27.03.2013 Views

ENDER EL XENOCIDA Orson Scott Card - los dependientes

ENDER EL XENOCIDA Orson Scott Card - los dependientes

ENDER EL XENOCIDA Orson Scott Card - los dependientes

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

CREADORES DE VIRUS<br />

− He estado pensando en lo que significará para nosotros viajar entre las estrellas.<br />

− ¿Además de la supervivencia de la especie?<br />

− Cuando envíos a tus obreras, aunque sea a años−luz de distancia, ves a través de sus ojos, ¿no?<br />

− Y saboreo a través de sus antenas, y percibo el ritmo de cada vibración. Cuando el<strong>los</strong> comen, yo<br />

siento cómo aplastan la comida con sus mandíbulas. Por eso casi siempre me refiero a mí misma<br />

como nosotros, cuando formo mis pensamientos de manera que Andrew o tú podáis comprender,<br />

porque yo vivo mi vida en la presencia constante de todo lo que el<strong>los</strong> ven, saborean y sienten.<br />

− No es del todo igual entre <strong>los</strong> padres−árbol. Tenemos que esforzarnos para experimentar la vida<br />

de cada uno. Pero podemos hacerlo. Aquí al menos, en Lusitania<br />

− No veo por qué habría de fallaros la conexión filótica.<br />

− Entonces también yo sentiré lo que el<strong>los</strong> sientan, y saborearé la luz de otro sol sobre mis hojas, y<br />

oiré las historias de otro mundo. Será como la excitación que supuso la llegado de <strong>los</strong> humanos.<br />

Nunca habíamos pensado que pudiera haber nada diferente al mundo que veíamos hasta entonces.<br />

Pero el<strong>los</strong> trajeron extrañas criaturas consigo, y el<strong>los</strong> mismos eran extraños, y tenían extrañas<br />

máquinas que obraban milagros. Los otros bosques apenas podían creer lo que les contaban<br />

nuestros padres−árbol de aquel tiempo. De hecho, recuerdo que nuestros padres tuvieron<br />

problemas para creer lo que <strong>los</strong> hermanos de la tribu decían acerca de <strong>los</strong> humanos. Raíz<br />

consiguió persuadir<strong>los</strong> poro que creyeran que no eran mentiras, locuras ni bromas.<br />

− ¿Bromas?<br />

− Hoy historias de hermanos bromistas que mienten a <strong>los</strong> padres−árbol, pero siempre <strong>los</strong> cogen y<br />

<strong>los</strong> castigan con dureza.><br />

− Andrew me ha dicho que ese tipo de historias se cuentan para animar una conducta civilizada.<br />

− Siempre es tentador mentir a <strong>los</strong> padres−árbol. Yo mismo lo hice algunas veces. No mentía. Sólo<br />

exageraba. Los hermanos me lo hacen a veces.<br />

− ¿Y <strong>los</strong> castigos?<br />

− Recuerdo quiénes mintieron.<br />

− Si nosotros tuviéramos una obrera que no obedeciera, la dejaríamos sola y moriría.<br />

− Un hermano que miente demasiado no tiene ninguna posibilidad de ser padre−árbol. El<strong>los</strong> lo<br />

saben. Sólo mienten para jugar con nosotros. Siempre acaban diciendo la verdad.<br />

− ¿Y si una tribu entera mintiera o <strong>los</strong> padres−árbol? ¿Cómo podríais saberlo?<br />

− Igual podrías hablar de una tribu que talara a sus propios padres−árbol, o que <strong>los</strong> quemara.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!