27.03.2013 Views

ENDER EL XENOCIDA Orson Scott Card - los dependientes

ENDER EL XENOCIDA Orson Scott Card - los dependientes

ENDER EL XENOCIDA Orson Scott Card - los dependientes

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

−Porque no quise. Porque no quería dejarla marchar. Porque creía que podía mantener esta antigua<br />

amistad y seguir siendo un buen marido.<br />

−No fue sólo Jane −suspiró Miro−. También fue Valentine.<br />

−Supongo que sí. Entonces, ¿qué hago? ¿Me uno a <strong>los</strong> Filhos hasta que llegue la flota y nos<br />

destruya a todos?<br />

−Haz lo mismo que yo.<br />

−¿Qué?<br />

−Toma aire. Déjalo escapar. Luego inspira otra vez.<br />

Ender reflexionó un momento.<br />

−Puedo hacerlo. Lo he estado haciendo desde que era niño.<br />

Sólo un momento más, la mano de Miro sobre su hombro. "Por esto debería haber tenido un hijo<br />

propio −pensó Ender−. Para que se apoyara en mí cuando fuera pequeño, y para apoyarme yo en él<br />

cuando sea viejo. Pero nunca he tenido un hijo de mi propia simiente. Soy como el viejo Marcáo, el<br />

primer marido de Novinha. Rodeado de estos niños y sabiendo que no son míos. La diferencia es<br />

que Miro es mi amigo, no mi enemigo. Eso ya es algo. Puede que haya sido un mal esposo, pero<br />

puedo entablar una amistad y conservarla."<br />

−Deja de compadecerte de ti mismo y vuelve al trabajo.<br />

Era Jane, hablando en su oído, y había esperado tanto tiempo antes de hacerlo que Ender casi estuvo<br />

a punto de llamarla para que se burlara de él. Casi, pero no del todo, y por eso lamentó su intrusión.<br />

Lamentó saber que ella había estado escuchando y observando todo el tiempo.<br />

−Estás enfadado −dijo Jane.<br />

"No sabes lo que siento −pensó Ender−. No puedes saberlo. Porque no eres humana."<br />

−Crees que no sé lo que sientes −observó ella.<br />

Ender sintió un momento de vértigo, porque por un instante le pareció que ella había estado<br />

escuchando algo mucho más profundo que la conversación.<br />

−Pero también yo te perdí una vez.<br />

−Volví −subvocalizó Ender.<br />

−Nunca del todo. Nunca fue como antes. Así que coge un par de esas lágrimas de autocompasión de<br />

tus mejillas y considera que son mías. Sólo para igualar el marcador.<br />

−No sé por qué me molesto en intentar salvarte la vida −masculló Ender silenciosamente.<br />

−Yo tampoco −respondió Jane−. Sigo diciéndote que es una pérdida de tiempo.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!