27.03.2013 Views

ENDER EL XENOCIDA Orson Scott Card - los dependientes

ENDER EL XENOCIDA Orson Scott Card - los dependientes

ENDER EL XENOCIDA Orson Scott Card - los dependientes

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

tenía fuerza para esta labor, y Quim no fingía, confiaba en él para que lo levantara. Terminaron<br />

mirándose a la cara, hombro con hombro, las manos todavía juntas.<br />

−Eres un buen sacerdote −dijo Miro.<br />

−Sí. Y si alguna vez necesito un sparring, te llamaré.<br />

−¿Responderá Dios a tu plegaria?<br />

−Por supuesto. Dios responde a todas las plegarias.<br />

Miro tardó un instante en comprender qué quería decir Quim.<br />

−Me refiero a si atenderá mi ruego.<br />

−Ah. Nunca estoy seguro de esa parte. Dime más tarde si lo hace.<br />

Quim se dirigió, envarado y cojeando, hacia el árbol. Se inclinó y recogió del suelo un par de pa<strong>los</strong><br />

habladores.<br />

−¿De qué vas a hablar con Raíz?<br />

−Mandó decirme que tenía que hablar con él. Hay una especie de herejía nueva en uno de <strong>los</strong><br />

bosques.<br />

−Los conviertes y luego se vuelven locos, ¿eh?<br />

−La verdad es que no. Es uno de <strong>los</strong> grupos a <strong>los</strong> que nunca he predicado. Los padres−árbol se<br />

hablan entre sí, de forma que las ideas del cristianismo ya están en todas partes del mundo. Como<br />

siempre, la herejía se extiende más rápidamente que la verdad. Y Raíz se siente culpable porque se<br />

basa en una especulación suya.<br />

−Supongo que para ti es un asunto serio −observó Miro.<br />

Quim dio un respingo.<br />

−No sólo para mí.<br />

−Lo siento. Me refería a la Iglesia. A <strong>los</strong> creyentes.<br />

−Nada tan parroquial como eso, Miro. Los pequeninos han encontrado una herejía realmente<br />

interesante. Una vez, no hace mucho, Raíz especuló que, igual que Cristo vino a <strong>los</strong> humanos, el<br />

Espíritu Santo podría venir algún día a <strong>los</strong> pequeninos. Es una burda malinterpretación de la<br />

Santísima Trinidad, pero este bosque se lo tomó bastante en serio.<br />

−Me parece bastante parroquial.<br />

−A mí también. Hasta que Raíz me contó <strong>los</strong> detalles. Verás, están convencidos de que el virus de<br />

la descolada es la encarnación del Espíritu Santo. Tiene una especie de sentido perverso; ya que el<br />

Espíritu Santo siempre ha habitado en todas partes, en todas las creaciones de Dios, es apropiado

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!