Memorias VII Congreso Internacional 2017

través de la empresa sería adecuada. Sin embargo, hay que considerar que
también puede existir un control de la propiedad sobre la familia en tanto ésta
garantice que los intereses individuales y de carácter familiar no afectarán a la
empresa. De esta forma se presenta un control de ambos sentidos.
Asimismo Pérez (2008), menciona que la empresa – familia y propiedad son
sistemas que deben de tener un balance entre sí, es decir, el peso o importancia
asignado a cada uno de ellos deben de ser igual. Se identifican desequilibrios si
entre ellos se experimenta alguna de estas situaciones:
Desequilibrio familiar: si incluye entre sus filas un gran número de parientes de los
propietarios que no son capaces de dar valor a la organización e incluso pueden
disminuirlo; los parientes tienen mayores retribuciones económicas por el lazo
sanguíneo, independientemente de sus logros laborales; se fomenta el nepotismo;
se crean puestos con el único fin de dar cabida dentro de la empresa a parientes
desempleados, canaliza recursos hacia la familia, descuidando las necesidades
familiares.
Desequilibrio empresa: si para administrar adecuadamente la empresa se
descuida a la familia por un tiempo prolongado; si los recursos generados por la
empresa familiar no pueden ser disfrutados por la familia ni siquiera a mediano o
largo plazo. Si no se invierte en el crecimiento profesional del personal, en los
sistemas, entre otras cosas.
Desequilibrio propiedad: si las utilidades son utilizadas por el dueño de la empresa
familiar para su propio beneficio anteponiéndose las necesidades familiares y de la
empresa.
La presencia de alguna de estas situaciones en uno de los sistemas, ocasiona
como consecuencia la existencia de desequilibrios entre los otros dos.
Resulta importante explicar que en el proceso de profesionalización se mejoran las
habilidades de una persona para hacerla competitiva en términos de sus profesión
u oficio. Este proceso tiende a implicar el establecimiento aceptable de