09.02.2015 Views

el-cuaderno-dorado_dorislessing

el-cuaderno-dorado_dorislessing

el-cuaderno-dorado_dorislessing

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

En cambio, hacia 1954:<br />

«La sucesión de nov<strong>el</strong>as con un marco africano continúa. Las fronteras de la<br />

guerra está narrada con habilidad y un considerable vigor intuitivo, sobre todo en lo<br />

que respecta a las r<strong>el</strong>aciones sexuales, más dramáticas. Sin embargo, hay<br />

ciertamente muy poco que añadir a propósito d<strong>el</strong> conflicto entre blancos y negros.<br />

La parc<strong>el</strong>a de los odios y las cru<strong>el</strong>dades de la segregación racial ha llegado a ser la<br />

más exhaustivamente analizada por nuestra nov<strong>el</strong>ística. Las cuestiones más<br />

interesantes suscitadas por este nuevo reportaje de la frontera racial son por qué,<br />

si la opresión y la tensión en <strong>el</strong> África colonizada por los blancos han existido<br />

durante décadas, bajo formas más o menos similares a la actual, sólo en los<br />

últimos años cuarenta y principios de los cincuenta se han explotado de manera<br />

artística. Si supiésemos la razón, comprenderíamos mejor las r<strong>el</strong>aciones entre la<br />

sociedad y <strong>el</strong> talento creador, entre <strong>el</strong> arte y las tensiones que lo alimentan. La<br />

nov<strong>el</strong>a de Anna Wulf ha surgido movida casi exclusivamente por la indignación<br />

sentida contra la injusticia: está bien, pero ya no es suficiente...»<br />

Durante este período de tres meses en que escribí críticas literarias, y leí<br />

diez o más libros a la semana, hice un descubrimiento: que <strong>el</strong> interés con <strong>el</strong> que<br />

leía estos libros no tenía nada que ver con lo que siento cuando leo, digamos, a<br />

Thomas Mann, <strong>el</strong> último de los escritores en <strong>el</strong> sentido antiguo, que usaban la<br />

nov<strong>el</strong>a para hacer afirmaciones filosóficas sobre la vida. El caso es que la función de<br />

la nov<strong>el</strong>a parece que está cambiando; se ha convertido en una avanzada d<strong>el</strong><br />

periodismo. Leemos nov<strong>el</strong>as para informarnos acerca de las áreas de la vida que no<br />

conocemos —Nigeria, África d<strong>el</strong> Sur, <strong>el</strong> Ejército americano, un pueblo minero, los<br />

grupitos de Ch<strong>el</strong>sea, etc. —. Leemos para enterarnos de lo que ocurre. De<br />

quinientas o mil nov<strong>el</strong>as, una sola posee la cualidad que una nov<strong>el</strong>a debería tener<br />

para serlo auténticamente: la cualidad filosófica. Leo la mayoría de las nov<strong>el</strong>as con<br />

la misma clase de curiosidad que un libro de reportajes. Casi todas las nov<strong>el</strong>as,<br />

cuando logran algo, son originales sólo porque informan sobre la existencia de un<br />

aspecto de la sociedad, de un tipo de persona que aún no había sido admitido en <strong>el</strong><br />

mundo general de la literatura. Los seres humanos se hallan tan divididos, se están<br />

dividiendo hasta tal extremo y subdividiéndose dentro de sí mismos como reflejo<br />

d<strong>el</strong> mundo, que tratan desesperada e inconscientemente de informarse de los otros<br />

grupos existentes dentro de su propio país, no digamos ya de los de otros países.<br />

Es una búsqueda a tientas de su propia totalidad, y la nov<strong>el</strong>a reportaje es uno de<br />

los medios para <strong>el</strong>lo. Dentro de este país, Inglaterra, la clase media no posee<br />

ningún conocimiento sobre la vida de la gente obrera, y viceversa; reportajes,<br />

artículos y nov<strong>el</strong>as son vendidos de un lado a otro de la frontera, se leen como si se<br />

investigara acerca de tribus salvajes. Aqu<strong>el</strong>los pescadores de Escocia eran una<br />

especie distinta de los mineros con que pasé unos días en <strong>el</strong> condado de Yorkshire;<br />

y ambos provienen de un mundo diferente d<strong>el</strong> constituido por un grupo de<br />

viviendas de las afueras de Londres.<br />

No obstante, soy incapaz de escribir la única clase de nov<strong>el</strong>a que me<br />

interesa: un libro dotado de una pasión int<strong>el</strong>ectual o moral tan fuerte que pueda<br />

crear un orden, una nueva manera de ver la vida. Ello se debe, sin duda alguna, a<br />

que me he desparramado en exceso. He decidido no volver a escribir una nov<strong>el</strong>a.<br />

Tengo cincuenta «temas» sobre los que podría escribir, y todos serían<br />

suficientemente aptos. Si hay algo de lo que podamos estar seguros, es de que<br />

seguirán fluyendo de las editoriales nov<strong>el</strong>as aptas e informativas. Yo sólo poseo una<br />

de las menos importantes cualidades necesarias para escribir: la curiosidad. Es la<br />

curiosidad d<strong>el</strong> periodista. Sufro tormentos de frustración y de deficiencia en razón<br />

de la imposibilidad de introducirme en las áreas de la vida que mi modo de vivir, mi<br />

educación, sexo, ideas políticas y diferencias de clase, me prohíben. Es la<br />

enfermedad de alguna de la mejor gente de la época actual: los unos soportan bien<br />

sus efectos, mientras que los otros acaban cascados a causa de <strong>el</strong>lo; es una nueva<br />

65

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!