong><br />

respuesta en voz baja <strong>de</strong> éste.<br />

Musashi le dijo que no le esperase, y Kóetsu replicó con<br />

una tranquilidad absoluta:<br />

—Muy bien, estaré en <strong>la</strong> casa. Reúnete conmigo en cuanto<br />

hayas terminado con ese asunto.<br />

Uno <strong>de</strong> los hombres se dirigió a Musashi.<br />

—No estamos aquí para discutir si huíste para ocultarte o<br />

no. Soy Ótaguro Hyósuke, uno <strong>de</strong> los Diez <strong>Espada</strong>chines <strong>de</strong><br />

<strong>la</strong> casa Yoshioka. Te he traído una carta <strong>de</strong> Denshichiró,<br />

el hermano menor <strong>de</strong> Seijüró. —Sacó <strong>la</strong> carta y <strong>la</strong> tendió para<br />

que Musashi <strong>la</strong> viera—. Lée<strong>la</strong> y danos tu respuesta <strong>de</strong> inmediato.<br />

Sin pensarlo dos veces, Musashi abrió <strong>la</strong> carta, <strong>la</strong> leyó rápidamente<br />

y dijo:<br />

—Acepto.<br />

Hyósuke le miró con suspicacia.<br />

—¿Estás seguro?<br />

Musashi asintió.<br />

—Absolutamente seguro.<br />

La indiferencia <strong>de</strong> Musashi cogió <strong>de</strong>sprevenidos a los tres<br />

hombres.<br />

—Si no mantienes tu pa<strong>la</strong>bra, nunca podrás volver a poner<br />

los pies en Kyoto. ¡Nosotros nos encargaremos <strong>de</strong> ello!<br />

Musashi le miró con un atisbo <strong>de</strong> sonrisa, pero no dijo nada.<br />

—¿Estás <strong>de</strong> acuerdo con <strong>la</strong>s condiciones? No tienes mucho<br />

tiempo para prepararte.<br />

—Estoy <strong>de</strong>l todo dispuesto —respondió Musashi con<br />

calma.<br />

108

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!